Moncloa informó al Congreso de que la tarea de la asistente de Begoña Gómez "se circunscribe a la actividad del presidente"

Es decir que, más allá de las cuestiones éticas, Álvarez habría podido incumplir la legalidad. Porque esta notificación del Gobierno no era una mera declaración sobre las funciones de esta alto cargo de Moncloa. Fue la transcripción, en una respuesta por escrito a preguntas de la oposición, de lo que establece el Real Decreto 890/2023, de 27 de noviembre, por el que se aprueba la estructura de la Presidencia del Gobierno.

Así consta textualmente en el artículo 2 del citado texto legal. En él se definen las "funciones del Gabinete de la Presidencia del Gobierno", que son nueve: 

Proporcionar al presidente la información política y técnica que resulte necesaria. Asesorarle en aquellos asuntos y materias que éste disponga; conocer los programas, planes y actividades de los Ministerios. El estudio y seguimiento de todos los programas y acciones de la UE. También, los de los gobiernos de las Comunidades Autónomas.

Asimismo, facilitar la comunicación con la ciudadanía. Asistir al presidente. Asesorarle en materia de Seguridad Nacional. Y aquellas otras actividades o funciones que le encomiende el Presidente del Gobierno.

Sólo este último punto podría servir justificar lejanamente a Álvarez el haber trabajado a las órdenes de Begoña Gómez. Pero nunca para asuntos profesionales fuera de las funciones "políticas y técnicas" de Presidencia.

El pasado nueve de octubre, el Gobierno remitió una respuesta, a la que ha tenido acceso este diario, con el número de Registro 43640 de entrada al Congreso.

La pregunta escrita había sido remitida al Ejecutivo dos meses y medio antes, el 27 de julio, firmada por ocho diputados del Partido Popular. Y contenía cuatro cuestiones generales sobre las personas y las funciones asignadas a éstas que "tiene asignadas Begoña Gómez con cargo a los Presupuestos Generales del Estado".

Este jueves, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, defendía que "los ciudadanos deben saber que en toda la historia, todas las parejas de los presidentes han tenido una persona que colabora en sus tareas de organización y logística". 

Pero eso no es lo que decía el Gobierno en su respuesta escrita del 9 de octubre al Congreso. Ni lo que dice el real decreto del Consejo de Ministros, del 27 de noviembre del año pasado. 

Es más, fuentes de la dirección del PP recuerdan que "no es verdad que todos los presidentes hayan tenido una persona encargada de trabajar en los proyectos privados de su pareja". Al contrario, según Génova, "el único presidente que ha puesto a un trabajador público a las órdenes de su mujer, para pedir dinero a empresas privadas para los proyectos empresariales de su esposa, y para ahorrarle una nómina a la sociedad de su cónyuge es Pedro Sánchez".

Relación estrecha

La directora de Progranas será sometida a interrogatorio en el Senado dentro de la que comenzó siendo llamada 'comisión Koldo' y que ya se ha convertido en un foro por el que han ido desfilando ministros, altos cargos, asesores y todo tipo de implicados e imputados en los diversos casos de presunta corrupción que cercan al Gobierno. 

Álvarez deberá explicar, según las fuentes consultadas, "si ha trabajado con o para Begoña Gómez" estos años en Moncloa. Así dejaba constancia el hecho de que los correos destapados por este periódico estaban enviados desde la cuenta oficial de Presidencia del Gobierno.

La relación de Álvarez y Gómez es muy estrecha, como se puede apreciar en la fotografía que ilustra esta información: acudieron juntas a la gala Top 100 de Magas, organizada por el suplemento femenino de EL ESPAÑOL, el pasado mes de febrero.

Cuando el PP lanzó sus preguntas en julio y cuando el Gobierno contestó en octubre, ya era conocido que Gómez había utilizado las dependencias de la Presidencia del Gobierno para atender reuniones y negocios personales. Pero aún no había trascendido que un alto cargo de Moncloa, Cristina Álvarez, dependiente de la Secretaría General de Presidencia, dedicaba al menos parte de su jornada a gestionar las actividades profesionales de la mujer de Sánchez.

Ese gabinete ha estado regido, en los seis años y medio de Sánchez como presidente, por Félix Bolaños (hoy ministro de Justicia y Presidencia), Francisco Martín (hoy delegado del Gobierno en Madrid), y Judit Alexandra González, en la actualidad.

"Cortafuegos"

Después de que este diario desvelara quién es Álvarez y qué actividades desempeñaba para la mujer de Sánchez, se produjo un movimiento sorprendente en la estrategia de defensa de Gómez.

Su abogado, el exministro del Interior socialista Antonio Camacho, entregó al juez Juan Carlos Peinado, varios emails de Álvarez en los que hablaba en nombre de Gómez. Con ellos, el letrado trataba de eliminar la acusación del delito apropiación indebida contra la esposa del presidente. 

Según el contenido de estos correos, Álvarez se comunicó con las empresas implicadas en la cátedra de Gómez y con la Complutense para acordar el uso del software que había sido desarrollado para su máster.

De hecho, se da la circunstancia de que la asistente de Moncloa es hermana de Esther Álvarez, que trabaja en la UCM como coordinadora del Máster de Transformación Social Competitiva que codirigía Begoña Gómez.

De este modo, tratando de descartar la apropiación indebida, el abogado de la mujer de Sánchez habría dado pruebas de otro delito, el de malversación de fondos públicos, en la Moncloa, según fuentes del departamento jurídico del PP. "Aunque sería fácilmente solucionable con el despido de la trabajadora, que es un cargo de confianza, alegando una extralimitación de funciones".

Es decir, que Álvarez podría estar siendo utilizada de "cortafuegos" para amparar a Gómez. "Quieren utilizarla con Begoña como a Ábalos con su marido, el presidente". Según las fuentes consultadas en el Senado, su comparecencia este viernes en el Senado puede convertirse en un interrogatorio: "Ella verá si consiente que la utilicen o prefiere colaborar".

Aunque otras fuentes de la dirección del PP consideran que eso es lo más probable. No en vano, los correos aportados a la causa por el abogado de Begoña Gómez son de la cuenta personal de Álavarez, no de la corporativa de Moncloa, como el desvelado por EL ESPAÑOL. "Eso parece indicar que es partícipe de la estrategia de Moncloa".