Los institutos tecnológicos de la Comunidad Valenciana que conforman la red REDIT han logrado consolidarse como la referencia de más de 15.500 empresas a la hora de abordar sus retos de I+D+i; incrementando un 21% su colaboración con el tejido empresarial, en los últimos 5 años.
Esta evolución, según explican desde el propio colectivo, ha sido posible en buena medida al apoyo de la Conselleria de Economía Sostenible y del IVACE (Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial), que, desde 2015, han mantenido una apuesta firme por la actividad que éstos desarrollan en favor de las empresas y los sectores productivos de la Comunidad Valenciana.
En este sentido, destacan tanto las más de 15.500 empresas asociadas a estos centros como el aumento del número de proyectos de I+D+i desarrollados en el último ejercicio, hasta llegar a los 2.621, lo que supone un 228% más con respecto al de 2018.
El afianzamiento de los institutos tecnológicos como una referencia nacional e internacional contribuye a posicionar a la Comunidad Valenciana como una de las regiones europeas que más han mejorado en materia de innovación, tal y como refleja el último estudio del Regional Innovation Scoreboard.
En este sentido, y según ha asegurado el presidente de REDIT, Fernando Saludes, "el apoyo del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) ha resultado clave ya que, desde el año 2015, ha incrementado el presupuesto destinado a los institutos tecnológicos en un 150%, hasta alcanzar los 60 millones de euros, en 2023".
Además, Saludes ha puesto de manifiesto la importancia de la colaboración público-privada para consolidar a la Red de Institutos Tecnológicos como una referencia internacional y ha destacado que "es esencial fomentar la estabilidad sistémica y estratégica por esta Red ya que se ha demostrado que invertir en ella revierte positivamente en nuestras empresas y contribuye a la consolidación de una región próspera y de oportunidades".
Por su parte, la directora general de IVACE, Julia Company, remarca que "la apuesta del Consell ha sido y es muy clara. El presupuesto del IVACE destinado a apoyar la actividad de los institutos tecnológicos ha crecido de manera muy importante, en estas dos últimas legislaturas, porque el Consell es consciente de la necesidad de potenciar y facilitar la inversión privada en I+D y en innovación como instrumento clave para la transformación del modelo productivo".
Y añade: "Clave, a su vez, si queremos favorecer y consolidar el crecimiento empresarial y, en definitiva, el bienestar de la sociedad valenciana. Y en este escenario, los institutos, por su razón de ser, experiencia y trayectoria, tienen en su vinculación con las empresas y los sectores productivos valencianos un valor diferencial que es fundamental para garantizar que las ayudas del IVACE:".
En este sentido, afirma que "responden a las necesidades de los diferentes sectores, aumentando así, las posibilidades de aplicar los resultados en las empresas de la Comunidad Valenciana".
De este modo, "ayudamos a transformar el modelo productivo de la Comunidad Valenciana a través de un sistema de innovación orientado a lograr los máximos resultados en el ámbito de la economía productiva".
Además, ha comentado que "la apuesta del IVACE es mucho más que un tema de incrementos presupuestarios, año a año. Es fundamentalmente una apuesta de largo recorrido para garantizar y facilitar la viabilidad de los Institutos y, consecuentemente, el apoyo permanente que prestan a las empresas valencianas para la mejora de su competitividad".
Como ejemplo de ello, resalta dos medidas: la primera es la creación, en 2017, de una línea de ayudas financiada al 100% con fondos propios de la Generalitat, una línea que apoya la investigación a medio y largo plazo. La segunda, una medida "en la que estamos trabajando ahora y que persigue que los Institutos puedan trabajar con escenarios plurianuales garantizados, porque la I+D no se rige por anualidades presupuestarias".
Otro aspecto que pone de manifiesto el crecimiento y la relevancia operativa de REDIT es el número de profesionales que se han incorporado, en los últimos años, para atender los retos y proyectos impulsados por éstos, hasta alcanzar los más de 2.000 profesionales -52% mujeres-, la gran mayoría de ellas del ámbito científico-tecnológico, un 29% más en el período analizado.
Además del trabajo que los institutos desarrollan para contribuir a la competitividad de las empresas, juegan un importante papel en el desarrollo socioeconómico de la Comunidad Valenciana.
Un claro ejemplo de ello, es la captación de los más de 129 millones de euros procedentes de fondos nacionales y europeos "que han servido para desarrollar iniciativas de I+D en nuestra región", ha explicado el presidente de REDIT.
"De estos fondos -ha concluido-, el 83% se ha destinado directamente a las empresas. Es decir, si no fuera por la acción de los institutos tecnológicos de REDIT, esta notable captación de fondos, dirigida a potenciar la I+D regional tendría otro destino allende de las tierras valencianas", indica.
Otro importante efecto positivo de este activo estratégico de la Comunidad Valenciana, es el impacto social y ambiental generado por la red de institutos tecnológicos. En este sentido, tras impulsar un estudio pionero en Europa, junto con la dirección general de Innovación, se ha concretado que su impacto en estos ámbitos supera los 1.505 millones de euros, 351 de éstos, vinculados directamente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).