El Tribunal Supremo ha condenado a pena de nueve años de prisión y nueve de inhabilitación al presidente de Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, por un delito de sedición por la "contribución necesaria" de las entidades soberanistas en el procés. La misma pena para el exlíder de la ANC Jordi Sànchez.
En la sentencia, la sala de lo penal del Supremo descarta condenar por rebelión a los Jordis, para quienes la Fiscalía pedía 17 años de cárcel, pero les atribuye un papel "decisivo" en la sedición orquestada por el Govern, con su "indiscutida capacidad de liderazgo y estrecho contacto con los dirigentes políticos nacionalistas".
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Los Jordis han sido condenados solo por sedición -sin concurso con malversación, como es el caso de Junqueras y el resto de exconsellers- dado que no tenían responsabilidades sobre los fondos públicos que el Supremo cree se desviaron para financiar los gastos del referéndum unilateral del 1-O. La sentencia los condena también a nueve años de inhabilitación.
Sobre Jordi Cuixart, el tribunal entiende que en su actuación se produjo un "progresivo in crescendo" que le llevó a "dar el salto desde las llamadas a la protesta, a las manifestaciones, a la movilización legítima -todo ello sin relevancia penal alguna- a empujar a la ciudadanía simpatizante con el movimiento secesionista a la resistencia activa y a la oposición por vías de hecho al cumplimiento de órdenes judiciales" que prohibían el 1-O.
Para la sala, la "actuación ulterior" de Cuixart demuestra que algunas proclamas que podrían considerarse "fruto del enardecimiento de unos discursos encendidos y de una retórica apasionada" no eran "puro simbolismo o metáforas", sino que llamaba a oponerse a la ejecución de los mandatos judiciales.
La sentencia reprocha a Cuixart que sitúe su "personal interpretación de los derechos fundamentales por encima de la efectuada por el Tribunal Constitucional" -el líder de Òmnium siempre ha defendido la desobediencia civil ante leyes injustas- y le recuerda que su actitud "llevaría al caos si fuese admitida y generalizada".
Para la sala, las manifestaciones en el juicio de Cuixart -que, recuerda, proclamó "lo volveremos a hacer" en su última palabra- "sintonizan en su totalidad" con la descripción del delito de sedición: "en realidad bastaría con reflejar los hechos que él asume y la interpretación que él mismo les confiere para encajarlos en el artículo 544 del Código Penal", añade la sentencia.
"Podemos dibujar la responsabilidad del señor Cuixart, que él no rehuye, ni disimula, ni esconde, llegando a verbalizar su decidida voluntad a seguir ajustando su conducta a esas pautas (...) en la multitudinaria oposición ejercida frente a las fuerzas y cuerpos de seguridad, tanto estatales como autonómicas".
Las penas impuestas para el resto de los acusados serían: 13 años para Junqueras; Joaquim Forn ha sido condenado a 10 años y medio de cárcel por sedición y por el mismo delito se condena a Carme Forcadell a 11 años y medio de cárcel.
El Tribunal Supremo ha hecho pública este lunes la sentencia del procés, que concreta también las condenas al resto de los principales responsables -no huidos- de los graves hechos ocurridos en esta comunidad autónoma en septiembre y octubre de 2017. La mayor condena ha recaído en Oriol Junqueras: 13 años.