La Junta de Fiscales de Sala, la cúpula de la carrera, tendrá dos nuevas integrantes, Antonia Sanz y Teresa Peramato, elegidas este martes por la fiscal general, Dolores Delgado, para ser fiscal inspector y para coordinar la lucha contra la violencia sobre la mujer, respectivamente. Es la primera vez que una fiscal accede a la dirección de la Inspección.
Tal como estaba previsto, Delgado se ha inclinado de nuevo por candidatos afines a la Unión Progresista de Fiscales a la hora de los ascensos a la primera categoría de la carrera. En sus 14 meses de mandato, la fiscal general ha designado a siete fiscales de Sala, todos ellos de la UPF, su propia asociación.
Tanto Sanz como Peramato recibieron el apoyo mayoritario del Consejo Fiscal, que ha examinado otros 18 nombramientos. Desde la UPF se defiende como indiscutible la elección de Peramato, presidenta de esta asociación, dada su larga dedicación y su especialidad en violencia de género, de la que carecían los otros dos aspirantes al cargo, Álvaro Redondo y María Ángeles Garrido.
La UPF sostiene que los nombramientos han sido "plurales en su conjunto" y destaca que los otros tres puestos de la primera categoría que se dirimían este martes han recaído en un candidato no asociado y en dos de la mayoritaria Asociación de Fiscales. No obstante, en estos tres casos se trata de fiscales que ya ostentaban la primera categoría y los dos de la AF eran candidatos únicos y optaban a la reelección: Fidel Cadena, en el Tribunal Supremo, y Miguel Ángel Torres, en el Tribunal de Cuentas. Pedro Crespo, fiscal de Sala en el Supremo, pasa a dirigir la Fiscalía ante el Tribunal Constitucional. Todos ellos han tenido el respaldo mayoritario del Consejo.
De las seis plazas de fiscal superior que estaban en liza, dos han ido para los candidatos de la UPF: en Madrid Almudena Lastra y en Castilla-La Mancha Emilio Fernández, expresidente de esa asociación y con una estrecha relación con Delgado.
La responsable del Ministerio Público ha elegido como fiscal superior de Aragón a Asunción Losada, hasta ahora teniente fiscal en Zaragoza y no asociada. Y, en contra de lo que la asociación mayoritaria esperaba, ha renovado a Fernando Suanzes como fiscal superior de Galicia, con el apoyo de los cinco vocales de la AF y del teniente fiscal del Supremo, Juan Ignacio Campos.
Pilar Jiménez Bados, una de las pocas mujeres que ha logrado ser fiscal superior y que pertenece a la AF, ha sido reelegida para un nuevo mandato en Cantabria. Y otro candidato de la Asociación de Fiscales, Francisco Javier Montero, será el fiscal superior de Extremadura. Montero sucederá a Aurelio Blanco, que le ha dado su apoyo como vocal de la UPF en el Consejo.