La Agencia Gallega de la Innovación (GAIN) es el organismo público, dependiente de la Xunta, que pilota todos los proyectos disruptivos que se desarrollan en Galicia. Y no son pocos.
Pero más allá de la proyección que tiene la innovación en la nueva movilidad (drones, fundamentalmente), en la industria 4.0 o en el sector TIC, lo cierto es que la GAIN es una institución que si de algo puede presumir, además de sus logros, es de dar un especial protagonismo a la mujer.
Es una agencia pública con un organigrama formado por 10 altos cargos, ocho de los cuales son mujeres. Nadie, pues, puede darles lecciones sobre qué políticas se deben aplicar para reducir la brecha de género.
Su directora, Patricia Argerey, atiende a D+I para hablar de esta 'feminización' de la GAIN y, en general, de cómo ve la brecha de género en el sector tecnológico en Galicia.
¿Este organigrama tan femenino es una estrategia pensada o surgió sin querer?
La verdad es que no ha sido premeditado. Siempre pienso que los equipos deben ser equilibrados y diversos, pero estoy encantada de trabajar con mujeres. Tengo un magnífico equipo.
Usted está en contacto con otras agencias autonómicas públicas de innovación, consejerías de innovación, etc. ¿Siguen sus organigramas la misma tendencia o aún tienen mucho camino por recorrer en cuanto a la eliminación de la brecha de género en puestos directivos?
En la administración el porcentaje de presencia femenina es superior a la masculina (según datos de enero de 2021 del Ministerio de Política Territorial las mujeres representan el 58% del personal al servicio de las Administraciones Públicas en España) y mi percepción es que el porcentaje de mujeres que ocupan puestos directivos en el sector público es superior al sector privado.
De hecho, en el ámbito de la I+D+i hay varias comunidades autónomas que tienen al frente mujeres consejeras, secretarias generales y directoras generales como en el País Vasco, Madrid, Andalucía, Valencia... así como en el Ministerio de Ciencia e Innovación.
¿En algún momento se ha sentido extraña en este ecosistema? Lo digo por aquello de la etiqueta de que la tecnología, la innovación, las disciplinas como 'ámbitos masculinos'. Si existe, ¿cuál sería el momento más incómodo que ha vivido y que nos ayude a visibilizar el problema? En caso de que no se haya enfrentado a situaciones incómodas, ¿conoce algún caso cercano?
Extraña no. Generalmente me siento muy cómoda con todos mis interlocutores. Puntualmente sí he vivido alguna situación en la que percibes que tu interlocutor no te reconoce y es desagradable. Estoy segura de que nos pasa a todas en algún momento, al margen del puesto que ocupas.
¿Quiénes son las mujeres referentes de Patricia Argerey en el campo de la innovación y la tecnología y por qué?
Hay muchas mujeres que considero un referente. Una de ellas es Cristina Garmendia, ex ministra de Ciencia e Innovación y actual presidenta de la Fundación Cotec para la Innovación Tecnológica. Científica de formación, forjó su carrera en el ámbito empresarial, siendo pionera en la transferencia del conocimiento de los centros de investigación a la empresa.
El trabajo de la GAIN en relación con la innovación gallega es incontestable en cuanto a proyectos de carácter tecnológico. ¿Existen también proyectos de carácter estratégico relacionados con la promoción de la mujer en el sector?
Sí, contamos con una Unidad de Mujer y Ciencia, de carácter transversal a todo el ejecutivo, con participación de distintos departamentos de la Xunta de Galicia bajo la coordinación de la Secretaría General de Igualdad.
En este marco, ejecutamos el Programa Gallego de Mujer y Ciencia que opera en tres ámbitos: promover un cambio institucional y de organización para integrar el principio de igualdad de oportunidades; equilibrar la presencia de mujeres y hombres en el sistema gallego de ciencia e innovación; e integrar la perspectiva de género en los procesos y procedimientos de trabajo.
Entre otras actuaciones, hemos incorporado en los criterios de valoración de nuestras convocatorias la participación equilibrada de mujeres y hombres en el equipo de trabajo y que la empresa disponga de un plan de igualdad.
Además, en las convocatorias de recursos humanos el género es el primer criterio de desempate y hemos incluido un factor de corrección para que los periodos de inactividad por embarazo, maternidad/paternidad y adopción o acogimiento no penalicen la carrera científica de las investigadoras.
¿Qué es más importante, intentar despertar vocaciones STEM en niñas o intentar erradicar el machismo desde edades tempranas?
Ambas son importantes, por supuesto. No obstante, desde nuestro departamento nos compete avanzar en el primer ámbito de la promoción de las vocaciones científicas entre las niñas. De hecho, tenemos varios programas de fomento de las vocaciones científicas entre la infancia y la juventud como 'Volando alto, sumando vocaciones', en el sector aeroespacial; el programa D'tec, en el ámbito del diseño y de tecnologías como la realidad virtual, realidad aumentada y 3D, la Industria 4.0, etc; actividades de divulgación científica en colaboración con el Parque Tecnológico de Galicia, como la feria Galiciencia, las Aulas Tecnópole o el Campamento Tecnológico de Verano, entre otras.
En su opinión y sin perder de vista las políticas públicas de innovación, ¿cuáles serían los tres puntos sobre los que se debería mejorar para dar mayor visibilidad a la mujer?
Desde la Unidad de Mujer y Ciencia estamos poniendo en marcha actuaciones en tres ámbitos: el escolar y universitario a través de acciones como la formación de los docentes; medidas para atraer a las niñas hacia las carreras científico-tecnológicas y la sociedad de la información; o promover encuentros de chicos y chicas de secundaria y bachillerato con mujeres singulares en sectores tradicionalmente masculinizados. Además, tenemos el Premio María Josefa Wonenburger para reconocer a las mujeres científicas de Galicia.
Hablemos de las políticas específicas más reconocidas en su región: el Polo Aeroespacial, las TIC y la industria 4.0. ¿Está reduciéndose la brecha en estos ámbitos al mismo ritmo que crece el potencial de estos sectores?
Debemos seguir trabajando en esa línea, tenemos mucho camino por recorrer, si bien es cierto que las mujeres presentan una mayor cualificación: por ejemplo, en el Polo Aeroespacial de Galicia la proporción de mujeres empleadas con formación de doctorado y grado es mayor que en los hombres.
Somos conscientes de que existe una infrarrepresentación de la mujer en los sectores más tecnológicos, a pesar de que las mujeres estamos igual de capacitadas que los hombres para estas profesiones.
Es evidente que esta situación tiene que cambiar y estamos actuando desde la base, intentando desmontar los estereotipos asociados a estes sectores y fomentando las vocaciones científico-tecnológicas en las niñas desde la infancia.