Pocos minutos después de que, pasadas las tres de la tarde del 27 de octubre de 2017, el Parlament de Cataluña aprobara una declaración unilateral de independencia, el jefe de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, llamó al presidente del Tribunal Superior de Cataluña, Jesús Barrientos, y al fiscal superior, José María Romero de Tejada, para ponerse a su disposición por si creían necesario ordenar la detención del president Carles Puigdemont.
Trapero no se limitó a una conversación telefónica con las máximas autoridades de la Judicatura y de la Fiscalía en Cataluña, sino que puso por escrito su disposición a cumplir las órdenes que le dieran en relación a la DUI.
Esas cartas, de contenido similar y enviadas al TSJC y a la Fiscalía Superior a las 19.00, tres horas después de la resolución del Parlament, se han convertido ahora en pruebas de descargo que la defensora de Trapero, Olga Tubau, utilizará en el juicio que ha comenzado este lunes en la Audiencia Nacional.
"Habiendo tenido conocimiento de la aprobación de la declaración de independencia por parte del Parlamento de Cataluña en la tarde del día de hoy, y desconociendo las consecuencias jurídicas de esta declaración y sobre quién pueden recaer, este cuerpo policial se pone a su disposición para dar cumplimiento a las órdenes que se puedan derivar en relación con estos hechos", indicaba Trapero en esos escritos.
"De la misma manera", añadía, "le comunico que el cuerpo de Mossos d'Esquadra continuará garantizando la seguridad ciudadana y el orden público en Cataluña".
Las cartas fueron enviadas por correo electrónico a las direcciones oficiales de Barrientos y Romero de Tejada (ya fallecido) por parte del comisario de los Mossos Xavier Gàmez, que está citado a declarar en el juicio a propuesta de la defensa.
Trapero ya manifestó en sus declaraciones ante la jueza instructora Carmen Lamela que dio instrucciones a sus colaboradores más cercanos de preparar un plan para detener a Puigdemont y al resto de su Gobierno si así le era ordenado por los jueces o los fiscales.
Lo reiteró cuando compareció como testigo ante el Tribunal Supremo en el juicio del 'procés', el pasado 15 de marzo.
"El 27 de octubre yo llamo al fiscal superior de Cataluña y al presidente del Tribunal Superior de Justicia y les comento por teléfono que el Cuerpo está a disposición tanto de la Fiscalía como del órgano judicial", aseguró. "Desconocíamos la trascendencia jurídica [de la declaración de independencia], qué era aquello, qué delitos puede haber, pero veíamos que era una cosa que aparentemente era de cierta gravedad y nos poníamos a disposición del órgano judicial, especialmente por si ordenaban algún tipo de acción en ese sentido. Acciones, por cierto, que teníamos previstas desde dos días antes".
"¿Acciones como cuáles?", le preguntó el abogado del exconsejero de Interior Joaquim Forn, Xavier Melero. "La detención del president y de los exconsellers si se nos ordenaba. Es un dispositivo que teníamos preparado", contestó Trapero.