El exministro de Sanidad, Salvador Illa, ha reconocido este lunes que se vio con Koldo García, el presunto cabecilla de la trama investigada en la Operación Delorme, pero ha asegurado que le despachó derivándole a los servicios técnicos y que su cartera, finalmente, no firmó ningún contrato con su empresa, Soluciones de Gestión.
Illa ha comparecido este lunes en la comisión de investigación de las mascarillas en el Congreso, donde ha dado ese dato hasta ahora desconocido. "Vi en el Ministerio al señor Koldo García una sola vez. Le indiqué cuál era el procedimiento (de contratación) y le dije que se dirigiera a los técnicos. El resultado es que no se contrató nada", ha dicho.
El exministro ha insistido en numerosas ocasiones, diciéndolo en castellano, en catalán y ofreciéndose a decirlo incluso en latín, que de su Ministerio "no salió ni un solo euro a esta empresa".
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Sin embargo, quien fuera su mano derecha en el Ministerio, Víctor Francos, ha contradicho la versión del exministro mientras comparecía en la comisión del Senado. Según ha explicado Francos, la primera vez que recibió a Koldo en el Ministerio lo hizo por indicaciones de Illa y que, en total, mantuvo tres encuentros con él.
Cuando el portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, le ha preguntado a Illa por las declaraciones de Francos, el exministro ha vuelto a subrayar que su Ministerio no formalizó ningún contrato con Soluciones.
Illa sí ha ecplicado que Soluciones formó parte de un acuerdo macro con otras 71 empresas que las habilitaba para la contratación si lo consideraban las Comunidades Autónomas. Pero ha dicho que ese acuerdo se ajustaba al Derecho y que ninguna comunidad lo hizo.
"Nadie de mi gabinete compró nada, eso lo hacían los técnicos del Ministerio, pero no mi gabinete. De todas formas, no salió ni un euro del Ministerio a esta empresa. Si lo hicieron las unidades de otros ministerios, lo ignoro", ha añadido.
Según ha explicado Illa, durante la pandemia el Ministerio que dirigía recibió muchas ofertas de particulares para vender material sanitario como mascarillas. "Muchas de esas ofertas eran realizadas por oportunistas. Los precios eran desproporcionados. Muchas otras las identificamos directamente como intentos de estafa", ha reconocido.
Para intentar gestionar el aluvión de ofertas, según ha dicho, el Ministerio estableció varios buzones de correo electrónico a los que se hacían llegar las propuestas y estas eran analizadas por los técnicos del Ministerio siguiendo tres criterios: el de solvencia de la empresa y las ofertas, el del perfil técnico de los productos y el del precio.
"Hoy, más de cuatro años después, sabemos que actuamos de forma correcta. Aunque hubo gente, unos pocos, que se aprovecharon de esa situación", ha dicho Illa. Prueba de ello, ha dicho, es que de las 72 investigaciones que se han abierto sobre contratos del Ministerio, "en ninguna se ha detectado ninguna irregularidad".
En modo electoral
Además de a Gabriel Rufián, Illa también se ha enfrentado a la portavoz de Junts, Míriam Nogueras. Los dos han mantenido una fuerte discusión con el exministro que sólo se puede leer en clave electoral: Illa es candidato del PSC para las catalanas del próximo 12 de mayo, donde compite contra ERC y Junts.
Ambos se han centrado en intentar desacreditar a Illa como gestor y le han afeado que dejara el Ministerio para presentarse a las últimas elecciones catalanas, las de febrero de 2021.
"Usted ha dicho que las contrataciones no iban de comprar barato, sino de comprar", ha subrayado Gabriel Rufián, que le ha achacado que haya pronunciado unas palabras así cuando habla de "millones de euros de dinero público".
"Cuando a un cargo público le timan, la culpa es del timador. Cuando sucede tres veces, la culpa es del cargo público. Esto es algo que le inhabilita, porque no se entera de nada. Además, cuando le timan tres veces es que hay tomate", ha asegurado Rufián.
Nogueras ha criticado que Illa hablase de la "buena voluntad" y ha dicho que cuando uno es servidor público "no es suficiente con la buena voluntad, necesitamos hacerlo con rigor".
"Hay informes internacionales que sitúan a España como uno de los países en los que peor se gestionó la pandemia y usted, como ministro de Sanidad, es el máximo responsable. De todo lo acontecido se desprende que usted no estaba preparado", ha añadido.