El exsecretario general del PP de la Comunidad Valenciana Ricardo Costa ha confirmado que fue el expresidente valenciano Francisco Camps el que decidió contratar con la empresa vinculada a la trama Gürtel Orange Market para organizar los actos de campaña de la elecciones autonómicas y municipales de 2007 y las generales de 2008.
Según Costa fue Camps, junto con el expresidente de las Cortes Valencianas Juan Cotino, quienes ordenaron que el PP se financiase "con dinero en negro" para poder sufragar estos comicios. Antes que ellos, habrían sido los exvicepresidentes Vicente Rambla y Víctor Campos, quien habría dejado la política, según Costa, por las presión sufrida por estos hechos, quienes se ocuparon de los pagos con dinero en efectivo aportado por los empresarios.
En este sentido, Costa ha reconocido que él mismo mandó en junio de 2007 a Álvaro Pérez 'El Bigotes' al despacho de la vicepresidencia del Gobierno para que cobrara con dinero en efectivo sus trabajos. Víctor Campos había explicado previamente a Costa que tenía el dinero preparado para él, lo que confirmaría que el PP pagó a Orange Market sus trabajos con dinero negro aportado por empresarios.
En la llamada que Campos hizo a Costa para avisarle de que tenía el dinero preparado, éste también le comunicó que dejaba la política y que sería Vicente Rambla, su sucesor en el cargo, quien se ocuparía de "esos asuntos" a partir de entonces, siempre según la versión de Costa.
"El PP se financió con dinero negro por orden de Camps", ha recalcado, igual que ha admitido que "cuando me enteré de que la campaña se financiaba con dinero negro no hice nada por evitarlo, asumo las consecuencias que eso conlleva". También ha asegurado, a preguntas de su defensa, que él nunca se lucró directamente de este funcionamiento irregular.
Así lo ha dicho durante su declaración en la Audiencia Nacional ante el juez José María Vázquez Honrubia. Ha comenzado diciendo que quiere "colaborar con la justicia" en la misma línea que han confesado los líderes de la Gürtel y que va a explicar con "todo detalle el sistema de financiación" de las campañas.
Costa, que está acusado de delitos electorales y falsedad documental por los que la Fiscalía pide para él 7 años y 9 meses de prisión, ha relatado cómo un día el vicepresidente valenciano Víctor Campos le llamó a su despacho y le mostró unos sobres que le dijo que contenían dinero en efectivo entregado por empresarios que tienen relaciones con la administración o con el partido por encargo de Camps y el expresidente de las Cortes valencianas Juan Cotino.
Ha explicado que, ante esa revelación, se trasladó a Madrid para trasladar estos hechos al Partido Popular, se reunión con el entonces gerente del partido Luis Bárcenas y le contó estas circunstancias. Éste rechazó ese modo de financiación porque esa es una práctica prohibida en el PP y sería un "Filesa II".
El dinero era ingresado por Cristina Ibáñez
Según ha explicado Costa, ratificando lo que ya declararon los cabecillas de Gürtel en las sesiones anteriores de este juicio, la financiación de las campañas electorales de 2007 y 2008 se hicieron de tres maneras: con facturas correctas, con dinero en efectivo aportado por empresarios valencianos y con facturas giradas a los empresarios por Orange Market.
En el segundo de los casos, cuando el dinero era aportado por los empresarios en efectivo, se lo entregaban a la gerente del PP de la Comunidad Valenciana, Cristina Ibáñez y ésta lo ingresaba de 3.000 en 3.000 euros en sucursales del banco Santander de Valencia.
Costa ha expuesto al juez el detalle de tres pagos concretos de empresarios: la compañía Rover Alcisa habría aportado 150.000 euros al PP de la Comunidad Valenciana, 15.000 euros fueron aportados por la compañía Secopsa y 350.000 euros por la compañía de Enrique Ortiz.
Actos de Mariano Rajoy
En cuanto a los actos de campaña para las elecciones generales de 2008 celebrados en Valencia, Costa ha hecho referencia a dos en concreto, celebrados en la plaza de toros de Valencia.
Según el exsecretario general del PP de la Comunidad Valenciana, aunque era el PP de Génova el que elegía el sitio, la empresa que se encargaría de la puesta en marcha del acto, "Camps habría pedido financiación adicional para conseguir fuegos artificiales, una pantalla o un animador", según Costa. Complementos que ha cirado en 30.000 euros pagados por los empresarios.
Elecciones municipales
En cuanto a las elecciones municipales de 2007, Costa ha explicado que era el Partido Popular central quien autorizaba los fondos para cada municipio, pero también es consciente de que hubo al menos tres actos financiados de manera irregular: uno de la candadidata Sonia Castedo para un acto de Alicante ciudad, otro para un acto de campaña de Alberto Fabra para la alcaldía de Castellón y otro para la alcaldesa de Elda y expresidenta del PP de la Comunidad Valenciana, Adela Pedrosa, para dicha localidad.
Según Costa, la política le habría pedido que el PP de la Comunidad Valenciana financiara los actos de campaña de las municipales, algo a lo que se negó.
Vuelven los trajes de Camps
El exsecretario general del Partido Popular valenciano también ha relatado los supuestos sobornos de empresarios a Francisco Camps. Según su versión, a finales de 2008 mantuvo una reunión con Pablo Crespo, responsable contable de Orange Market, y éste le planteó "si una empresa del grupo (Grupo Correa) podría emitir una factura al Partido Popular valenciano por 20.000 euros para pagar gastos del señor Camps en prendas de vestir y yo le dije que no. Me pareció absolutamente desproporcionado", ha expuesto Costa el fiscal Carlos Alba y al juez Vazquez Honrubia.
Vuelve así a poner sobre la mesa el asunto que llevó al expresidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, a un juicio con Jurado Popular en Valencia y del que salió absuelto.
Costa ha manifestado también que los trabajadores de Correa, concretamente Álvaro Pérez 'El Bigotes', intentaron sobornarle a él mismo con objetos como un reloj de oro de la lujosa marca Breitling.
Vicente Rambla: "Costa era un embudo por el que pasaba todo"
El exvicepresidente de la Comunidad Valenciana, Vicente Rambla, se ha desvinculado de cualquier responsabilidad en los contratos de publicidad de las campañas electorales. A pesar de que unos minutos antes el exsecretario general del PP de la Comunidad Valenciana, Ricardo Costa, había apuntado hacia él asegurando que durante una época habría conocido y gestionado los pagos en negro, él lo ha negado. Ha devuelto la acusación hacia Costa asegurando que "era el embudo por el que pasaba todo", en referencia a los pagos irregulares a Orange Market.
"Me he dedicado siempre a la gestión del Gobierno y para una vez que me piden que me acerque al partido a ayudar fíjense en la que me he visto metido. Yo voy, ayudo, y me vuelvo a mi casa" se ha defendido.
El acusado ha explicado también que Camps le nombró director de campaña por "la buena relación que tenía con los políticos de Alicante, donde cada vez que el presidente hacía un acto, iban cuatro personas".
El exvicepresidente valenciano para el que la Fiscalía pide 6 años y medio de prisión por presuntos delitos electorales y de falsedad documental, también asegura que los responsables del PP tuvieron ocurrencias como "poner luces a un autobús de dos plantas" o pagar vídeos propagandísticos por un valor de 335.000 euros, dos acciones que nunca se llevaron a cabo.