Recreación artística de un encuentro de un grupo de humanos y tres mamuts en Alaska hace 14.000 años.

Recreación artística de un encuentro de un grupo de humanos y tres mamuts en Alaska hace 14.000 años. Julius Csostonyi

Historia

Desvelan la técnica que usaron los humanos hace 13.000 años para matar mamuts

Un estudio sostiene que las puntas de lanza tipo Clovis de América del Norte se usaban a modo de picas y no como jabalinas.

21 agosto, 2024 20:01

Hace 13.000 años los Homo sapiens que habitaban en América del Norte perfeccionaron las puntas de piedra de sus lanzas para cazar la megafauna prehistórica que compartía hábitat con ellos, como los mamuts, o protegerse de los feroces felinos "dientes de sable". Apoyados por el grupo y en sus eficaces puntas de tipo Clovis, los acosaban hasta darles muerte, alimentar a su pueblo con carne y recolectar huesos y pieles para subsistir. En la cultura popular se los imagina arrojándolas con la fuerza de sus brazos hacia los mastodontes.

Sin embargo, el último estudio publicado por la revista PLOS ONE sugiere que habrían utilizado aquellas lanzas de una manera bien distinta: apoyando la parte trasera contra el suelo e inclinando sus puntas hacia arriba, como una pica. La fuerza y el impulso del propio animal habrían hecho que estas lanzas se hundieran de forma mucho más profunda en sus entrañas que si los cazadores prehistóricos las arrojasen como jabalinas. 

"El tipo de energía que se puede generar con el brazo humano no se parece en nada al tipo de energía que genera un animal que ataca. Es un orden de magnitud diferente", informó en una nota de prensa Jun Sunseri, profesor asociado de Antropología de la Universidad de Berkeley y uno de los autores del estudio. "Estas lanzas fueron diseñadas para hacer lo que hacen, para proteger al usuario".

Reproducción de las puntas de Clovis usadas por los investigadores.

Reproducción de las puntas de Clovis usadas por los investigadores. Universidad de Berkeley/Scott Byram

El enigma Clovis

Las puntas Clovis, aparecieron por primera vez en la ciudad homónima del actual estado de Nuevo México. Solían confeccionarse con sílex, pedernal o jaspe. Su tamaño varía pero todas cuentan con un borde sumamente afilado y hendiduras estriadas en ambos lados de su base.

Los ejemplos de estos útiles se cuentan por miles y están dispersas por todo EEUU. Incluso se han recuperado dentro de esqueletos de mamut. Hasta el momento, se desconocía exactamente como se empleaban. "Este antiguo diseño de los nativos americanos fue una innovación sorprendente en las estrategias de caza", explica Scott Byram, investigador asociado del Centro de Investigación Arqueológica de Berkeley, principal autor del estudio. 

Fragmentos de vídeo de una de las pruebas de fuerza realizadas en las reproducciones.

Fragmentos de vídeo de una de las pruebas de fuerza realizadas en las reproducciones. Universidad de Berkeley/Scott Byram

Hace 13.000 años, un cometa produjo una glaciación que causó una extinción masiva y grandes incendios. Este hecho quedó grabado en la mentalidad de los grupos humanos de Europa y Asia. Este cambio climático quizá está detrás del enigmático desarrollo del neolítico. En el lejano santuario de Göbekli Tepe, en la actual Turquía, lo recordaron en el primer "calendario" de la Humanidad.

Al otro lado del Atlántico, las comunidades de cazadores-recolectores comenzaron a centrarse en la talla de las puntas resistentes, dando como resultado las puntas de Clovis. La piedra era escasa y podían recorrer cientos de kilómetros en su búsqueda. Por lo tanto, arrojarlas sobre sus presas a modo de jabalinas sería muy arriesgado, razonan los investigadores, y es muy posible que prefiriesen usarlas a modo de pica, tanto como método defensivo como de caza.

Arqueología experimental

Para evaluar su hipótesis sobre el uso de las puntas de Clovis como picas, tal como hacen varios pueblos de cazadores en África, el equipo de antropólogos recurrió a la arqueología experimental para comprobar el punto de ruptura de las puntas o de sus astas. Dicho experimento llevaba décadas rondando en la cabeza de Byram. Cuando era un estudiante de posgrado fabricó por su cuenta una serie de puntas y reproducciones de lanzas usando técnicas de la época.  

"Comencé a entender que en realidad tenía un propósito diferente al de otras herramientas", afirmó Byram. "A diferencia de algunas de las puntas de flecha con muescas, era un arma más sustancial y probablemente también se usaba con fines defensivos".

"La sofisticada tecnología Clovis que se desarrolló independientemente en América del Norte es testimonio del ingenio y las habilidades que los primeros pueblos indígenas emplearon en su cohabitación del antiguo paisaje con la megafauna ahora extinta", explica Kent Lightfoot, profesor de Antropología en la misma universidad y coautor del estudio.

En los próximos meses, el equipo plantea construir "un modelo de mamut" y, mediante un tobogán o un péndulo, esperan reproducir cómo habría sido un ataque frontal a toda velocidad de estos enormes animales contra una pica de punta de Clovis plantada en el suelo. 

"A veces, en arqueología, las piezas simplemente empiezan a encajar, como parece ocurrir ahora con la tecnología de Clovis, y esto pone la caza del lucio en primer plano junto con la megafauna extinta", dijo Byram. "Abre una nueva forma de ver cómo vivían las personas entre estos increíbles animales durante gran parte de la historia humana".