La Fiscalía de la Audiencia Nacional no tiene previsto solicitar este viernes la prisión incondicional del ex mayor de los Mossos d'esquadra, Josep Lluis Trapero, citado a declarar por la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela para que explique su responsabilidad en los hechos del día 1 de octubre, cuando finalmente se celebró el referéndum ilegal en Cataluña.
Fuentes del Ministerio Público explicaron que, aunque existen indicios de un presunto delito de sedición, no ven en Trapero riesgo de fuga o de destrucción de pruebas ni tampoco peligro de reiteración delictiva, que son los supuestos en los que podría instarse la prisión incondicional. El exresponsable de la Policía Autonómica Catalana está encausado desde septiembre y siempre ha comparecido a los llamamientos judiciales.
En función del contenido de la declaración, los fiscales de la Audiencia Nacional se podrían plantear, si acaso, solicitar a Lamela la imposición de una fianza, pero sería siempre de una cuantía asumible, añadieron dichas fuentes.
A la imputación que ya pesaba sobre él por su responsabilidad en el asedio a la comitiva judicial que registró la Consejería de Economía los días 20 y 21 de septiembre, la jueza instructora sumó hace unos días una segunda imputación por otro presunto delito de sedición por su responsabilidad en los hechos ocurridos el día 1 de octubre.
La jueza de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, volvió a citarle a declarar el pasado 19 de febrero en un duro auto en el que le situaba como responsable del cuerpo de los Mossos d'esquadra que, lejos de obedecer las órdenes judiciales, actuó bajo el dictado político para garantizar que el 1-O se celebrara, contravigilando a policías y guardias civiles.
"La policía autonómica fue utilizada para controlar las acciones de la Guardia Civil y la Policía Nacional el día 1 de octubre, lo que debían comunicar a sus superiores", se podía leer en el escrito de la jueza.
El último escrito de la Fiscalía
El último escrito de la Fiscalía de la Audiencia Nacional, en el que también se pedía la imputación del exdirector de los Mossos d'esquadra, Pere Soler, y del secretario general de la consejería catalana de Interior, César Puig, recordaba la responsabilidad de Trapero en la actuación del Cuerpo catalán el día del referéndum ilegal.
En dicho escrito se apuntaba a que "el investigado Josep LLuis Trapero mantuvo durante todo el día contacto telefónico con Jordi Sánchez (el líder de ANC en prisión) hasta en 17 ocasiones, con lo que es claro que las condiciones que éste impuso a la comisión judicial fueron aceptadas por el Mayor de los Mossos como se deduce además de los contactos mantenidos con los mandos que estaban en contacto con la Intendenta Laplana y con el hecho de que la misma no pusiera objeción alguna a estas propuestas".
Trapero tendrá que hacer frente este viernes con su declaración a las contundentes pruebas que recaen sobre él. Ferrán López, el nuevo jefe de los Mossos nombrado tras el cese de Trapero, también está citado a declarar como testigo este viernes.