'Fintech', más que una tendencia de moda
El futuro de Miami pasa por los servicios financieros de última generación.
De Chicago a Miami y con la mirada puesta en quitar protagonismo a Nueva York, esa es la agenda e historial de Ken Griffin, desvelada el pasado martes en un selecto evento. Giffrin es el máximo ejecutivo e inversor de Citadel, un hedge fund entre los díez más importantes del mundo.
Durante la pandemia dejó la ciudad del viento para sumarse a la ola tropical. No solo se vino él, también la compañía y muchos de sus empleados. Hay quien no lo soporta. Todos los problemas se los achacan a ellos, es lo fácil.
Si sube el alquiler, Citadel. Si hay atasco para llegar a la oficina, Citadel. Si los restaurantes están llenos, Citadel… En fin…
Su visión es clara: “Veremos el impacto cuando Miami se convierta en el Wall Street del Sur. Estamos en Brickell Bay, quizá, en 50 años, hablemos de Brickell Bay North como ahora lo hacemos con el distrito financiero de Nueva York”. Unas declaraciones potentes con lque quiere posicionar a la ciudad como el futuro de Estados Unidos.
Ken Griffin dejó, de paso, un recadito para Chicago y una alabanza para el polémico gobernador de Florida, Ron de Santis: “Este estado ha hecho un trabajo increíble con la gente que ha escogido para organizar todo. Las calles son seguras. Hay buenos colegios y buenos trabajo. Es un gran estado y eso es gracias al foco de los líderes. Algo así sucedió en Chicago hace 30 años. He visto mi ciudad volver a la anarquía y el mal gobierno”.
Al mismo tiempo ha empezado una carrera por la ostentación. Frívola, sí, pero muy americana y competitiva a la vez. Indian Creek, la misma zona donde vive Julio Iglesias, se ha convertido en una de las áreas más solicitadas. Griffin ha ido más allá. Lo suyo es casi como comprarse un barrio. La casa que proyecta tendrá un coste de 1.000 millones de dólares, el famoso billón en la forma de contar de aquí. Estará en primera línea, frente al mar y servirá de cuartel general de Citadel.
¿Alguien dijo balance entre vida personal y laboral? Ni está, si se le espera.
La segunda lectura de este movimiento, más allá de su empaque mediático, tiene que ver con la carga impositiva de Florida, notablemente inferior al resto del país. En Florida no se pagan impuestos estatales, sí por propiedades. Eso cambia muchisímo la percepción y ayuda a la hora de tomar decisiones. ¿Recuerdan que el Presidente Trump era residente en Mar-a-Lago? Ahí, además del buen tiempo, tienen un motivo de peso.
La lectura que más nos interesa a los techies es precisamente la de fintech, la intersección entre tecnología y finanzas. Tras la caída cripto y la nueva ola de inteligencia artificial, las fintech han sabido mantener su interés y navegar un río con el caudal un poco más seco.
No hay que perder de vista que Transunion, Jeeves, OnTop, Ripple o Shyft tienen aquí sede. Según el último informe de Pitchbook, las ciudades de más crecimiento a nivel global son Dubai y Detroit. En Estados Unidos se llevan la palma, Raleigh, Houston, Miami, Filadelfia y San Luis.