Hace unas semanas, la consejera de Economía, Conocimiento y Empleo, Elena Máñez, y el director de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI), Carlos Navarro, presentaron la hoja de ruta para impulsar la economía a través de la I+D+i con la ayuda de los fondos Next Generation.
Pero lo que no había trascendido, no al menos en aquella ocasión, es que el gobierno autonómico había decidido someterse previamente a un examen para calibrar la salud de la que goza el sector.
Ese examen externo fue encargado al Instituto de Estudios de la Ciencia y la Tecnología de la Universidad de Salamanca y a la empresa auditora Deloitte, que ya han presentado sus resultados.
No debería hablarse de un suspenso pero tampoco de un sobresaliente. Hay muchas cosas que mejorar y muchos retos por delante, según el documento, para que la región esté posicionada dentro del ecosistema disruptor español.
La consejera Máñez compareció recientemente en la Comisión de Economía, Conocimiento y Empleo del Parlamento de Canarias -a petición del grupo Nueva Canarias- para dar cuenta de la estrategia RIS3 como paso previo a la formalización de la estrategia S4.
En este sentido, apostó por mejorar la coordinación y la gobernanza del ecosistema de investigación, desarrollo e innovación del Archipiélago, junto a un plan autonómico de I+D+i y el impulso de la Agenda Digital como principales vías para mejorar la Estrategia de Especialización Inteligente (RIS3) en el nuevo documento S4 dentro de la hoja de ruta Canarias Progreso 2030.
Durante su intervención, presentó los informes de evaluación sobre la estrategia vigente elaborados por el Instituto de Estudios de la Ciencia y la Tecnología de la Universidad de Salamanca y la empresa auditora Deloitte.
Más objetividad
"Hemos optado por análisis externos para una mayor objetividad", después del seguimiento anual realizado por la Agencia Canaria de Investigación y Sociedad de la Información (Aciisi) a través del Observatorio de la I+D+i de Canarias.
Según los análisis, se ha puesto de manifiesto que las cinco líneas prioritarias de la RIS3 (liderazgo inteligente del turismo, Canarias como referente atlántico inteligente, valorización socioeconómica de la I+D en astrofísica, ciencias marítimo-marinas o biotecnología, agenda digital y crecimiento verde y sostenibilidad) mantienen su vigencia "porque continúan como grandes retos y oportunidades de presente y futuro" para las Islas.
Aun así, el instituto salmantino ha detectado un "amplio margen de mejora debido no tanto a problemas de conceptualización, sino de aplicación real".
Por su parte, el análisis de Deloitte, centrado en el resultado y el impacto, recomienda "no solo definir los sectores estratégicos, sino también las acciones transversales, como la transformación digital o la transferencia del conocimiento, además de una alineación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas", añadió la consejera autonómica.
"Sin embargo, quizá una de las grandes deficiencias que se detecta en este informe es que el último plan de I+D+i de Canarias se remonta a 2014 y llevamos casi siete años sin un nuevo documento, uno de los compromisos asumidos para esta legislatura al presentar la hoja de ruta Canarias Progreso 2030", destacó Elena Máñez.
También se requiere, según la evaluación presentada por la consejera de Economía, "una mejor coordinación de los distintos agentes del ecosistema innovador, porque resulta complejo disponer de un órgano operativo para la cogobernanza del sector público y la iniciativa privada, por lo ya se contempla corregir en la nueva Ley de Ciencia de Canarias, en fase de exposición pública".
Cuatro pilares de futuro
En cualquier caso, no conviene olvidar que el gobierno canario se encuentra inmerso en esa estrategia 'Canarias 2030', que impulsa a la vez y en un tiempo récord cuatro pilares fundamentales para desarrollar la economía del conocimiento en las Islas.
Estos pilares son una nueva Ley de la Ciencia Canaria, una nueva Estrategia Canaria de Especialización Inteligente (S4), un nuevo Plan de I+D+i y un Pacto por la Ciencia, inédito en el Archipiélago.
Como explicó la consejera, 'Canarias Progreso 2030' "viene a poner los cimientos del crecimiento inteligente de Canarias" y supone "un hito histórico" que tiene lugar "en un momento trascendental para las Islas, marcado por la llegada de los fondos europeos de recuperación"
Según indicó "no es casualidad que la UE haya marcado la innovación, la sostenibilidad y el conocimiento como pilares de la recuperación económica". A su juicio, el actual contexto ofrece "la gran oportunidad" de dar un salto cualitativo y cuantitativo importante en materia de innovación y conocimiento, "claves para afrontar de manera transversal todos los grandes retos que tenemos como sociedad".
La consejera destacó que Canarias "tiene muchas ventajas y un potencial que aprovechar en estos momentos", con una "posición geoestratégica privilegiada, centros de investigación de primera línea y dos universidades públicas, lo que ofrece un gran potencial para avanzar en la economía del conocimiento".
En esta línea, Máñez subrayó como otros de los aspectos centrales de esta hoja de ruta el impulso a la transformación del tejido productivo de las Islas, "vital para la reactivación económica", y la promoción y retención del talento joven, que fijó como uno de los pilares de 'Canarias Progreso 2030'.
"Tenemos un potencial de talento y conocimiento que tenemos que retener, generando proyectos que permitan que se desarrolle aquí, en el Archipiélago", dijo.
Por su parte, el director general de la ACIISI, Carlos Navarro, señaló que 'Canarias Progreso 2030' es "un documento abierto a la colaboración de todo el ecosistema canario de la I+D+i, con una hoja de ruta bien definida que facilita los resortes y recursos para sentar las bases de una investigación e innovación a la altura de las necesidades de la sociedad canaria".
Con todo, muchos retos y margen de mejor por delante para convertir al Archipiélago en una potencia disruptiva a nivel nacional.