De izq. a dcha.: Josune Méndez (AESTE), Mercedes Rivera (EL ESPAÑOL-Invertia) y Carlos García (Valdeluz-Arpada) en el II Foro Silver Economy .
II Foro Silver Economy (2024)

El sector residencial para mayores enfrenta la falta de profesionales, la subida de costes y el reto demográfico

A. Pérez
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El sector residencial para personas mayores enfrenta importantes desafíos en los próximos años, derivados del reto demográfico y del aumento de la demanda de servicios.

Durante el II Foro Silver Economy, organizado por EL ESPAÑOL-Invertia, Carlos García Carreras, director general corporativo de Valdeluz-Arpada, y Josune Méndez, secretaria general de la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (AESTE), coincidieron en que el crecimiento de la población mayor supone una oportunidad, pero también una preocupación para administraciones y empresas del sector.

Carlos García Carreras destacó que "la demanda será inmensa", pero alertó sobre la necesidad de construir 250.000 plazas residenciales adicionales en los próximos 10 años, lo que implicaría una inversión de 25.000 millones de euros y un gasto adicional serían 7.000 millones para prestar los servicios.

9. Conversación a dos. Los retos del sector residencial para mayores

Añadió que es necesario "casar oferta con demanda" y contar con productos adaptados a las diferentes necesidades de las personas mayores.

Por su parte, Josune Méndez afirmó que el reto demográfico "no puede ser abordado en solitario por el sector de los cuidados y residencias" y lo calificó como un "tema de Estado". Enumeró los principales desafíos: el reconocimiento social del sector, la falta de financiación, la integración de tecnología en los servicios y, especialmente, el déficit de profesionales.

Según Josune, para 2040 se necesitarán 300.000 nuevos profesionales, pero actualmente no hay soluciones únicas ni un motivo concreto que explique esta carencia. Es necesario "sentar a todos los agentes implicados" y trabajar en soluciones urgentes que garanticen ratios razonables de atención y calidad de los servicios.

Carlos subrayó que el déficit de profesionales es hoy en día el principal problema. Planteó soluciones como homologar los títulos de profesionales extranjeros y reforzar puestos intermedios. Advirtió que, si la situación persiste, podría afectar gravemente a los auxiliares y gerocultores, "el grueso de las plantillas", especialmente en épocas como el verano, donde ya se observan dificultades para cubrir puestos. También señaló la importancia de mejorar el reconocimiento del sector y las condiciones salariales.

Incremento de costes y financiación

El incremento de costes es otro de los factores que preocupa al sector. Josune Méndez explicó que los costes han aumentado de manera "muy significativa", a lo que se suma la inseguridad jurídica que desincentiva la inversión. Criticó la modificación de la Ley de Desindexación, que impide revisar los precios de los contratos públicos a pesar del contexto económico, lo que "lleva a muchas empresas al límite" y deja contratos desiertos.

Además, Méndez solicitó la equiparación del IVA entre los servicios públicos y privados, ya que actualmente el IVA es del 10% en la sanidad privada y del 4% en la pública. Esta medida, según ella, evitaría discriminar y penalizar a las personas que recurren a la sanidad privada.

Impacto de la reducción de jornada y del SMI

Carlos García Carreras alertó sobre los efectos económicos de la reducción de jornada laboral y el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Explicó que estas medidas implican un sobrecoste de 8,1% a partir del 1 de enero de 2024, mientras que las tarifas concertadas no se revisarán.

Según Carlos, no es buena idea implementar estos cambios "sin un plan" y propuso mejorar salarios en lugar de reducir horas, ya que "los profesionales prefieren conciliar mejor" antes que trabajar menos.

Josune Méndez también destacó la evolución en el perfil de las personas mayores, que son "cada vez más exigentes y con las ideas más claras". Esto obliga al sector a ofrecer servicios más personalizados y modelos residenciales más parecidos a un hogar que a un hospital.

Mencionó también las oportunidades que ofrecen las estancias temporales, tanto para la recuperación como para el respiro familiar en periodos vacacionales. Finalmente, Méndez subrayó la necesidad de fomentar los cuidados en el domicilio y modelos más flexibles que aborden los cuidados desde la prevención y la promoción de la autonomía personal, adaptándose a las demandas de una población que, con el tiempo, será cada vez más amplia y diversa.