Luceño pidió quedarse con test para su familia en plena crisis de recursos para los sanitarios

Mientras los sanitarios sufrían la carencia de material al inicio de la pandemia de la Covid-19, el empresario Alberto Luceño se permitió reclamar para beneficio de sus familiares una pequeña parte del material que vendió a la funeraria municipal de Madrid y con el que se embolsó, supuestamente, comisiones millonarias. Abrió WhatsApp y pidió un "favor".

"Lo que sí te pediré, como favor, es que, cuando lleguen los test, pueda tener cuatro para cada miembro de la familia", reza un mensaje que envió a Elena Collado, funcionaria y consejera de la Empresa de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid.

Luceño lo mandó a las 19.36 del 24 de abril de 2020, en una de las peores etapas de la pandemia, tras más de un mes de estado de alarma.

Así consta en el sumario del caso Mascarillas, iniciado después de que la Fiscalía Anticorrupción investigase este negocio de Luceño y de su socio, el aristócrata Luis Medina, e interpusiese una querella contra ambos que diese lugar a una investigación de la supuesta estafa en el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid.

"Claro que sí", respondió la encargada de negociar el contrato en representación de la compañía municipal. Luceño le precisó que pedía este favor porque necesitaba saber si su mujer, que trabajaba en un hospital, "ha tenido el IgG y el IgM". Es decir, los anticuerpos que constatan la presencia del coronavirus en el organismo o si ya se ha superado la infección.

En un mensaje posterior, del 31 de mayo del 2020, Elena Collado alerta a Luceño de que los test entregados a la empresa municipal son defectuosos. "Mil perdones por escribir en domingo, Alberto. Hay una parte de los test que no tienen la misma calidad que las otras tres. Sólo un 60%, lo que desaconseja que sigamos haciéndolos a nuestros empleados públicos", escribe la consejera al empresario. "Si podemos cambiarlos por otra partida, fenomenal; si no puede ser, tenemos que devolverlos", añade.

Tal y como indicó la Fiscalía Anticorrupción en su querella contra Luis Medina y Alberto Luceño, la Empresa de Servicios Funerarios y Cementerios de Madrid, participada al 100% por el consistorio de la capital, adquirió 250.000 test rápidos contra la Covid-19, por un precio total de 4.250.000 dólares (casi cuatro millones de euros).

"Estos precios los fijó Alberto Luceño y los impuso al Ayuntamiento de Madrid, amparándose en su falsa posición de fabricante y agente exclusivo de la compañía vendedora. Al hacerlo, ocultó que un elevado porcentaje del precio ofertado (aproximadamente el 60% en el caso de las mascarillas, el 81% en el caso de los guantes y casi el 71% en el caso de los test) correspondía a comisiones que los querellados iban a percibir", expuso el Ministerio Público.

"Gran parte de los test (...) eran defectuosos. Concretamente, de los 250.000 recibidos, sólo 75.000 tenían un nivel de sensibilidad aceptable (94%); 115.000 tenían un nivel de sensibilidad del 80%, y un lote de 60.000 test tenía un nivel de sensibilidad especialmente bajo, del 66,7%", reza la querella.

Otro de los mensajes intercambiados entre Alberto Luceño y Elena Collado desvela que el empresario solicitó "10 botes de reactivos", el líquido que acompaña a los kits para la realización de una prueba contra la Covid-19. "Tengo en casa test, pero no reactivos. Así controlo a mi familia", le escribió a la funcionaria en septiembre de 2020.

Otra oferta de test

Asimismo, uno de los últimos wasaps enviados por Alberto Luceño a Elena Collado revela que, ya en noviembre, una vez recibido todo el material de los tres contratos, el empresario vuelve a hacer otra oferta de más productos a la funcionaria de la funeraria municipal:

[4/11/2020] Alberto: Elena, por si te interesa: estamos vendiendo test de antígenos de [la compañía vendedora] Joysbio. Ya hemos vendido a 15 países y parece que va muy bien. Si estáis interesados, me tendrías que decir la cantidad para cotizar.

Ocho días más tarde, insiste:

[12/11/2020] Alberto: Por cierto, no me dijiste nada de los test de antígenos que te mandé.

Ella rechaza su oferta: "Perdona, había comprado Madrid Salud 60.000 hace un mes o así".