La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha desvelado que, tras su salida del Ministerio de Igualdad, "ofrecieron" a Irene Montero una embajada en el extranjero para mantenerla al margen de la política nacional, sin desvelar quién, ni cómo, ni dónde. A ojos de la líder morada, esta opción habría sido "para que dejara de dar problemas" durante las negociaciones de Gobierno y en la relación de los morados con Sumar, del cual se acabó emancipando meses después.
Aunque Belarra no ha querido concretarlo, fuentes de la dirección de Podemos aseguran a EL ESPAÑOL que el destino de la embajada era Chile, país en el que Montero guarda importantes lazos empezando por su presidente de la República, el izquierdista Gabriel Boric.
Asimismo, las mismas fuentes señalan que fue la propia Yolanda Díaz quien ofreció "la salida" a Belarra, un extremo que desde Sumar niegan tajantemente. Según este relato, la oferta se habría producido en una reunión entre las dos líderes en el Ministerio de Trabajo, en agosto, al negociar la posible entrada de los morados en el Gobierno. La reunión acabó con Belarra siendo despedida de un portazo.
En aquel momento, tanto Montero como Belarra eran todavía ministras y Podemos tenía aspiraciones de revalidar un asiento en el Consejo de Ministros. En un principio, los morados aspiraban a reeditar Igualdad, pero ni Yolanda Díaz ni el PSOE lo permitieron debido al perfil conflictivo de Montero y su polémica alrededor de la ley del sólo sí es sí.
En cambio, los socialistas sí accedieron a que Podemos preservara otra cartera, Derechos Sociales, para atar en corto a los cinco diputados morados y mantener unido el grupo parlamentario de Sumar, actualmente fragmentado. Fuentes cercanas a la negociación aseguran que el ministro de Justicia, Félix Bolaños, trasladó la oferta a Yolanda Díaz semanas antes de cerrar el Gobierno, pero la vicepresidenta la desechó y nunca llegó a presentársela a Podemos.
[Moncloa le dijo a Sumar que aceptaba incluir un ministro de Podemos pero Yolanda Díaz lo desechó]
Irene Montero, candidata
"Me ofrecieron una salida política para Irene y cuando lo hicieron me eché a llorar", ha confesado Belarra durante la presentación de la candidatura de Montero a las elecciones europeas. La lista de la exministra de Igualdad tendrá que someterse primero a primarias dentro del partido, aunque ningún competidor se ha presentado todavía.
A ojos de Belarra, que Montero se presente en Europa es una garantía de que "la izquierda seguirá sin hacer políticas de derechas", algo de lo que acusa al Gobierno desde que Podemos no forma parte de él. "Que le intentaran dar esta salida política me dio mucha rabia porque lo que Irene representa en este país es muy importante y necesario", ha reivindicado. Fuentes de Podemos aseguran a este periódico que fue Yolanda Díaz quien ofreció dicho cargo a Montero.
"Hubiera sido muy fácil para ella dar un paso a un lado y buscarse esa salida, pero decidió un paso adelante y presentarse a estas elecciones", ha analizado.
Montero, por su parte, vende su candidatura como un espacio necesario "frente a las derechas", pero también frente al espacio que representan en la actualidad los Verdes. "El proyecto europeo necesita una voz que no se conforme con lo que hay; frente a la barra libre de los especuladores, frente al recorte de derechos de las derechas y frente al conformismo de muchos sectores progresistas, también de los verdes. Necesitamos fuerzas poderosas, sin miedo", ha defendido.
La exministra de Igualdad ha defendido que su proyecto se basa en "el feminismo, el ecologismo, el antifascismo y la paz" como líneas estratégicas, y ha rechazado el "silencio" como forma de hacer política: "No nos gusta el silencio, es una posición política, las injusticias son hijas del silencio. Las injusticias pueden pervivir gracias al silencio de la mayoría".
Además de Montero y Belarra, han intervenido durante el acto Isabel Serra, Pablo Fernández, María Teresa Pérez, Serigne Mbayé, Diego Cañamero y Mar Cambrollé, miembros de su lista a las europeas en las primarias de Podemos.