Que el talento emprendedor abunda por cada rincón de la geografía española nadie lo discute. El ecosistema innovador de nuestro país ha experimentado en los últimos años una transformación sin precedentes que le faculta para mirar de tú a tú a colosos internacionales en determinadas áreas relacionadas con la innovación y la tecnología.
Proyectos muy potentes reivindican su espacio más allá de los tradicionales polos de innovación de Madrid, Barcelona, Málaga, Bilbao o Valencia en un nuevo tiempo donde no importa tanto la ubicación geográfica, sino el conocimiento y valor que cada empresa aporta a una nueva economía en construcción donde lo digital y tecnológico son pilares fundamentales.
Lo que ya no es tan común es que compañías con diseños, desarrollos y tecnologías punteras 100% made in Spain, que atan población al territorio al apoyarse en una red de proveedores que prima la proximidad, estén alcanzando un posicionamiento mundial que podría 'no tener suficiente con este planeta'.
La multinacional Meltio, con sede en Linares (Jaén), es el caso paradigmático de este prolífero escenario, no apto para la mayoría. Su historia ha sorprendido en los últimos años al sector de la fabricación aditiva mundial.
La impresión 3D en metal de Meltio ha seducido no sólo a la Marina de Estados Unidos, al Ejército de Tierra de nuestro país y, muy recientemente, a la Armada francesa, sino que ahora también apunta al sector aeronáutico y aeroespacial para seguir explorando nuevas líneas de negocio.
Discreción y confidencialidad, valor en alza
Según han confirmado a DISRUPTORES-EL ESPAÑOL fuentes de la multinacional española, en la actualidad se están desarrollando "proyectos de investigación con importantes actores" de esta floreciente industria para que su puntera tecnología de impresión 3D pueda llegar al espacio y contribuya en un futuro a la reparación de piezas metálicas de este tipo de naves tan sofisticadas.
"Meltio está desarrollando proyectos para este sector con su tecnología patentada de fabricación aditiva de metal bajo estrictos contratos de confidencialidad", precisan las mismas fuentes.
Bien saben en Meltio que la discreción y confidencialidad cotizan al alza en su sector, sobre todo cuando departamentos de Defensa y sectores sensibles como el aeroespacial y aeronáutico requieren de sus productos y servicios.
El proceso está en marcha y, debido a esa estricta política de confidencialidad, no es previsible que se conozcan más detalles hasta que los desarrollos en marcha fructifiquen y estén validados.
No es algo nuevo en la estrategia y modus operandi de la compañía. Sucedió en 2022 cuando su colaboración con la Marina de EEUU la catapultó a la primera línea de su nicho de mercado, un hito que le sirvió para darse a conocer al gran público y comenzar una senda de crecimiento que, al menos por ahora, no lleva visos de pisar el freno.
Los últimos movimientos de impacto la han llevado hasta Francia. Según han informado esta semana fuentes de Meltio, "la Armada francesa -Marine Nationale- ha validado el uso para maniobras reales de su tecnología".
A preguntas de esta redacción, las mismas fuentes precisan: "A diferencia del uso a bordo del buque USS Bataan de la US Navy, donde el cabezal de impresión 3D de metal de Meltio está integrado en una máquina fresadora para crear y reparar piezas ubicada a bordo de la embarcación, en el caso de la Armada francesa la empresa ha ofrecido en estas maniobras recientes teleasistencia desde tierra a las necesidades de piezas del portaaviones Charles de Gaulle".
"Esto significa que en los ejercicios de maniobras militares reales en alta mar Ursa Minor 2024, cuando los ingenieros a bordo del Charles de Gaulle tenían necesidad de fabricar y reparar piezas metálicas de acero inoxidable con tecnología de impresión 3D de metal, han confiando en una impresora 3D de Meltio que ha recibido la información pero situada desde tierra, en concreto, en la base militar de Toulon", añaden.
La incertidumbre geopolítica a escala mundial está encumbrando la demanda de innovación y tecnología en la industria de Defensa y Meltio es un 'player' español de referencia
De esta forma, la Armada francesa "en un futuro podría incorporarla, incluso, a bordo de buques de su flota".
Cabe recordar que, además de estos potentes logros, a finales de 2023 Sicnova, distribuidor en España de Meltio, rubricó un contrato con el Ministerio de Defensa de España para introducir la fabricación aditiva en los tres ejércitos españoles en los próximos cuatro años.
Actualmente, ejércitos de otros países están en proceso de validación de su tecnología de fabricación aditiva.
Sin lugar a dudas, la incertidumbre geopolítica a escala mundial está encumbrando la demanda de innovación y tecnología en la industria relacionada con la Defensa y, en este mercado, Meltio se ha posicionado como un player español en pleno proceso de expansión. De Jaén al mundo y de este, en un futuro -igual no tan lejano-, al espacio.