El confinamiento derivado de la Covid-19 obligó a los españoles a tener que cambiar la forma de relacionarse, incluso, con el sistema de salud. Una transformación digital "acelerada" del sector sanitario que, según los expertos, debe aprovecharse para seguir remando hacia la digitalización del dato clínico del paciente.
Así lo ha manifestado Antonio Martos, director Global de Sanidad de Minsait, una compañía de Indra, durante la tercera jornada del 'II Simposio Observatorio de la Sanidad: Las Lecciones de la Covid-19', organizado por EL ESPAÑOL e Invertia. En su intervención, Martos ha apostado por ir más allá en la interoperabilidad del historial electrónico y convertirlo en un elemento "inteligente". Es decir, que sea capaz de ayudar al profesional sanitario cuando se tomen decisiones clínicas.
"En el futuro, debemos de tener una historia clínica electrónica interoperable e inteligente. El siguiente paso es que los datos del paciente sean una herramienta en la toma de decisiones y del diagnóstico terapéutico", ha apuntado.
De hecho, el experto ha asegurado que es precisamente en la gestión de los datos del paciente de una forma "más efectiva" donde el país debe de avanzar más. "Con la Covid-19 nos hemos dado cuenta de que hay una gran cantidad de fuentes de datos que no estamos llegando a usar como la geolocalización, las APPs de seguimiento de contacto, pasaportes digitales…", ha enumerado.
Según sus cifras, apenas se aprovecha el 5% de los datos del paciente y eso es algo que debe de "potenciarse" gracias a la participación "más activa" que hace el paciente del sistema sanitario. Para aunar todos esos datos, Martos propone impulsar una plataforma nacional de investigación en salud que aúne datos desde la "visión funcional basada en tecnologías".
Nuevos modelos de atención
El modelo de atención con el paciente ha cambiado tanto que, ahora, es normal usar una App de consulta digital de salud o se pueden cribar, mediante llamadas telefónicas, los casos para saber si precisan de atención médica presencial o telemática.
"Es un futuro hacia el que debemos de seguir avanzando". Para Antonio Martos es importante que se evalúe el modelo de atención médica no presencial respecto al clásico.
"¿Eran necesarias todas las consultas presenciales?" Se ha preguntado asegurando que, durante esta pandemia, se han atendido una media de 32,5 consultas no presenciales al día en Atención Primaria. "¿Cuántas de éstas se pueden hacer no presencialmente?".
Por ello, para el director Global de Sanidad de Minsait, todas las propuestas de transformación digital deben partir de la premisa de "transformar la presencialidad, tanto en patología Covid como en patología no Covid". Mediante tres tecnologías: gestión analítica del dato, monitorización del paciente y atención virtual.
En una visión de futuro, Martos ha señalado lo que, a su parecer, deben de ser los cinco ejes de mejora: "transformación de los sistemas de información de salud publica, virtualización de la atención, entorno digital de relación, sistemas interoperables y gestión avanzada del dato".
Ha centralizado todo ello en un desarrollo y potenciación de la salud pública. Algo que, hasta ahora, no estaba muy desarrollado, y que precisa de contar con los datos de todas las capas del sistema (Atención Primaria, hospitalaria, clínicas privadas, servicios sociales, etc) desde una plataforma única en la nube y con unos modelos de gestión "centralizados". O lo que es lo mismo, que todos los sanitarios, desde cualquier punto, puedan acceder a los datos del paciente que tienen delante para conocer una visión "global" de su posible patología.