La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha abierto una investigación por el apaleamiento de una piñata con la cara de Pedro Sánchez la pasada Nochevieja frente a la sede del PSOE en la madrileña calle Ferraz.
El evento, denominado Uvas en Ferraz y organizado por Revuelta, las juventudes de Vox, fue denunciado por el Partido Socialista.
Según informa este viernes la Fiscalía de la Audiencia Nacional, la misma ha procedido a la apertura de diligencias de investigación penal para el estudio de los hechos denunciados, la determinación de posibles delitos y la competencia para su conocimiento.
[Lea aquí la denuncia del PSOE ante la Fiscalía]
En su denuncia, los socialistas incluyeron seis posibles delitos: amenazas, injurias, delito de odio, desórdenes públicos, manifestación ilícita e injurias graves contra el presidente del Gobierno.
El PSOE, además, señaló a Vox por estar detrás del "hostigamiento" a todas sus sedes y alertó a la Fiscalía de que los ocurridos en Nochevieja "exceden la crítica política para colocar al PSOE y, en particular, a Pedro Sánchez en el objeto de la diana".
"Una exaltación de conductas con tintes violentos, de odio, de hostilidad, y discriminación que estamos viviendo en estos momentos, que incitan a actitudes no legítimas, como es un magnicidio o un linchamiento", describía la formación socialista en su denuncia.
El evento reunió a unas 300 personas el pasado 31 de diciembre en Ferraz. En un momento de la noche, algunas de ellas colgaron una piñata con la cara de Pedro Sánchez y comenzaron a apalearla.
La concentración, además, fue retransmitida por varios medios de comunicación y canales de YouTube, a quienes este jueves el PSOE avanzaba que retirará las credenciales de acceso a su sede y sus actos de partido.
Tal y como desveló EL ESPAÑOL, el organizador de las Uvas en Ferraz fue Antonio Martínez Vázquez, un exmilitar condecorado, de 58 años de edad, y que fue citado para declarar por la Policía. Su nombre es el que figuraba en el crowdfunding destinado a recolectar fondos para celebrar el acto y que logró reunir más de 20.000 euros. Durante su interrogatorio, aseguró que se limitó a "hacer un favor" a Revuelta, la organización que ejerce de facto como las juventudes de Vox.