El exmayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, tendrá que sentarse en el banquillo acusado de dos delitos de sedición y uno de pertenencia a organización criminal por su responsabilidad en el procés catalán, concretamente por los hechos referentes al 20 de septiembre y el 1 de octubre, cuando se celebró el referéndum ilegal convocado por el Gobierno de Puigdemont.
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ha confirmado su procesamiento (el paso previo a la apertura de juicio contra él) por dichos delitos. La Sala también confirma el procesamiento de los jefes políticos del Cuerpo catalán César Puig, exsecretario general de la consejería de Interior y Pere Soler, exdirector de los Mossos. En su caso, por un delito de sedición y organización criminal. También se tendrá que sentar en el banquillo acusada de sedición la intendente Teresa Laplana.
Durante la instrucción, la jueza Carmen Lamela les consideró responsables de la inacción de los Mossos d'Esquadra durante el asedio a la consejería catalana el 20 y 21 de septiembre de 2017 y la celebración del referéndum ilegal del 1 de octubre.
En ambos casos, era su responsabilidad dirigir al cuerpo catalán para evitar situaciones de violencia en la calle y para garantizar que se cumplía la ley, tareas que, según la titular del juzgado central de instrucción número 3 de la Audiencia Nacional no cumplieron, sino que llegaron a obedecer a instrucciones políticas del Gobierno independentista de Puigdemont.
La Sala ha desestimado los recursos de apelación presentados por los cuatro acusados tras procesarles la jueza Carmen Lamela y confirma así que dicha causa continuará en fase de juicio una vez ha acabado la investigación de los hechos.