Aunque no hay novedades en campo de los Presupuestos Generales del Estado (se presentarán y, si hay apoyos suficientes, se aprobarán en verano), María Jesús Montero sí ha anunciado novedades para las regiones en su comparecencia en la Comisión de Hacienda del Congreso de los Diputados. Ha informado de que espera tener el “esqueleto” del nuevo modelo de financiación autonómica y local en octubre.
Dentro de esta reforma, que se tiene que negociar en la Cortes, Montero ha precisado que el Gobierno trabajará en una “armonización” que impida el “dumping” fiscal, que los socialistas vienen denunciando por parte de regiones como Madrid.
Además, Hacienda facilitará la reestructuración de la deuda autonómica y flexibilizar los fondos de liquidez para permitir que más regiones puedan salir a financiarse a los mercados y aprovechar la situación de los tipos de interés, excepcionalmente bajos, algo que podría beneficiar a regiones como Andalucía y Cataluña.
Tasa de referencia
En este sentido, la ministra ha anunciado que el Ejecutivo creará una “tasa de referencia”, que se negociará con las entidades regionales, que servirá como base imponible para los impuestos de transmisiones patrimoniales y de Sucesiones y Donaciones y evitar la judicialización que existe en este campo por las referencias catastrales.
En el seno de Consejo de Política Fiscal y Financiera se crearán tres comisiones para abordar la financiación de la sanidad, de la educación y de la dependencia. Además, Montero ha anunciado que se reformará la regla de gasto de las comunidades autónomas y de las entidades locales para facilitar que puedan echar mano del superávit, aquellas que lo tienen.
Respecto a los nuevos objetivos de déficit y deuda pública, ha informado que espera que el Congreso los debata y los vote a partir de la próxima semana.
Reforma fiscal
La ministra ha comentado que se abordará la reforma tributaria que se pactó en el acuerdo de gobierno del PSOE con Unidas Podemos. Es decir, que las grandes empresas tendrán un tipo mínimo del impuesto de Sociedades del 15% (del 18% en el caso de entidades de hidrocarburos o financieras) y el IRPF de las clases altas se subirá. Aquí se incluyen también las tasas Google y Tobin.
En cambio, respecto a la subida del gasóleo que fuentes de Hacienda confirmaron a EL ESPAÑOL recientemente, ahora no parece tan clara. Este tipo de medidas, que quedan encajadas en el bloque de la "fiscalidad verde", serán sometidas a debate "a través de varias consultas públicas" para recoger la opinión de empresas y consumidores, así como de los "grupos políticos".
Por otro lado, también ha indicado que, mediante los informes del 'Spending Review' de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF), abordar una reforma fiscal en 2021.
En ella se abordarán cuestiones como la situación de los beneficios fiscales, es decir, de las deducciones y de las bonificaciones que limitan los ingresos tributarios en más de 37.000 millones de euros. Esto parece descartar que esta medida se vaya a abordar en el próximo proyecto.
Por otro lado, la ministra ha indicado que habrá cambios en el campo de la contratación pública, para la que se gestionará una nueva "estrategia nacional" para "mejorar la transparencia y la corrupción".
En este sentido, Montero avanzó que su departamento mantiene sus medidas de lucha contra el fraude (cuyo anteproyecto de ley todavía se tiene que llevar al Consejo de Ministros) y que, en este campo, se ha logrado un récord de recaudación en 2019, con 15.700 millones de recaudación, un 4,1% más respecto a 2018.