La Audiencia Nacional ha dado el carpetazo definitivo a la pieza Carol del caso Villarejo, en la que se investigaba el supuesto encargo de Corinna Larsen, la antigua amiga íntima del Rey Emérito, al comisario de Policía para que éste espiara a la asistente española de la empresaria.
La Sala de lo Penal ha rechazado el recurso presentado por Podemos el pasado julio contra el auto del Juzgado Central de Instrucción número 6 que acordó el archivo de esta causa al no apreciar ningún delito.
En su recurso, el partido solicitaba su reapertura y que se tomase declaración, entre otros, a: Corinna Zu-Sayn Wittgenstein, el comisario José Manuel Villarejo, el socio de éste Rafael Redondo, el abogado suizo y gestor Dante Canonica, el expresidente de Telefónica Juan Villalonga o Álvaro de Orleans-Borbón, primo de Juan Carlos I.
Asimismo, pedían que se reclamase información al país helvético y a Mónaco —sobre el "supuesto entramado financiero de sociedades offshore" que atribuyen a Orleans-Borbón—, así como a Marruecos —acerca de los inmuebles propiedad de Corinna Larsen— y a Reino Unido, lugar de residencia de la empresaria.
Dante Canonica fue, junto a Arturo Fasana, el administrador de la Fundación Lucum, en la que Juan Carlos I ocultó al fisco español una "donación" del fallecido rey saudí Abdalá de 100 millones de dólares.
En un auto, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, los magistrados de la Sección Tercera repasan la instrucción practicada por el Juzgado en la pieza Carol y concluyen que algunos de los hechos a los que aludía el partido no tienen trascendencia penal o se abordan ya en otras causas.
Además, la investigación de la presunta revelación de secretos requiere de la denuncia de la supuesta víctima, quien no la presentó. Asimismo, para poder perseguir un posible delito de cohecho concertado en el extranjero era necesaria una querella del fiscal, que tampoco existía.
Respecto al supuesto encargo realizado por Corinna a Villarejo para que averiguara información sobre su asistente personal, de nacionalidad española, chequeando sus llamadas telefónicas y mensajes de correo, la Audiencia Nacional señala que no se ha podido probar que se hubieran practicado estas labores de espionaje, "ni siquiera en un estadio inicial".
En su recurso, Podemos también solicitaba que la asistente, N. R., declarase como testigo, "ofreciéndosele acciones". Es decir, posibilitándole que pudiera denunciar estos hechos. La Sala de lo Penal descarta citarla, ya que la instrucción "no ha podido concluir con evidencias de que el encargo se hubiera practicado".
La pieza 'Carol'
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional reabrió la pieza Carol sobre la base de dos audios encontrados en casa de José Manuel Villarejo tras su detención en 2017.
El excomisario había grabado el 7 de octubre de 2016 una conversación mantenida en Londres con Larsen, durante la que ésta le expresó su sospecha de que una de sus asistentes estuviera filtrando información sobre ella al Rey Emérito y al CNI. Villarejo se ofreció a "chequear" el teléfono español de la empleada.
El juez Manuel García-Castellón, atendiendo al criterio de la Fiscalía Anticorrupción, archivó el caso en octubre de 2020. Estableció que no existían "elementos suficientes que permitan sostener la comisión de delitos de cohecho ni de descubrimiento de secretos".
El auto de sobreseimiento exponía que la Policía, por encargo del instructor, informó de que no se habían realizado consultas en los archivos del Cuerpo por parte de Villarejo entre el 7 de octubre de 2016 y el 3 de noviembre de 2017. Asimismo, las conversaciones mantenidas entre Larsen y el excomisario se produjeron cuando éste ya no formaba parte del Cuerpo de Policía, lo que descartaba el cohecho.
García-Castellón sí recogía en su auto varios extractos de la agenda personal del excomisario, en los que se alude a Corinna. En uno de ellos, del 26 de octubre de 2016, se lee lo siguiente: "Vernos en PARÍS DÍA 8 con CORIN".
Otro, fechado casi un mes después, reza así: "Lo de CORIN muy bien, pregunto por el dato de un tal José Luis, viene a primeros de mes".
"De las entradas transcritas se podría inferir que se mantuvo el contacto [entre Corinna y Villarejo]", expuso el magistrado. Sin embargo, el auto reconocía que "no se ha podido encontrar ninguna entrada que confirme que el día 8 (se desconoce de qué mes) se vieran de nuevo ambos, ni han aparecido más audios o grabaciones que constaten que pudo haber nuevas citas y con qué finalidad".