En la autodescripción del proyecto se explica que Aqua Project es un proyecto de investigación que aborda el problema de la desalinización del agua de mar para su posterior consumo. Es un trabajo a pequeña escala que destaca por la característica de ser portátil, permitiendo un fácil transporte.

"Aunque no sea más que un prototipo, tiene el potencial de mejorar la distribución de agua en una versión mejorada, puesto que se pueden emplear materiales relativamente baratos", explican sus promotores.

Estamos en Canarias y lo que podría describirse como un proyecto innovador más dentro del potente ecosistema que tiene la región insular en torno al sector de la economía azul, merece una interpretación que va más allá.

Y es que este proyecto está ideado y desarrollado por siete jóvenes de entre 15 y 17 años, algo que demuestra ya no sólo ese potencial del que hablábamos sino que evidencia que el futuro está asegurado para que Canarias siga siendo un referente en este ámbito.  

Este verano, estos jóvenes de las islas han trabajado en el desarrollo de un filtro que permite obtener agua potable a partir del agua dulce, a través de diferentes materiales. Ha sido en el CCT Canarias 2024 promovido por la Universidad de La Laguna (ULL) y enmarcado en el programa 'Acércate a la Ciencia y a la Innovación' de la Agencia Canaria de Investigación, Innovación y Sociedad de la Información (ACIISI).

El equipo está constituido por Román, Saúl, Chloe, Ancor, Edna, Javier y Sara, y forma parte del eje de Ciencia, Tecnología, Energía, Biodiversidad y Medio Ambiente del Campus CCT Canarias, tutorizado por Aarón Miguel Acevedo Reverón como investigador principal, del Laboratorio de Desarrollo y Formación en Tecnologías Marinas (LDF-Tecnomar) y la Sección de Náutica, Máquinas y Radioelectrónica Naval de la ULL, ambos pertenecientes al Centro académico de la ULL.

Este proyecto se realiza para obtener agua potable a partir de agua con exceso de sales minerales, lo que permitiría acabar con la escasez de agua potables en infinidad de países del planeta.

El proyecto también serviría para reutilizar el agua contaminada de los aceites de los barcos, para convertirla en agua potable y así darle un nuevo uso. En definitiva, una solución para afrontar tres de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.

En concreto, el Objetivo ODS 6, que busca garantizar la disponibilidad y la gestión sostenible del agua y el saneamiento para todos; el Objetivo 7, que pretende garantizar el acceso a una energía limpia y asequible, clave para el desarrollo de la agricultura, las empresas, las comunicaciones, la educación, la sanidad y el transporte; y el Objetivo 12, que pretende garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles, algo fundamental para sostener los medios de subsistencia de las generaciones actuales y futuras.

Todo el conocimiento adquirido a lo largo del proceso ha quedado reflejado en un blog, también creado por el grupo de estudiantes, donde describen impresiones de una enriquecedora experiencia científica.

Pero conviene insistir en la importancia de que la cantera innovadora en economía azul esté en buena forma, algo que será necesario de cara al futuro.

Tal y como ya contó en su día DISRUPTORES, la primera reunión de la legislatura del Grupo Directivo del Sistema de Gobernanza de la Estrategia Canaria de Economía Azul (ECEA), celebrada a finales de 2023, sirvió para poner sobre la mesa la situación que vive el sector.

"Se ha hecho balance y ya contamos con un escaparate de lo que tenemos, pero ahora toca pasar a la acción y actuar", se dijo en aquella reunión.

Durante la misma, también se aprobó el primer Informe de Seguimiento y Evaluación de la Estrategia Canaria de Economía Azul para la Anualidad 2022 que recoge las actividades vinculadas a este sector en Canarias.