Alegría, desprecio, asco, ira, tristeza, miedo y sorpresa son las siete emociones básicas que el ser humano muestra a través de las expresiones faciales. A ellas, el equipo de Feeder ha añadido la calma.
El algoritmo que han creado las parametriza y las traduce en métricas vitales para los creadores de contenido, principalmente del sector del marketing.
"Me di cuenta de que existían muchos KPIs que te ayudaban a saber si una campaña funcionaba o no pero no había un análisis cualitativo de la reacción que producía el contenido", explica Pablo Filomeno, cofundador de la firma, junto a Mauro Gadaleta.
La plataforma Feeder consta de un dashboard dirigido al cliente y una aplicación móvil para los usuarios que visualizarán los contenidos. A través de la cámara frontal del teléfono móvil, el algoritmo parametriza las microexpresiones faciales del usuario -"muchas de ellas, realizadas de manera involuntaria", indica Filomeno-.
Además, el algoritmo se encarga de traducir toda la información, medirla y ordenarla en once dimensiones cualitativas: atención, validación, compromiso, carisma, sorpresa, intensidad, rechazo, horror, enfado, susto e inspiración.
De esta forma, utiliza el reconocimiento facial de manera anónima, "ya que no guarda caras sino los datos que recoge de la imagen de la cara del usuario mientras éste visiona el contenido", afirma.
Toda la información llega al dashboard del cliente en forma de gráficas sencillas que, si lo desea, puede visualizarlas en tiempo real, mientras el usuario está visionando el contenido creado.
"El departamento de marketing tiene los datos cualitativos que le interesan y que le permiten lanzar la campaña con la seguridad de obtener los resultados deseados". Los usuarios de la aplicación, gratuita y disponible en Android e iOS, obtienen descuentos y promociones por visualizar el contenido.
Filomeno es un gran conocedor del sector del marketing. Después de dedicarse a la música durante una década -fue batería en un grupo de música-, fundó y dirigió junto a su hermano su propia agencia hasta que, desde hace cinco años, emprendió un nuevo camino profesional en diferentes compañías del ámbito del marketing digital.
Pero llegó la pandemia y con ella el ERTE. "Teníamos la idea madurada y una versión beta desde hacía un año pero, obligado por las circunstancia, decidimos ponerla en marcha en junio del año pasado", explica.
Desde entonces, "todo ha ido muy rápido". En septiembre entraron en el programa de aceleración de Demium en Barcelona, forman parte de Barcelona Activa y del NVIDIA Inception Program, han conseguido 23 clientes de diversos sectores -agencias de marketing, distribuidores cinematográficos e influencers reconocidos- y ya están llevando a cabo su segunda ronda de inversión, que esperan finalizar a finales de este verano.
Optimizar el análisis de datos
"Hay estudios que indican que un profesional del marketing dedica el 33% de su tiempo a dar un sentido a los datos que se obtienen del análisis de una campaña para poder presentar resultados al cliente. También se conoce que el 21% del presupuesto que se dedica a una campaña de publicidad se pierde analizando estos datos".
"Me sentía muy reflejado en estos porcentajes y decidí que tenía que aportar una solución", comenta Filomeno. Gadaleta y él, compañeros de escuela y emprendedores natos, se complementan: "Él es el techie, pero yo también soy digital", remarca.
Los ocho miembros del equipo de Feeder, ubicados en diferentes poblaciones de Catalunya e India, teletrabajan desde el primer día, con reuniones fijas los lunes y los viernes.
Los primeros clientes llegaron a través de los círculos de confianza y los recursos iniciales los aportaron los dos fundadores y Daniel Polo, Head of UX, Design & Product de Feeder, con ellos desde el primer día.
La financiación inicial llegó a través de inversores próximos a ellos y levantaron 20.000 euros, que les permitieron acabar de dar forma a la plataforma, realizar las primeras campañas de marketing y asistir como expositores a la pasada edición del 4YFN- Mobile World Congress, celebrada a finales de junio en Barcelona.
En la segunda ronda de inversión que tienen en marcha esperan encontrar capital privado que les aporte los 150.000 euros que consolidarán y ampliarán el equipo, y les permitirá desarrollar la plataforma como API, para que sea compatible con cualquier entorno digital.