El planeta ha dicho basta. La Comisión Europea advertía esta semana que el calentamiento global ha pasado a un escenario de "hervidero" global y, sin una revolución tecnológica que permita asumir pronto una verdadera transición energética, el tiempo corre en contra de la preservación de nuestro planeta tal y como lo hemos conocido hasta la fecha.
El ciudadano de a pie ya ha notado en los últimos años los efectos de este cambio de ciclo como consecuencia de la emisión de C02 a la atmósfera. Los incendios se han vuelto más virulentos -tan sólo hay que atender a lo que sucede estos días en Italia y Grecia-, los periodos de sequía se prolongan y, cuando las lluvias hacen acto de presencia, lo hacen cada vez más bajo los fenómenos conocidos como DANA, tan dañinos para las infraestructuras y peligrosos para el ser humano.
¿Estamos a tiempo de revertirlo? La cuestión es compleja y, en cualquiera respuesta que quisiéramos esgrimir, deberíamos tener en cuenta la variable de la tecnología. Porque no tendremos ninguna oportunidad si no comenzamos como sociedad a implementar las soluciones que ya están en el mercado para exprimir el potencial de las energías renovables.
[Julio será el mes más cálido de la historia: "Las emisiones de CO2 son el principal motor"]
Y es precisamente en este campo donde España continúa teniendo un gran potencial de futuro. Así lo revelan informes de prestigio como el publicado por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) Green Future Index 2022, que sitúa a España en el número 13 en la segunda clasificación anual que compara 76 naciones sobre su capacidad para desarrollar un futuro sostenible, fomentando la sostenibilidad y la producción de energía circular y limpia.
Sin duda, el sector energytech que engloba empresas sostenibles y verdes, está en auge en nuestro país con propuestas innovadoras y revolucionarias que presentan un gran potencial de ahorro y nos acercan un poco más con su esfuerzo al desarrollo sostenible aprobado para la Agenda 2030.
Chippio, Lumio, ELTEX y Linkener son algunas de las energytech españolas que están contribuyendo a alcanzar este ambicioso objetivo. Cada una, con su propuesta disruptora y su tecnología propia, es un ejemplo de un prolífero sector en España que apuntala el potencial de nuestro país para jugar un papel determinante en la transición energética en marcha a escala global.
Chippio es una compañía de luz totalmente digital que opera en España desde hace casi tres años y que ofrece luz y potencia a precio de mercado. "Nuestra misión es dotar de transparencia y honestidad al mercado eléctrico. Pertenecemos a Fortum, empresa nórdica y una de las productoras de energías más limpias de Europa", explica a D+I Pol Brau, responsable de crecimiento y desarrollo de la startup.
Carga del vehículo eléctrico
Este concepto de sostenibilidad y consumo racionalizado instaurado en los países nórdicos es lo que la compañía quiere transmitir a los usuarios en España, y, para ello "les damos el control de su factura de la luz mediante herramientas transparentes y digitales".
En su aplicación se pueden consultar el consumo actual y ver el precio de la luz en tiempo real, así como acceder a su innovador servicio Smart Charging, que automatiza de manera inteligente la carga del vehículo eléctrico para hacerlo en las horas de menor coste, llegando a suponer un ahorro del 50% en cada carga. "Esta herramienta es el último ejemplo de Chippio por dar el control de su factura al usuario", puntualiza.
"En este momento estamos centrados en optimizar y mejorar los servicios ya existentes con el fin de brindar una experiencia de usuario de calidad que haga que cada vez más hogares confíen en nosotros. En paralelo, estamos en constante búsqueda de tecnologías y soluciones digitales en pro de dar control a los usuarios de manera sostenible", concluye Brau.
También pertenece a la última hornada energytech española la startup Lumio, centrada en una disruptora idea para compartir energía solar.
"Desarrollamos comunidades 100% renovables dando la oportunidad de instalar, compartir o consumir buena energía gracias a la única plataforma de energía sostenible del mercado". Habla Alexis Las Heras, CEO de Lumio.
"Permitimos que las personas con placas solares puedan compartir su energía con personas que no pueden instalarlas. En la plataforma sostenible, los productores de energía solar comparten sus excedentes de energía con quien ellos deciden, con transparencia y trazabilidad.
