En La Alcudia se encuentra uno de los yacimientos iberos más espectaculares de España. Además de estos, el asentamiento fue poblado también por romanos, visigodos y árabes a lo largo de sus casi 1.100 años de historia.
En septiembre finalizó la campaña de excavaciones arqueológicas “Damas y héroes. Tras la Ilici ibérica” en el yacimiento de La Alcudia, Elche. El grupo, liderado por Alberto Lorrio, catedrático de Prehistoria de la Universidad de Alicante (UA), y Héctor Uroz, profesor de la Universidad de Murcia (UM), ha actuado en la misma zona donde se encontró la famosa Dama de Elche, hoy expuesta en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid.
Durante esta campaña las excavaciones se han centrado en la recuperación de la muralla del yacimiento. Cerca de 28 metros de la misma han salido a la luz además de documentar ocho construcciones domésticas de las que cuatro o cinco podrían ser casas según Lorrio. El estudio de la muralla ha podido determinar que esta se realizó siguiendo una técnica de origen oriental y que se usó un material diferente en cada tramo identificado. “Pensamos que la utilización de cajones distintos para construir la muralla tenía como objetivo darle mayor flexibilidad para soportar los movimientos sísmicos de la zona, lo que se evidencia especialmente por la utilización de mampostería y diferentes técnicas de la llamada arquitectura de tierra, como el adobe o el barro amasado”, asegura el investigador, quien señala que esta forma de construir da mayor solidez “y eso implica su muy buena conservación”.
Las investigaciones en el yacimiento han desvelado que las viviendas sufrieron al menos dos inundaciones además de algún incendio. El investigador señala que en 2024 “tenemos previsto ejecutar la segunda fase de musealización del sector excavado. En concreto queremos poner en valor la muralla y el urbanismo anexo, pero también la acequia de época contemporánea que recorre el sector, de la que se conservan incluso los partidores, que ilustra la historia más reciente de La Alcudia, de manera que el visitante pueda comprender los restos identificados”
Las investigaciones del yacimiento fueron dirigidas en 2017 por José Uroz, catedrático de historia antigua de la UA. Desde esa fecha se han ido desvelando multitud de restos materiales del siglo V a.C., la fase más antigua de La Alcudia ibera. La muralla y los restos urbanos adosados a la misma son toda una novedad que ha permitido, por primera vez, conocer el contexto arqueológico de la Dama de Elche.
El equipo de este año lo forman una veintena de doctorandos y estudiantes de la UA y de la UM, tres obreros de La Alcudia contratados gracias al Ayuntamiento de Elche y expertos como Juan Carlos Cañaveras, catedrático de Ciencias de la Tierra y Medio Ambiente de la UA o el conservador del Museo de Prehistoria de València Carlos Ferrer.
A finales del mes de octubre, el equipo del proyecto Domus-Alcudia les dará el relevo en la excavación del yacimiento y cuyo objetivo es documentar la historia de este asentamiento hasta el día de hoy. Este equipo estará conformado por investigadores del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas), de la UA y de la UM así como del INAPH (Instituto Universitario de Investigación en Arqueología y Patrimonio Histórico).
Todo este mar de investigadores está dirigido por Sonia Gutierrez, catedrática de Arqueología de la UA y los profesores del área de arqueología de la misma: Julia Sarabia, Victoria Amorós y Jesús Moratalla.
Los principales objetivos de esta futura excavación se van a centrar en datar la antigüedad del asentamiento doméstico ibérico sobre el que se edificó una estructura durante las guerras púnicas. Además de datar dicha construcción, también tienen pensado excavar las fases romana, visigoda e islámica del mismo y dar a conocer sus hallazgos relacionados con la historia del asentamiento desde el siglo IV a.C. hasta el siglo IX d.C.