Es día de partido para el Real Madrid de Baloncesto y los horarios para Pablo Laso (Vitoria, Álava, 13 de octubre de 1967) son sagrados, más aún cuando está a pocos minutos de dirigir la última sesión previa al encuentro. Por ello, y quizá por evitar una de sus conocidas 'lasinas', estoy preparado desde bastante minutos antes para hablar con el entrenador del equipo blanco.
Mi memoria guarda a buen recaudo cada una de las charlas que hemos tenido durante los últimos 9 años. Y es que hablar con este vitoriano de 53 años deja huella porque la conversación termina siempre convirtiéndose en una lección de profesionalidad, de gestión del éxito, de humildad y de ilusión. En definitiva, una lección de vida.
Con sus 20 títulos en el Real Madrid (2 Euroligas, 5 Ligas, 6 Copas, 6 Supercopas y 1 Intercontinental) se encuentra a solo 2 de Lolo Sainz y a 7 de Pedro Ferrándiz. Sin embargo, Laso huye de comparaciones ya que considera a estos dos técnicos "unos monstruos" y reconoce que su objetivo cuando llegó en 2011 fue recuperar "ese gen histórico del Real Madrid" que quizá se había perdido en los últimos tiempos.
Por encima de los títulos, Laso reconoce que su mayor satisfacción ha sido crear un equipo reconocible y con el que el aficionado se identifica. Para ello, entre charlas tácticas y viajes, intenta "inculcar los valores del Real Madrid a cada uno de los jugadores" que han llegado al club durante todos estos años.
Pablo Laso atiende a EL ESPAÑOL en el hotel de concentración del Real Madrid, una particular burbuja en la que se extreman las medidas de precaución. El "maldito coronavirus", como lo llama el técnico, ha cambiado a la sociedad y también al baloncesto. "Ahora no sabes si vas a poder entrenar mañana, solo puede pensar en el día a día".
Hablando sobre esa incertidumbre en algo tan exigente como el baloncesto profesional de élite, comenzamos la conversación con el ganador del Premio al Deporte Los Leones de EL ESPAÑOL 2020 que se entregará este lunes en el acto del V Aniversaraio de este periódico.
Cuando a uno le dan un premio como reconocimiento a su carrera, ¿se siente más mayor?
(Risas) No sé si la palabra es mayor, pero que duda cabe que un premio a una trayectoria tiene más valor que un reconocimiento puntual porque habla bien de tu trabajo en un largo tiempo. En mi caso, este premio lo veo como un reconocimiento al club y a la gente que trabaja cada día conmigo. Son muchas las personas con las que trabajo día a día para poder conseguir estos éxitos.
¿Y a qué persona le daría un premio Pablo Laso? ¿Quién sería su León particular?
Desgraciadamente, como muchas veces la actualidad es la que nos marca el camino, yo le daría el León al que terminara con esta pesadilla del coronavirus que nos ha tocado vivir y que nadie esperaba. Ese sería mi gran León. Es un momento complicado para toda la sociedad, por supuesto también para los deportistas, y ahora hay que pensar en cómo salir adelante.
¿Cómo ha cambiado el baloncesto con la pandemia y especialmente su trabajo?
En el deporte, y en mi trabajo, estamos muy obligados a adaptarnos y evolucionar en cuanto a cambio de jugadores, cambio de calendario, cambio de rivales... El entrenador tiene que estar siempre muy abierto a cambiar y a intentar siempre mejorar. Esto, que es aceptable, ahora es más complicado. Ahora estamos obligados a vivir el día a día sin mirar más allá. No sabemos si mañana jugaremos o no, si entrenaremos o no... Y esta es la nueva situación y los nuevos factores a la que tenemos que adaptarnos para seguir mejorando.
Te puedes acostumbrar a ganar, pero lucho mucho contra ello
20 títulos, 9 años en el Madrid... ¿qué sueño le queda por cumplir a Pablo Laso en el baloncesto?
Igual me estoy haciendo mayor, pero esos sueños eran de crío. Siempre he intentado que esas ilusiones se conviertan en realidad. Cuando era pequeño mi gran meta era jugar en el Baskonia, el equipo de mi ciudad. Cuando lo conseguí, hacerlo en la Selección. Luego poder ser entrenador y después cuando llegas al Real Madrid pues conseguir que el equipo sea reconocible y atractivo para la gente. Al final, son sueños muy de día a día. No pienso a largo plazo, disfruto del momento. Tengo un trabajo que me gusta en un gran club. Quizá sea la edad que te acorta esos sueños.