Como en tantos otros proyectos disruptores la idea surgió tras una experiencia personal. Alexis Las Heras acababa de terminar su Máster en Energías en Dinamarca y, en ese momento, sus padres decidieron instalar placas solares. Encontraron un problema: cómo compartir energía entre distintos puntos de suministro.
"Ellos tienen su negocio muy cerca de su casa y pensaron que podría estar bien que su excedente se pudiera consumir en otro punto de suministro. Así surgió la idea y lo lanzamos entre enero y marzo del año 2020", explica.
Pablo y María, compañeros de Alexis del colegio, se unieron a la aventura poco después dejando atrás sus respectivas experiencias profesionales en multinacionales de telecomunicaciones y de logística y dando vida a una prometedora apuesta en el sector energytech.
En su haber cuenta ya con más de 500 instalaciones realizadas, 1.300 usuarios en la plataforma y un equipo de más de veinte personas. Además, Lumio resultó ganadora del premio Startup más sostenible en South Summit 2023 y también fueron ganadores de la categoría Sustainability & ESG.
Pérgolas fotovoltaicas
También en el terreno de la industria fotovoltaica se ha abierto un hueco la startup ELTEX. Se trata de una compañía especializada en la instalación de energía solar en particulares (80%) y empresas (20%). Su fundador y CEO, Charles Deknudt, junto a su socio Edrit Salijaj, creó esta empresa movido por la pasión, el conocimiento y la experiencia en el sector de las energías renovables.
La nueva línea de pérgolas solares SolarScape de ELTEX son estructuras a medida que combinan eficiencia energética y protección solar, junto a una línea que apuesta por el total black.
Las pérgolas solares fotovoltaicas están emergiendo como una solución innovadora para los exteriores de muchos hogares y zonas de exterior o aparcamiento de las empresas. En concreto, se caracterizan por un conjunto de paneles fotovoltaicos que se integran dentro de una estructura independiente con doble función: proporcionar sombra y protección contra los agentes climáticos, lo que las convierte en una solución ideal para construcciones inteligentes; y generar energía al mismo tiempo.
Estas estructuras permiten obtener energía solar de manera funcional ya que la cubierta de la pérgola está formada por paneles fotovoltaicos que convierten la luz solar en electricidad.
Con una plantilla de más de 76 personas y cerca de 8.000 placas fotovoltaicas instaladas en menos de dos años, ELTEX espera crecer en las Islas Baleares y aterrizar por primera vez en Madrid, Valencia y Andalucía antes de final de año.
Las medidas de eficiencia energética implantadas por la empresa valenciana Linkener Renovables en el Acuario de Sevilla le permiten colarse en este grupo de propuestas disruptoras que están abanderando los nuevos tiempos de las energías renovables en España.
Su tecnología permite a la instalación sevillana una tasa de autoconsumo del 100%, lo que significa que toda la energía generada por la instalación fotovoltaica es consumida por el Acuario.
La instalación, realizada en una superficie de más de 3034 metros cuadrados en la cubierta, dispone de 469 paneles fotovoltaicos, con una potencia total instalada de 225,6 kWp, lo que permitirá al edificio reducir hasta en un 10% su consumo eléctrico, evitando, además, la emisión a la atmósfera de más de 162.35 toneladas de CO2 al año.
Inversión amortizada en cinco años
Javier Ormaechea, director de operaciones de Linkener, destaca que proyectos como éste ponen de manifiesto la apuesta del centro por lograr la eficiencia energética. "Además, desde el punto de vista económico, este tipo de proyectos son rentables por sí solos ya que, en un periodo de tiempo de entre 5 y 7 años, la instalación está amortizada y, con un mantenimiento adecuado, es posible superar los 30 años de vida útil".
Linkener se materializó en el año 2014 con su actual modelo de negocio. Su creador, un ingeniero industrial valenciano, encontró un nicho de mercado en la necesidad que las compañías tenían, en plena crisis económica, de reducir su factura energética.
Sus oficinas centrales están ubicadas en Go Hub, el espacio de 2.500 metros cuadrados en el que Global Omnium aloja en la ciudad de Valencia a cerca de 20 empresas especializadas en tecnologías disruptoras –machine learning, inteligencia artificial, big data, realidad virtual o robótica-.