Octubre es un mes espacial. Mientras el planeta celebra, de los días 4 al 10 de octubre la Semana Mundial del Espacio, también se cumple un año de la aprobación por parte del Consejo Ejecutivo de la Generalitat catalana del proyecto de creación de la Agencia Espacial de Cataluña.
Conocida popularmente como la 'NASA catalana', este proyecto va tomando forma tanto en objetivos estratégicos como económicos pero, según David Ferrer, secretario de Políticas Digitales de la Generalitat, todavía "se está haciendo la tramitación necesaria para materializar este programa".
La cocción del plan, al año de su aprobación, marcha a fuego lento. El gobierno catalán aprobó el mes de marzo pasado una partida de un millón de euros destinados al Instituto de Estudios Espaciales de Cataluña (IEEC) y a la Fundación i2CAT, dos de sus colaboradores más activos en este ámbito, que se destinarán a impulsar la agencia y a seguir desplegando la Estrategia NewSpace de Cataluña donde está enmarcada.
El proyecto prevé el lanzamiento de una constelación de hasta seis satélites CubeSat (menos de 10 kg de peso), con una inversión pública global de 18 millones de euros durante cuatro años, cofinanciada en parte por los fondos europeos FEDER.
La iniciativa tiene como objetivo, según el Ejecutivo catalán, mejorar las comunicaciones y el control de sus satélites desde tierra, poner en marcha un programa de aceleración de empresas emergentes especializadas en el sector.
También prevé ejecutar soluciones con la información recibida de su primer nanosatélite, bautizado como Enxaneta y puesto en órbita el 22 de marzo pasado desde Kazajistán, que pasa por encima de Cataluña dos veces al día para desplegar servicios de conectividad de internet de las cosas con cobertura 5G.
"Desde la aprobación de la estrategia, se han desarrollado una serie de actuaciones para dar respuesta a otros objetivos identificados en el plan estratégico. Entre las más destacadas está la contratación de servicios de datos por satélite para aplicaciones IoT y de observación de la Tierra", explica Ignasi Ribas, director del IEEC.
Las previsiones
Los dos contratos, firmados por parte del IEEC con las empresas Sateliot y Open Cosmos, "contemplan el lanzamiento de dos satélites, el primero ya en órbita y un segundo que se prevé lanzar en 2022", indica.
En este sentido, según confirma Ferrer, "el segundo nanosatélite todavía no tiene fecha fijada para el lanzamiento porque esto depende del operador del lanzador que lo tiene que poner en órbita".
Durante este año también se ha avanzado, según Ribas, "en otras actuaciones, como las mejoras en la estación de comunicaciones con satélite ubicada en el Observatorio del Montsec y en el impulso del SpacePort en el Aeropuerto de Lleida-Alguaire, así como en múltiples acciones asociadas al impulso del ecosistema del sector New Space, en el campo del talento, el emprendimiento y la investigación y la innovación".
El ejecutivo catalán prevé sumar 75 empresas en el sector en su territorio en los próximos cinco años. El IEEC, desde su experiencia en investigación en el sector espacial desde hace más de un cuarto de siglo, "tiene la capacidad para desarrollar actuaciones como las que se contemplan en los objetivos del plan estratégico del NewSpace de Cataluña", según Ribas.
Considera que "Cataluña dispone desde hace décadas de capacidad para participar en proyectos y misiones de ámbito internacional y tiene un tejido de empresas, centros de investigación y universidades que demuestran tener un alto nivel de competitividad".
Prueba de ello, explica, es el "liderazgo existente en Cataluña en la contribución que España tiene en las misiones de observación de la Tierra y navegación impulsadas por la ESA (Agencia Europea del Espacio), en el despliegue de servicios que provee la ESA y la UE en ámbitos como el posicionamiento preciso, el estudio del clima, las telecomunicaciones o la seguridad en las operaciones de satélites o en la generación de aplicaciones, entre otros".
Reclaman una normativa específica
Desde el gobierno catalán se reclama el establecimiento de una normativa que le dé apoyo en el ámbito espacial, que ayude a promover la estrategia NewSpace en el territorio para crear un ecosistema favorable y competitivo.
En este sentido, la intención es promover un marco jurídico a partir de una norma reguladora con rango de ley y un organismo administrativo para gestionar su aplicación.
El ejecutivo también está estudiando la creación de un fondo de inversión especializado, en el que intervendría el sector público y el privado. "La implicación tanto pública como privada es clave", sentencia Ribas.
La industria espacial europea es una de las más competitivas del mundo. Proporciona ocupación, directa o indirectamente, a más de 231.000 profesionales y supone entre el 6% y el 9% de la economía de la UE.
En España, los gobiernos autonómicos de Galicia, las Islas Canarias, Andalucía, la Comunidad Valenciana y de Madrid, junto con Cataluña, apuestan claramente por este sector, como uno de los que se convertirán en más estratégicos en un futuro muy próximo. De momento, en Cataluña, el proyecto sigue su curso, sin pausas pero también sin prisas.