Puede ser porque ya lo ha ganado todo...
(Risas) Pues no lo sé. Cuando fiché por el Real Madrid no pensé en ganar títulos. Mi primera misión fue recuperar sensaciones y a la gente. Yo he vivido el Real Madrid de la antigua Ciudad Deportiva, el de los valores y de jugadores de época como Clyfford Luyk, Emiliano, Brabender, Corbalán, Vicente Ramos... Mi ambición era recuperar ese gen que el Real Madrid de Baloncesto siempre ha mostrado porque sabía que si lo conseguíamos, lucharíamos al más alto nivel y estaríamos muy cerca de los títulos o ganarlos.
Laso, Sainz y Ferrándiz. Nadie pondría en duda que este es el podio de los mejores entrenadores de la historia del Real Madrid. ¿Es un reto poder superar a estas dos leyendas en títulos?
No, no me lo planteo. No hay retos y menos cuando me hablas de Lolo y Pedro. Han sido dos referentes muy grandes en el madridismo y para el crecimiento del club. No me gusta compararme con ellos, pero mucho menos retarme. Yo disfruto con mi trabajo e intento que cada jugador que llega se identifique con esta camiseta. No tengo retos personales. Te diría que mi mayor reto ahora mismo es hacer un buen entrenamiento mañana. Es mi manera de ser. Dentro de mi respeto y admiración por Lolo y Pedro, jamás me plantearía un reto contra ellos porque hasta suena mal.
Acepto que no entrenaré al Real Madrid toda la vida
¿Se acaba uno acostumbrando a ganar?
Sí, te puedes acostumbrar a ganar, pero lucho mucho contra ello. Lo fácil es pensar que como estás acostumbrado a ganar, lo vas a hacer. Pero eso no es verdad. En baloncesto juegas contra un rival que te quiere derrotar, tú tienes que ser competitivo cada día. Muchas veces se valora más la victoria que el trabajo y eso es algo con lo que tenemos que convivir los entrenadores. Ojalá acostumbrarse a ganar fuera así de fácil como lo dices.
Cuando se gana tanto, la derrota es más decepcionante y frustrante. ¿Está Pablo Laso preparado mentalmente para perder?
Sí. Me preguntas sobre ganar y perder y para mí no es lo más importante. Perder es la mejor enseñanza, no solo en el deporte sino también en la vida. Obvio que ganar tiene más cosas buenas, pero muchas veces una derrota te tiene que enseñar un camino para hacer las cosas mejor. No sé si es estar preparado, sino aceptar. Realmente soy de los que cree que el resultado debe ser hacer bien el trabajo.
¿Entrenar algún día al Barça? ¿Ficharían ellos a Pablo Laso?
En las celebraciones y momentos de euforia siempre recuerda aquella mala racha, aquel partido que se perdió, aquellas lesiones... Se me viene a la cabeza la vez que le entrevisté después de ganar su primera Euroliga y me dijo que ya estaba pensando en que tenían un partido de Liga dentro de tres días. Me marcó mucho aquella conversación porque creo que le define como entrenador.
Puede ser. Me dices eso y parece que yo no disfruté aquella Euroliga. Mira, yo disfruto muchos los triunfos pero soy de los que creo que para ganar tienes que estar preparado. Hay un trabajo detrás. Mi manera de ser me hace disfrutar muchísimo, pero rápidamente cambiar el chip y pensar en lo siguiente. Ya está, el resultado está ahí y mañana hay que seguir trabajando y mejorando. Es la manera en la que entiendo el baloncesto.
Es una persona que vive el presente, pero llegará un día en que terminará su etapa en el Real Madrid. ¿Ha pensado ya alguna vez en el día después? ¿Entrenará en el extranjero, seguirá en la ACB o dirigirá alguna selección?
No lo he pensado mucho. Ningún entrenador es eterno. Disfruto del día a día y no pienso mucho hacia adelante. No tengo la sensación de que tendría que hacer esto o lo otro. Estoy en un gran club y acepto que Pablo Laso no entrenará al Real Madrid toda la vida.
