Los comicios de este 23 de julio no han dejado como resultado a ningún partido con la mayoría absoluta por lo que ahora deberán pactar entre ellos. Este panorama presenta diferentes escenarios posibles y de ello dependerá cuándo los españoles deberán volver a las urnas para elegir al siguiente presidente del Gobierno.

Todavía es algo que se encuentra en el aire, ya que muchos acuerdos entre los distintos partidos políticos comienzan ahora la negociación. Además, el candidato que se presente a la sesión de investidura deberá exponer ante los 350 diputados del Congreso el programa político del Gobierno que pretende formar y tratar de lograr la confianza de la Cámara. 

En el caso de que el candidato logre esta confianza de la cámara y sea elegido en la primera votación, las siguientes elecciones de España se celebrarían dentro de 4 años. Si no ocurre esto, a continuación, te contamos qué situaciones se tienen que dar para que se tengan que volver a repetir elecciones en nuestro país en este 2023.

¿Qué necesita un candidato para ser investido?

La situación de un empate entre los dos principales partidos políticos de nuestro país se ha hecho presente con los resultados de estas elecciones generales. Así, se podría dar un empate a 175 escaños entre bloques, del total de 350 diputados que hay, o se podría dar un empate con menor número de escaños entre bloques y abstenciones de otras formaciones.

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Con esta situación, El artículo 99 de la Constitución Española establece que tras la propuesta de un candidato por parte del rey Felipe VI para presentarse a la sesión de investidura, este expondrá ante los 350 diputados del Congreso el programa político del Gobierno que pretende formar y solicitará la confianza del Congreso. 

Si el Congreso de los Diputados, por mayoría absoluta de votos afirmativos, otorga su confianza al candidato, el rey Felipe VI lo nombra presidente del Gobierno. No obstante, si no se alcanza esta mayoría, se someterá la misma propuesta a una nueva votación -cuarenta y ocho horas después de la anterior-, y la confianza se entenderá otorgada si en este caso obtuviera la mayoría simple. 

Por tanto, el candidato que se presenta necesita una mayoría absoluta en la primera votación, o una mayoría simple en la segunda votación, para poder ser investido presidente del Gobierno. 

Asimismo, en el caso en el que el candidato sea elegido en la primera votación con mayoría absoluta, se proclamaría presidente y no habría otras elecciones generales de España hasta dentro de 4 años. 

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Mientras que si en este proceso de votación de la investidura, se produce un empate entre los partidos que pretenden formar Gobierno, esta situación supondría un bloqueo en el Poder Ejecutivo. Por tanto, si efectuadas las citadas votaciones no se otorgase la confianza para la investidura, se tramitarán sucesivas propuestas en la forma prevista en los apartados anteriores.

¿Tendría que haber una repetición electoral? 

En el caso de que transcurra un plazo de dos meses, desde la primera votación de investidura, y ningún candidato hubiese obtenido la confianza del Congreso, el rey Felipe VI disolverá ambas Cámaras y convocaría nuevas elecciones con el refrendo del presidente del Congreso. En este caso, se deberían celebrar elecciones a los 47 días, lo que implicaría que hubiera elecciones en Navidad.

Esta situación ya se dio en las elecciones generales de España en 2019, ya que se celebraron el 28 de abril de 2019. No obstante, España tuvo que volver a celebrar unos comicios siete meses después, el 10 de noviembre de 2019. 

El motivo de la repetición electoral fue que Pedro Sánchez, el candidato con más votos tras las elecciones del 28 de abril de 2019, no obtuvo los apoyos suficientes en el Congreso de los Diputados para ser investido.

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