Se definen como emprendedores que ayudan a emprendedores y eso que el foco lo tienen puesto en los inversores, a quien brindan toda su tecnología basada en analítica avanzada e inteligencia artificial para agilizarles la toma de decisiones e identificar a las startups que más se ajustan a sus intereses.
No se trata de una entelequia, sino, más bien, de una propuesta de valor que contribuye, en última instancia, a coser un ecosistema emprendedor más maduro con startups e inversores potentes y conectados donde, al final, todos salen beneficiados.
La startup Kiota es el resultado de la pasión de dos hermanos por el emprendimiento; uno economista, encargado de la parte de negocio, y el otro ingeniero, responsable de la parte técnica.
El proyecto surge de la tesis doctoral del CEO, Raúl Estrada, aunque el aterrizaje en el mercado llegó en 2021 en Málaga y la interacción constante con los clientes ha ido moldeando el producto hasta lograr la versión actual.
Pero ¿cómo contribuyen a ayudar a los inversores y, de forma indirecta, también al emprendedor? La respuesta es clara: "Nuestra idea es intentar democratizar la analítica avanzada para inversores en etapas tempranas. Eso quiere decir que en la actualidad, la mayoría de inversores sólo tiene dos alternativas; montar un equipo interno o recurrir a soluciones con precios muy elevados y limitaciones importantes", afirma Estrada a D+I.
Raúl Estrada es cofundador y CEO de Kiota.
"Nuestro SaaS vertical, al estar enfocado totalmente al mundo de la inversión, intenta poner las herramientas más avanzadas al alcance de cualquiera, de una forma económica. Si dotamos a los inversores de mejores herramientas, estos conseguirán mejorar su eficiencia, también tomar decisiones más acertadas, obteniendo retornos más altos, y por último, esperamos que esas decisiones también sean más justas, reduciendo el número de emprendedores que se ven afectados por sesgos en los procesos de toma de decisiones", añade el CEO.
Y resume de forma muy escueta dónde reside el verdadero valor añadido de Kiota: "Ayudamos al inversor para que se beneficie también el emprendedor". Para ello siguen tres pasos básicos: captación, análisis y gestión.
Captación, análisis y gestión: las claves
"Dar el dealflow es, obviamente, el primer paso, pero vamos más allá. Les ayudamos a superar los sesgos, a analizar mejor los proyectos y a eliminar muchas tareas repetitivas que les restan tiempo para tomar las mejores decisiones", puntualiza el responsable de Kiota.
Por último, se trata de un tema de eficiencia. "En la actualidad, los fondos que apuestan por la innovación todavía aplican, en su mayoría, procesos internos arcaicos, con un gran recorrido de mejora, que se llevan gran parte del tiempo disponible en labores repetitivas que se podrían trasladar a aquellas que realmente generan valor añadido como a hablar con los emprendedores".
"Permitimos que el inversor no emplee gran parte de su tiempo en labores repetitivas y pueda destinarlo a generar valor, por ejemplo, a hablar con los emprendedores"
Kiota cuenta con clientes en cinco países, la mayoría en España, y entre los más destacados figuran Km0, Órbita, Eoniq, IESE, Fundalogy o First Drop.
El uso de la inteligencia artificial es otra de las claves que explica la buena acogida del proyecto de Kiota.
Equipo de la startup Kiota.
"Está siendo curioso como hace dos años, cuando contábamos nuestras ideas sobre IA, había diferentes niveles de aceptación, tanto a nivel de inversores como de potenciales clientes, y en la actualidad se ha generalizado la necesidad de que los proyectos incluyan IA de una manera u otra", puntualiza Raúl Estrada.
De esta forma, la startup se apoya en la IA para reducir los sesgos de los inversores en la toma de decisiones, pero la presencia de esta tendencia tecnológica del momento ha dado un salto cualitativo de forma que "ahora la utilizamos de forma transversal en todo el proyecto, bien con modelos propios o de terceros, pero ya se realiza de una forma generalizada y no para una tarea concreta".
Acelerados por Órbita
Kiota es una de las startups que está inmersa en el programa de aceleración de Órbita, un hito en su trayectoria como empresa emergente que ha marcado el devenir del proyecto. "Terminamos el mes que viene. Para nosotros ha sido un antes y un después pasar por esta aceleradora. El nivel de contacto con los mentores y todo el equipo ha sido constante y muy fluido. Eso no es fácil de conseguir".
Además, clientes y ventas han experimentado también un salto cualitativo desde la entrada de Kiota en el programa de aceleración castellonense.