Una escultura ubicada en la plaza de Santo Domingo y una obra pictórica exhibida en el Museo Provincial de Bellas Artes (MUBA) han convertido a Badajoz en el centro de muchas miradas en los últimos meses gracias a una actividad educativa de lo más innovadora.
Que la talla del San Vicente de Paul de José Manuel Gamero Gil o los protagonistas de un lienzo como el de los 'Bebedores portugueses' de Adelardo Covarsí cobren vida gracias a una actividad divulgativa dirigida a escolares es sorprendente hasta para sus creadores. Pero eso es exactamente lo que ha sucedido gracias a la tecnología robótica.
El Museo Provincial de Bellas Artes cerró con gran éxito hace unos días la actividad 'Robotizarte Intergeneracional', desarrollada por el alumnado del colegio López de Vega de la ciudad extremeña.
El resultado fueron dos obras de arte desarrolladas en el edificio A del MUBA, concretamente en las salas 00 y 01. Se trata de las piezas robotizadas de las obras referidas.
Por otra parte y en el edificio B, primera planta del museo, se han llevado a cabo diversos talleres de robótica, desarrollados por el grupo Lopetronic del mismo colegio, que se muestran al público para que comprueben sus distintas habilidades en esta especialidad. Los talleres han sido visitables y de participación activa con los alumnos.
Esta actividad no es nueva. El pasado 29 de octubre se presentó en el MUBA este proyecto innovador en el que se une arte, robótica y dinámicas sociales que contribuyen a la interacción entre niños y mayores.
Como manifiesta Teresa Rodríguez, directora del museo provincial, "una de las funciones fundamentales del MUBA es servir de herramienta activa para la consecución de objetivos educativos y para ello, desde el Área de Cultura, estamos abiertos a las valiosas propuestas que nos llegan desde los colegios e institutos de la provincia".
Capaces de interactuar
El resultado de las obras elegidas es la transformación de las mismas en elementos robotizados con los que poder interactuar. Los alumnos han sido los responsables de la construcción de las obras con cartón pluma, aluminio, pintura, papel maché y el montaje de los elementos propios de la robótica como los Kits de LEGO Education Mindstorms, motores o los sensores de ultrasonido, presión y color.
Durante la última visita a la actividad, la directora del MUBA estuvo acompañada por el diputado provincial Francisco Martos; el tutor de robótica del colegio Lope de Vega, Daniel Pérez Leitón; su director, Ismael Pérez Leitón; el jefe de la Unidad de Programas Educativos de la Junta de Extremadura, Luis Cordero; el coordinador de los proyectos de los Centros Innovadores en el uso de la Tecnología, Antonio Vara; mayores de la Universidad de Extremadura, del Centro de Campo Maior y del Centro de San Andrés; abuelos de algunos estudiantes de robótica y el alumnado que ha hecho posible el proyecto.
Esta nutrida y variada representación demuestra la implicación no sólo de las instituciones públicas sino también del colectivo de mayores, otro de los focos principales de esta actividad. Y es que, según Pérez Leitón, "este proyecto se diferencia de otros porque integra activamente escuela, familia, robótica, arte y cultura; queremos que sea un homenaje a nuestros mayores al ser de interés intergeneracional".
La exposición fue interactiva y viva, en la que las obras de arte elegidas, a través de diferentes sensores de color, presión y ultrasonidos programados se activan al aproximarse el visitante, dando lugar a movimientos y sonidos de las obras robotizadas.
Pérez Leitón añadió que la pretensión es "acercar la tecnología, la cultura y el arte a nuestros mayores y alumnado, utilizando la robótica educativa como herramienta activa, como elemento transversal integrador del currículo y como modelo de desarrollo de las competencias claves, logrando que este proyecto de innovación sea peculiar, especial y único en su formato".
Junto a las dos obras de arte robotizados se desarrollaron talleres en la que el visitante tuvo la oportunidad de robotizar un elemento del cuadro de Covarsí, dando movimiento a una jarra accionada por un sensor.
"Interesante y emocionante"
Tras las explicaciones de los alumnos lopetrónicos Klaus e Irene sobre los proyectos desarrollados, el diputado provincial Francisco Martos indicó que "en esta actividad se suman una serie de voluntades e iniciativas que lo hacen especialmente interesante y emocionante".
Según les remarcó el diputado, "habéis sido capaces de unir no solo el trabajo de vuestra clase, sino de distintas administraciones como la Junta de Extremadura, la Diputación Provincial, el MUBA y un montón de gente para que este proyecto sea posible".
Como abuelo que es, Martos se mostró "sorprendido al ver las cosas que pueden hacer nuestros nietos, lo que nos llena de una de una enorme satisfacción".
Dirigiéndose al alumnado les insistió que representan "la nueva escuela, haciendo que los demás nos sintamos cómodos colaborando y participando, a la vez que haciendo que vosotros estéis aprendiendo nuevas materias y conociendo el arte".
Para concluir, Martos destacó que "lo que habéis conseguido es que una institución como este museo, la Diputación y la Junta nos unamos a esta actividad que sirve para entender el arte y la cultura, demostrando que la educación avanza al mismo ritmo que la sociedad".