Cómo lograr que el transporte público por autobús recupere de forma definitiva los niveles previos a la pandemia de la Covid-19 e incluso consiga seguir creciendo en usuarios ha despertado un debate entre los partidarios de la liberalización del sector y los defensores del actual modelo concesional para las rutas interurbanas en el III Simposio del Observatorio de la Movilidad y las Ciudades organizado por EL ESPAÑOL-Invertia.
Durante su participación en la mesa 'Presente y futuro del transporte público', Pablo Pastega, director general de Flixbus en España y Portugal; Rafael Barbadillo, presidente de la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) y Alfonso Sánchez Vicente, director gerente de la EMT, han coincidido a la hora de definir los retos y las oportunidades que la actual situación de elevada inflación y alto precio de la energía representa para el sector.
Sin embargo, Barbadillo y Pastega han discrepado durante el debate sobre si el actual modelo basado en concesiones con el que opera el sector del transporte interurbano de viajeros en autobús en España es o no el mejor a la hora de impulsar de cara al futuro el uso de este medio de transporte en nuestro país.
Pablo Pastega, director general de Flixbus en España y Portugal, ha asegurado que la mejor manera de conseguir que viaje más gente en autobús es España es procediendo a la liberalización del sector, para que se dé al usuario "la oportunidad de elegir" cómo quiere viajar.
En este sentido, ha recalcado que el transporte público por autobús lleva varios años liberalizado en gran parte de Europa, salvo España, Rumanía, Hungría y Grecia, y ha asegurado que los datos registrados los países donde ya se han eliminado los modelos basados en concesiones demuestran que esta medida "tiene sentido".
Así, ha asegurado que la regulación actual, que es "previa a la democracia", es "inflexible y obsoleta", ya que "no permite la libre competencia entre empresas. Además, ha agregado que solo beneficia a un par de empresas, "que tienen el 80% del mercado y 260 millones de euros en facturación en concesiones caducas" desde hace años.
Barbadillo ha negado estas afirmaciones y ha afirmado que en el sector operan hoy en día más de 2.000 empresas. Además, ha agregado que este mercado ya se encuentra "liberalizado", ya que cualquier empresa se puede presentar a los concursos que convoca la Administración para gestionar una línea de transporte público interurbano.
Asimismo, ha remarcado que este sistema permite que siga dándose servicio en rutas que en la actualidad no son rentables. Eso es gracias a la compensación que permite que a las empresas que realizan estas rutas se les adjudique las que sí son rentables. Además, ha recordado que España es uno de los países de la UE en los que el autobús tiene más cuota modal, con más del 50% del total.
El presidente de la Confederación Española de Transporte en Autobús (Confebus) también ha defendido que este sistema permite conectar más de 8.000 poblaciones, así como que los usuarios disfruten de tarifas estables todo el año, a diferencia que ocurre con otros medios de transportes, en los que "llega la Nochebuena y suben los precios".
Por otro lado, también ha recalcado que el modelo de negocio de Flixbus consiste en operar a través de subcontratas, ya que no tiene ni autobuses ni conductores. Punto que ha sido negado por Pastega, quien ha asegurado que no trabajan con subcontratas sino con un modelo de asociación con empresas.
Pese a discrepar sobre el modelo de gestión de este servicio, ambos han coincidido entre ellos y con Alfonso Sánchez Vicente, director gerente de la EMT, en que, cuando el sector estaba consiguiendo dejar atrás la crisis de la Covid-19, se enfrenta ahora a nuevo desafío como es el elevado nivel de inflación y los altos precios de los combustibles como el gasoil, el gas y la electricidad.
Sánchez Vicente ha incidido en que venimos de un momento "muy complicado" como fue la pandemia, en la que la demanda se redujo "prácticamente a cero". Sin embargo, ahora que ya está en torno al 90% respecto a los niveles previos a la Covid, llega otro momento "complicado".
En concreto, ha apuntado que la EMT ha llegado a pagar 230 euros el megavatio-hora (MWh), cuando el verano del año pasado se encontraba en torno a 30 euros. Esto ha llevado que el coste energético de la empresa municipal para este año vaya a rondar los 80 millones de euros, frente a los 20 millones que prevía a principios de 2022.
No obstante, se ha mostrado "optimista" respecto al futuro y ha confiado en que podrán superar los 1,5 millones de viajeros al día pese al cambio de hábitos de los ciudadanos, ya que, por ejemplo, el crecimiento del teletrabajo ha restado usuarios al transporte público por autobús.