Asturias desarrolla un corsé inteligente que soluciona los problemas de desviación de columna en adolescentes

Los traumatólogos Juan Pablo Otto y Andrés Chaín y el neurocirujano Julio García Molina, chilenos los tres, publicaron un artículo en el año 2020 titulado 'Escoliosis idiopática del adolescente de bajo grado'.

Allí explicaban que entre el 1% y el 3% de los adolescentes pueden sufrir esta patología, consistente en desviaciones más o menos importantes de la columna vertebral. También advertían las causas genéticas como el principal motivo de su aparición.

Por último, remarcaban que "el objetivo principal del tratamiento es evitar la progresión de la curva y por ende prescindir del tratamiento quirúrgico".

Tratándose de evitar cirugías, seguramente ya estarán imaginando la idoneidad de un corsé para solucionar este tipo de problemas.

Y así es. Pero en plena revolución tecnológica ¿por qué conformarse con un corsé tradicional cuando seguro que ya existe alguien que está desarrollando un corsé inteligente?

No es ironía. Este corsé futurista existe y lo hemos encontrado en Asturias. Desarrollado gracias a la iniciativa pública, esta herramienta parece haber llamado la atención en el mundo de la medicina personalizada y, según el gobierno asturiano, ya son una veintena de centros hospitalarios de toda España los que se han interesado por él.

El Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) es el primero en aplicar una técnica que combina tecnología digital, inteligencia artificial y fabricación aditiva para mejorar el tratamiento en adolescentes de la escoliosis idiopática, una desviación de la columna vertebral.

Personalización y seguimiento digital

El centro sanitario ha presentado los resultados de ese proyecto, que tiene como eje central un corsé sensorizado y realizado en impresión 3D.

El programa e-Health, que forma parte de las Misiones Científicas de Asturias, ha sido desarrollado por 18 entidades asturianas: empresas, centros tecnológicos, grupos de investigación, la Fundación para la Investigación y la Innovación Biosanitaria (Finba) y el HUCA, que ya ha comenzado a aplicar el desarrollo tecnológico derivado del proyecto de investigación.

De momento, doce adolescentes y una mujer adulta utilizan ya el Corsé 3D Huca, que permite personalizar el tratamiento y facilita el seguimiento de la evolución del paciente.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, acompañado por los consejeros de Ciencia, Borja Sánchez, y de Salud, Pablo Fernández, ha participado en la presentación de los resultados del proyecto.

El jefe del ejecutivo autonómico ha realizado un recorrido por los principales puntos que incluye el programa completo: inteligencia artificial, con un robot social que acompaña a las pacientes; plataforma digitalizada, un sistema que toma las medidas al paciente para definir qué condiciones debe tener el corsé; fabricación aditiva en 3D del dispositivo; telemedicina y gamificación, plataformas online para contactar con las familias y resolver dudas del paciente y asistente virtual.

La peculiaridad del programa es que todo el proceso se puede realizar en el hospital, desde el diagnóstico hasta la entrega del corsé al paciente, sin coste alguno para las familias. El origen del proyecto está en la consulta del doctor José Fidalgo, jefe de sección de rehabilitación infantil y prótesis del HUCA, que ha guiado la parte clínica del programa.

Actualmente, la impresión de los corsés se realiza en el centro tecnológico Fundación Idonial y se estima que en Asturias serán necesarios entre 225 y 250 dispositivos, cifra en la que se incluyen los casos nuevos y los que precisan renovación.

De momento, el HUCA es la unidad de referencia regional para el tratamiento conservador con corsé de la escoliosis idiopática. No obstante, numerosos centros se han interesado en el programa: Cruces (Baracaldo), Araba (Álava), Miguel Servet (Zaragoza), Gómez Ulla, Gregorio Marañón, Fundación de Alcorcón, Ramón y Cajal (Madrid); Hospital de Ciudad Real, Hospital de Albacete, Hospital Universitario Morales Meseguer (Murcia), Juan Ramón Jiménez (Huelva), Virgen de la Macarena (Sevilla), Hospital Universitario de Canarias (Tenerife), Complejo Asistencial Universitario de León, Complejo Asistencial de Salamanca, Hospital Clínico Universitario de Valladolid, Hospital Río Hortega (Valladolid) y Hospital Río Carrión (Palencia).

Operaciones en 3D

El tratamiento de la escoliosis idiopática intenta evitar el paso por el quirófano, pero hay dolencias y patologías que no esquivan ese proceso quirúrgico. También para ello, la tecnología se está empezando a aplicar en la región asturiana.

El ejemplo perfecto lo encontramos en otra de las novedades que se han hecho públicas recientemente en la región asturiana.

El Servicio de Traumatología del Hospital Universitario San Agustín (HUSA), de Avilés, ha aplicado por primera vez en Asturias, en una cirugía compleja de hombro, una técnica personalizada en tres dimensiones (3D), que se emplea también en operaciones de prótesis de rodilla.

Esta novedosa técnica favorece una correcta colocación de los implantes, al tiempo que redunda en una mayor seguridad y en una recuperación más rápida del paciente.

Los doctores Sergio Ramos y Jesús García, de la Unidad de Hombro del citado servicio, han realizado dos intervenciones en pacientes con deformidad en la escápula (hueso plano que comunica el húmero con la clavícula); la última el pasado miércoles, 16 de febrero.

La planificación quirúrgica comienza con el diseño de instrumental personalizado, para lo que se reconstruye la zona afectada a través de imágenes de TAC en una plantilla específica para uso intraoperatorio que permite adaptar al milímetro la posición del implante.

A los 20 días de este estudio preoperatorio se realiza la intervención, que dura unas dos horas, con anestesia general. Los pacientes permanecen ingresados 48 horas antes de recibir el alta y precisan rehabilitación de 2 a 3 meses hasta recuperar una buena movilidad del hombro.

La Unidad de Hombro del Servicio de Traumatología del HUSA lleva a cabo anualmente unas 40 operaciones de este tipo. A partir de ahora, el 10% de los pacientes que presentan procesos degenerativos, traumatismos y otras lesiones se beneficiarán de esta técnica.