El presidente de Omnium Cultural de Cataluña, Jordi Cuixart i Navarro, protagonizó un violento altercado contra la Guardia Urbana de Badalona el pasado 25 de septiembre, después de un registro en un vehículo en el que los agentes requisaron carteles en apoyo al referéndum ilegal del 1 de octubre.
El líder de Omnium llegó al lugar del registro junto con otras 18 personas y se manifestó en contra de las actuaciones de los agentes en actitud "hostil". Después, también acudió al lugar del registro José Antonio Téllez, tercer teniente de alcalde de Badalona del partido Guanyem Badalona, quien exigió a los agentes que entregaran todo el material intervenido, a lo que éstos se negaron. A continuación, Cuixart y Téllez se dirigieron al vehículo oficial de la Guardia Urbana y sacaron del interior el material intervenido. El concejal de Badalona repartió los 25 carteles en apoyo al referéndum ilegal entre los manifestantes allí presentes, que a su vez impidieron a los agentes que recuperaran el material.
Los hechos se detallan en el atestado entregado por la Guardia Civil a la jueza Carmen Lamela, que el pasado viernes decidió retrasar la posibilidad de adoptar medidas cautelares contra el mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, y contra los cabecillas de Omnium Cultural y ANC, Jordi Cuixart y Jordi Sánchez, a la espera de poder investigar los hechos posteriores a los altercados del 20 de septiembre, a partir de cuando fueron investigados por sedición.
Tras las comparecencias de Trapero, Sánchez y Cuixart, el fiscal de la Audiencia Nacional anunció que el atestado de la Guardia Civil podría dar lugar a la inclusión en el proceso penal de nuevas personas en condición de investigadas por posibles hechos de sedición, lo que podría apuntar a Téllez.