Los fiscales del caso Villarejo o caso Tándem han retirado al juez la solicitud de que el exdirectivo del BBVA Antonio Béjar, investigado por los encargos del banco a las empresas del comisario encarcelado José Manuel Villarejo deposite una fianza de 500.000 euros para eludir la prisión, según fuentes jurídicas.
Es la tercera vez que Béjar acude a la Audiencia Nacional a declarar como investigado. En la primera ocasión, a diferencia del resto de investigados que se acogieron a su derecho a no declarar, el directivo reconoció que el BBVA contrató en su departamento de Riesgos entre los años 2010 y 2013 los servicios de la empresa Cenyt de Villarejo para localizar morosos.
Tras la segunda, que se produjo el pasado viernes y a la que acudió para ampliar información, la Fiscalía solicitó al juez que obligara al exdirectivo a depositar una fianza de medio millón de euros para quedar en libertad porque consideraron que había riesgo de ocultación de pruebas.
Este lunes finalmente los representantes del Ministerio Público han retirado dicha petición puesto que Béjar se ha presentado a la declaración con nueva documentación, según fuentes jurídicas.
Destrucción de datos
Antonio Béjar ejerció hasta el pasado viernes como presidente de la empresa Distrito Castellana Norte, que impulsa la denominada Operación Chamartín. La pasada semana fue cesado del cargo por su condición de investigado en el caso Tándem y tras publicar el diario El País que dicha sociedad habría destruido hasta nueve discos duros con información de los contratos de Villarejo por parte del BBVA.
Precisamente sobre la destrucción de dicha documentación fue interrogado Béjar en su segunda declaración ante el juez Manuel García-Castellón. Una declaración tras la que la Anticorrupción solicitó al instructor que le impusiera la fianza de medio millón de euros para eludir la prisión.