¿Entrenaría alguna vez al Barcelona?
Nunca lo he pensado porque esta es una pregunta que nos hacéis a los profesionales, ¿pero y por qué no se la hacéis al club? Esto de que los entrenadores digan que no entrenarían o aquí, ¿por qué tengo que responder yo a eso? ¿Ficharían ellos a Pablo Laso? El entrenador es un profesional, aunque se puede tener una posición muy clara, como yo la tengo, pero esta es más una pregunta para el Barcelona que para mí.
Hemos tenido lesiones y bajas, vamos recomponiendo el equipo poco a poco
¿Ha rechazado muchas ofertas en los últimos años? ¿Hay alguna que se pueda contar?
Por mi manera de ser, no le pregunto a mi agente. Muchas veces me comienza a hablar y le digo que no me interesa. Me preocupa mi día a día y mi trabajo. Me hablas del futuro, que si la NBA o que si selecciones... No lo pienso. En el futuro buscaré ser feliz como lo soy ahora.
¿Qué le está pasando al Real Madrid en este inicio de temporada? En Liga hay una imagen y en Euroliga otra.
Es una pregunta que tiene doble sentido. Me lo dices por lo malo, pero yo te la puedo hacer por lo bueno. El equipo ha sido capaz de ganar la Supercopa y empezó competiendo muy bien. Luego hemos tenido problemas de lesiones y bajas, creo que vamos recomponiéndolo poco a poco. Independientemente de los resultados, yo veo al equipo creciendo. La Supercopa que se jugó en Tenerife refrendó que el Madrid va a seguir siendo muy competitivo, pero luego puedes ganar o perder. Lo que me preocupa como entrenador es que mi equipo siga creciendo y mejorando.
¿Lee lo que se escribe de usted en los medios? En Twitter está su alter ego, que es Pablo Lolaso y es columnista de EL ESPAÑOL, y dice que el equipo sigue la hoja de ruta normal: "Huevear en la primera parte de la temporada y arrasar a partir de febrero".
(Risas) Bueno... lo dice Pablo Lolaso y hace muy bien en decir lo que le da la gana (risas). Mi manera de ser es de los que piensan que el equipo debe jugar cada día mejor. Siempre hay un margen, no se juega perfecto nunca. El problema es cuando hacemos 20 mal y 80 bien. Entonces se dice que han hecho muchas cosas mal, pero nunca se hace hincapié en lo bueno. Ahora mismo estamos en el inicio de la temporada más extraña que se va a vivir en mucho tiempo. La pandemia nos tiene a todos en vilo, pero yo voy a intentar que eso nos afecte lo mínimo posible. Lo que está en mi mano es que el equipo siga mejorando para que en los momentos importantes de la temporada se esté bien.
Con este calendario tienen que estar de viaje cada tres días, ¿no es de locos con la situación actual? ¿La Euroliga no tendría que haber cambiado el formato por las circunstancias actuales?
Es una pregunta para una respuesta muy personal, pero es que yo soy el entrenador del Real Madrid. Estoy acostumbrado a jugar 70 o 80 partidos por temporada. La pandemia debe hacer cambiar y replantearse muchas situaciones, en eso estamos todos de acuerdo y debemos estar preparados. Desde que estábamos tomando café en el WiZink Center el 12 de marzo y se suspendió el partido contra el Estrella Roja estamos viviendo una normalidad diferente. Como entrenador, creo que es una situación difícil y que todos debemos reconducirla dentro de la máxima protección a la salud.
¿Qué le pide Pablo Laso a la actual temporada? ¿Confía plenamente en que el Real Madrid ganará títulos esta campaña también?
A la temporada le pido, primero, acabarla ya que ahora mismo es difícil. Cuando hacemos esta entrevista, el Real Madrid ha ganado el único título en juego. Te podría decir que levantar los que quedan, pero no es lo que pienso. Quiero que el equipo sea reconocible y con el que la gente disfruta, vibra y critica. ¿Y de títulos? Claro, me gustaría ganar todos como a cualquier entrenador al que preguntes. Para mí lo más importante es el trabajo para poder conseguirlos y hacerlo bien.