Facilitar la vida a autónomos y pymes para que sus necesidades financieras no supongan un obstáculo para su día a día sino que, más bien al contrario, se conviertan en un trampolín para que los negocios sean cada vez más rentables.
Así nació en 2009, en el contexto de la anterior crisis financiera, Crealsa, compañía valenciana que, con más de 450 millones de euros financiados y más de 4.000 clientes, acaba de dar un salto cualitativo a su proyecto disruptivo en el área fintech al convertirse en el primer neobanco español que financia a empresas y autónomos.
La empresa fue creada por José Molina, actual CEO, y Javier Chisbert, Executive Director, y está presidida por Andrés Rubio, con Rafael Roldán como vicepresidente.
La compañía, participada por IMAN Capital LTD desde 2020, ha evolucionado en los dos últimos años para ofrecer a sus clientes la operatividad transaccional como neobanco.
Este paso le permite contar con acceso a servicios financieros como cuenta de empresa sin comisiones ni gastos de apertura, IBAN español con posibilidad de domiciliaciones SEPA, transferencias inmediatas, tarjetas para empresas, así como líneas de crédito, factoring o anticipo del cobro de facturas, confirming o servicio de pago a proveedores, el adelanto de nóminas o préstamos.
Empresas de reciente creación
Precisamente en el ámbito de financiación es donde Crealsa se ha consolidado como uno de los referentes en España, con un volumen financiado de más de 450 millones de euros.
"Nos centramos mucho en ese papel de alternativa a la banca tradicional, sobre todo enfocados en empresas de nueva creación, que tienen difícil el acceso al crédito en las entidades tradicionales. Para nosotros es clave las empresas para las que trabajan estos autónomos y pymes, da igual si acaban de empezar o no", explica a D+I Javier Chisbert, Executive Director.
"De esta forma, por ejemplo con la covid, pudimos seguir ayudándolos porque había muchos negocios rentables que simplemente estaban atravesando un problema puntual. Tenemos muchos transportistas, por ejemplo, entre nuestros clientes", añade Chisbert.
El lanzamiento al mercado de su nueva plataforma digital y una amplia oferta de servicios financieros marca una nueva etapa en el desarrollo de soluciones que facilitan a los negocios la realización de todas las operaciones habituales que exigen en su día a día.
Y todo ello bajo un modelo híbrido en el que se priman las herramientas digitales pero donde tampoco se olvida que las pymes y los autónomos son los protagonistas que más rezagados van en la transformación digital y que necesitan un periodo de transición que Crealsa está comprometido a dar en sus nueve delegaciones.
La compañía cuenta además con oficinas en Valencia, Madrid, Alicante, Coruña, Granada, Málaga, Murcia, Sevilla y Zaragoza, a las que se sumarán nuevas localizaciones a lo largo de este año.
"Hay gestiones, verificaciones que todavía se tienen que realizar en el mundo físico, y desde Crealsa estamos trabajando para que cualquier empresa, cualquier autónomo que quiera gestionar cualquier cuestión con nosotros tenga a alguien de su zona más próxima para hacerlo. El modelo híbrido es el que más éxito va a tener", manifiesta Chisbert.
Todo ello gracias a las alianzas con varios partners internacionales, así como con proveedores tecnológicos como Toqio, fintech pionera en el desarrollo de soluciones digitales financieras.
Así, la nueva Crealsa se refuerza para dotar de mayor transaccionalidad a sus clientes, a los que venía ofreciendo hasta ahora acceso a diferentes formas de financiación.
La compañía asume así un ambicioso plan de expansión de su negocio, tanto para la captación de nuevos clientes en el ámbito de empresas y autónomos, donde ya cuenta con más de 4.000 clientes, como en ampliación de volumen financiado.
Plena operatividad transaccional
Para José Molina, CEO de Crealsa, "siempre nos hemos considerado como la alternativa a la banca tradicional, y para completar este proceso era clave forjar alianzas con referentes nacionales e internacionales en el ámbito financiero y tecnológico".
A lo que añade, “como neobanco hemos conseguido aunar el acceso de las empresas y autónomos a una financiación ágil y flexible con una plena operatividad transaccional, facilitando a nuestros clientes contar con una oferta única de servicios para todo su negocio".
El nuevo posicionamiento de Crealsa como neobanco viene avalado por el liderazgo del equipo de dirección, y con la entrada de directivos con más de 40 años de experiencia en el ámbito financiero, como Andrés Rubio y Rafael Roldán, con más de 50 profesionales, y a los que se sumarán otros 60 perfiles de diferentes especialidades.
Con esta nueva plataforma digital se confiere mayor agilidad y capacidad de personalización a nivel organizativo de la compañía, la puesta en el mercado en tiempos y costes mucho más reducidos a los habituales para los entornos financieros, y una propuesta de valor para el cliente centrada en la digitalización de procesos que ahora se completan en apenas minutos, frente a las horas de gestión necesarias en las entidades tradicionales, explican desde Crealsa.
El siguiente paso para Crealsa, como confirma su CEO, José Molina, "será un plan de expansión nacional que busca sin complejos ser la alternativa a la banca tradicional para las pymes y autónomos de nuestro país", a lo que añade, "buscaremos un fuerte crecimiento en todo el territorio español, sin renunciar a la internacionalización, consolidando a su vez nuestra red comercial con oficinas físicas en diferentes provincias".