La defensa del banquero, exvicepresidente del Gobierno y exministro de Economía Rodrigo Rato ha calificado de "prospectiva", "masiva" e "indiscriminada" la investigación judicial sobre la fortuna del expolítico, por lo que ha solicitado la anulación de la causa judicial.
Así lo ha reclamado la abogada María Massó durante la primera sesión del juicio que se ha celebrado este viernes en la Audiencia Provincial de Madrid. La letrada ha reprochado que la investigación judicial contra Rato habría vulnerado su intimidad y el secreto provisional, por lo que ha cargado contra la labor de la Fiscalía, de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil y de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF), a los que atribuye "excesos" en la investigación que comenzó en abril de 2015.
Massó también ha lamentado la "patente indefensión" que habría sufrido durante la instrucción de esta causa el exministro, quien también fue presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y de Bankia.
Según lo ha resumido Massó en una larga intervención, de más de tres horas, se trató de una "búsqueda absoluta y prospectiva de toda su vida y su entorno". Especialmente, ha criticado el registro del domicilio del banquero, ordenado por el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid, el encargado de esta investigación que duró casi siete años.
La abogada ha solicitado al tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid que dos nuevos peritos declaren para valorar un peritaje ya realizado por otro profesional y ha pedido que sea interrogado, como testigo, quien fuera director de la Asesoría Jurídica de Bankia entre 2010 y 2011.
La Fiscalía pide para Rato cerca de 70 años de cárcel por presuntos delitos de blanqueo de capitales, corrupción entre particulares y delito fiscal, conclusiones que comparte con la Abogacía del Estado. El Ministerio Público le atribuye incrementos en su patrimonio, entre 2005 y 2015, que no habría justificado a Hacienda y que rondarían los 15,6 millones de euros.
La primera sesión del juicio estaba prevista para el pasado día 12, pero fue pospuesta a este viernes. Ha comenzado pasadas las 10.30 de la mañana. El tribunal, presidido por la magistrada Ángela Acevedo, ha aceptado la solicitud de otro de los investigados, el exdiputado José Manuel Fernández Norniella, de no tener que acudir al resto de sesiones, debido a su estado de salud. Además de Rato y Norniella, este viernes se han sentado en el banquillo de los acusados otras 15 personas.
Éste es el tercer juicio contra Rodrigo Rato, aunque los dos anteriores se celebraron en la Audiencia Nacional. En el juicio sobre las tarjetas black fue condenado a cuatro años y medio de prisión, una pena que el Tribunal Supremo acabó avalando en 2018. Pero el exministro de Economía, hombre fuerte en el Gobierno de Aznar, fue absuelto tras el juicio sobre la salida a Bolsa de Bankia.