Las universidades españolas son cuna de investigaciones científicas que, más allá del conocimiento que generan sus científicos y personal académico, transitan en ocasiones con éxito el ambicioso camino del laboratorio a la sociedad, donde sus avances acaban impactando en la vida de las personas de forma directa.
Si estas iniciativas de transferencia del conocimiento cuentan, además, con un mayor peso de investigadoras y generan los tan necesarios referentes femeninos en la ciencia y la tecnología, el proyecto disruptor puede llegar a rozar la cuadratura del círculo.
Artikode Intelligence ha alcanzado esta categoría. Gestada en el seno del grupo de investigación CVBLab (Computer Vision and Behaviour Analysis Laboratory) -perteneciente al Instituto HumanTech de la Universitat Politècnica de València (UPV)- ha dado ese paso adelante para poner al servicio de las empresas los más de 25 años de expertise de algunos miembros del equipo en el campo del tratamiento de imágenes con inteligencia artificial.
En la era de la digitalización y la inteligencia artificial, sectores como la salud o la agricultura tienen a su alcance millones de imágenes de las que no siempre se exprime todo su potencial. Artikode Intelligence irrumpe en el mercado para dar solución a esta imperiosa necesidad.
"Cuando llegó la inteligencia artificial, el tratamiento de imagen clásico casi desapareció y entonces nos modernizamos. Desde 2012 estamos trabajando en esta plataforma con diferentes proyectos: europeos, nacionales, regionales… y el que nos dio el mayor empujón para sacarla al público fue un proyecto de valorización de la Generalitat Valenciana", afirma Valery Naranjo, cofundadora de Artikode Intelligence y también directora del grupo CVBLab.
Las imágenes captadas por drones, satélites o microscopios requieren de una gran resolución -gigapíxeles- que complica en extremo su procesamiento y análisis. Esta compañía española surgida en el seno de la UPV acaba con este desafío y, gracias su plataforma online y sus modelos de IA, permite gestionar de una forma eficiente estas imágenes pesadas.
El primer producto que Artikode Intelligence transfiere desde la UPV es PixNormous, que cubre toda la vida de un proyecto de inteligencia artificial para imágenes de estas características.
Modelos de IA "vivos"
"La plataforma permite cargar estas imágenes, anotarlas por expertos, hacer modelos de IA y subir el modelo a la aplicación. Cada cliente tendrá su propia personalización de la aplicación y el modelo según sus necesidades. Además, dichos modelos no son estáticos, sino que se irán actualizando con nuevas imágenes, son modelos vivos", relata a D+I la investigadora de la UPV.
Su valor añadido pasa por facilitar a los clientes modelos predictivos mono y multimodales adhoc para solucionar la problemática planteada en cada caso, diseñando y desarrollando una metodología basada en el paradigma de aprendizaje automático.
Ahí estriba una de las principales señas de identidad de Artikode Intelligence. Existe otra que imprime un gran valor añadido al proyecto: la plataforma facilita "desarrollar el modelo de IA e integrarse en la misma plataforma del cliente".
Trasladado al sector agrotech, la tecnología de la spin-off pone el foco en las empresas que realizar fotos con drones para los propietarios de las explotaciones agrarias. "Podemos ofrecerles un valor añadido para sus plataformas y ayudarles a exprimir realmente el potencial de los datos que recogen, dotándolas de inteligencia al introducir modelos de IA que predigan y/o segmenten regiones de interés", indica la investigadora.
El modelo de negocio de PixNormous es un modelo SaaS que ya cuenta con varios clientes en EEUU del sector farmacéutico y de salud. También aspira a un proyecto europeo en el área agrotech y de la biodiversidad centrado en imágenes satelitales.
"PixNormous, como he dicho anteriormente, frente a otras aplicaciones que realizan modelos de IA con imágenes, permite el manejo de imágenes gigapixel, que presentan una gran problemática ya que no pueden ser cargadas ni gestionadas en plataformas normales. Además, permite anotación colaborativa y modelos no estáticos", recalca Valery Naranjo.
"PixNormous permite el manejo de imágenes gigapixel, la anotación colaborativa y modelos no estáticos"
El sector de la salud también brinda un gran potencial sobre su manejo. Sirva como ejemplo la realización de las biopsias. Gracias a su plataforma los médicos pueden ver en la aplicación aquello que ahora sólo es posible bajo el microscopio. "Pueden ampliar la imagen y el proceso se lleva a cabo rápidamente, porque el tamaño de la imagen ya no es un problema", indica Naranjo.
Artikode Intelligence goza de otra particularidad que ejemplifica la singularidad de esta propuesta empresarial surgida del seno de la investigación en una universidad pública: es la primera spin-off de la UPV con una mayoría de investigadoras en el equipo fundacional.
Mayoría de investigadoras
Ana, Valery y Rocío son las tres investigadoras que junto a sus socios Adrián y Fernando han dado alas a este proyecto disruptor. No es habitual, menos en el área de la transferencia de conocimiento desde el laboratorio a la empresa, que ellas sean mayoría, y es que todavía queda mucho camino por recorrer en materia de igualdad en el sector de la ciencia y la tecnología.
Ana Martín es la CEO y cofundadora de la spin-off. Ingeniera electrónica y máster en automática e informática industrial, Ana ha trabajado de ingeniera especialista en inteligencia artificial y computación en la nube, y también atesora experiencia en marketing digital.
Por su parte, Valery Naranjo, también cofundadora, es ingeniera de telecomunicación y doctora por la UPV. Catedrática de teoría de la señal en el departamento de Comunicaciones de la UPV, también dirige el grupo CVBLab, y ha desarrollado una ardua labor investigadora y docente durante más de 25 años.
Rocío Del Amor es la tercera mujer que cierra el trío de talento femenino de la empresa. Es ingeniera biomédica y doctora por la UPV. Tiene más de cinco años de experiencia en inteligencia artificial principalmente centrada en los sectores biomédicos y de la salud, como investigadora en el CVBLab.
Un equipo talentoso y diverso
El equipo se complementa con Adrián Colomer, ingeniero en telecomunicación y doctor por la UPV con más de diez años de experiencia en inteligencia artificial y gran experiencia en proyectos en Europa y Estados Unidos.
Y, finalmente, Fernando López cierra este quinteto de talento investigador. Es ingeniero de telecomunicación, licenciado en ADE y ejerce de gestor de I+D del Instituto Human-Tech. Tiene más de 10 años de experiencia en dirección de I+D, y ha obtenido más de 10 millones de euros en convocatorias públicas y privadas.
El camino que arranca ahora para esta spin-off española no será sencillo, pero el talento generado por el equipo -diverso y experimentado- durante años, puertas adentro de la universidad, y la eclosión de la inteligencia artificial y la digitalización brinda ante sí un futuro prometedor en el que ya se están abriendo un hueco.