PandaGo nació en 2021 en Madrid de la mano de Mariano Galán y Francisco Acosta. Fue precisamente uno de los inversores de la que luego acabaría siendo su startup quien les presentó y prendió de alguna manera la llama de una aventura emprendedora que avanza con paso firme en movilidad sostenible.

"A Pancho y a mí nos presentó un inversor, José Miguel; casi lo consideramos un cofundador más. Nos dijo que si nos uníamos en un proyecto nos ponía capital. Y sí empezó todo", reconoce con orgullo Mariano Galán, uno de los cofundadores en conversación con DISRUPTORES - EL ESPAÑOL.

Desde el minuto uno, los dos emprendedores supieron que querían contribuir con su tecnología a la lucha contra la emergencia climática, un reto de nuestro tiempo donde la descarbonización y la movilidad sostenible de las ciudades son un pilar básico.

"Pancho venía de trabajar en Irlanda en Google y Facebook, yo ya llevaba muchos años en el mundo de la multinacional tecnológica y quería emprender; conocimos por separado a este inversor, él nos puso en contacto y nos encerramos literalmente un mes y medio en una habitación con una pizarra para dar luz a lo que hoy es PandaGo", añade el cofundador.

Aquel 'confinamiento emprendedor' no pudo ser más provechoso. En la actualidad, la startup tiene un equipo de 25 profesionales y cuenta en su haber con importantes reconocimientos, el último ser distinguida en la 17ª edición de los Premios Emprende XXI de CaixaBank en dos categorías: Desafío de Soluciones de Movilidad y Tecnología en las Ciudades del Mañana, así como el Premio a la Compañía Más Sostenible.

Fundadores de PandaGo, Mariano Galán y Francisco Acosta.

Su propuesta innovadora facilita la transición de las empresas hacia la movilidad eléctrica o lo que es lo mismo; el equipo de PandaGo ha hecho realidad 'la flota eléctrica como servicio', lo que permite a las compañías abrazar el poder de la digitalización como herramienta para conseguir unas ciudades realmente sostenibles.

PandaGo está volcada en alcanzar esta meta pero, además, aspira a hacerlo sin dejar a nadie atrás, sobre todo a los colectivos más vulnerables. "Lo que les decimos es que ellos se centren en su negocio y nosotros nos encargaremos de todo lo que tiene que ver con la electrificación de sus vehículos".

Para ello, "ofrecemos un servicio integral de 'flota eléctrica como servicio', explica Mariano. Desde asesoramiento hasta suministro de vehículos eléctricos, automatización de procesos de electrificación y gestión operativa, su plataforma proporciona una solución llave en mano. Además, permite medir el impacto ambiental. 

Por otro lado, "empoderamos a los inmigrantes proporcionándoles vehículos de reparto sostenibles y puntos de intercambio de baterías, fomentando su inclusión, su empleabilidad (plataformas de delivery, servicios de mantenimiento, etc) y ayudándoles a ahorrar y mejorar su economía.

Suscripción flexible por menos de 200 euros/mes

Para ello, PandaGo les facilita una moto eléctrica en suscripción flexible por menos de 200 euros al mes -"con el vehículo de gasolina están gastando una media de 400€ al mes entre mantenimiento y combustible", apunta el cofundador- y puntos de intercambio de baterías repartidos por las ciudades "para que puedan hacer jornadas tan largas como necesiten".

"Facilitamos el acceso a vehículos de reparto eléctricos a la comunidad inmigrante, tenemos un fuerte compromiso social con nuestra tecnología"

Mariano Galán, cofundador de PandaGo

En resumen, "nuestra propuesta busca hacer accesible y eficiente la adopción de la movilidad eléctrica, contribuyendo así a la construcción de ciudades más sostenibles y a la inclusión de los colectivos más vulnerables", recalca Galán.

El primer objetivo estratégico de PandaGo este año pasa por continuar con el desarrollo de su plataforma de software para optimizar la gestión de flotas y mejorar la experiencia del cliente.

Estrategias para 2024

Además, estamos trabajando en el desarrollo y la automatización de nuestra red de puntos de intercambio de baterías para garantizar una jornada de trabajo eficiente para los repartidores autónomos. También estamos enfocados en la digitalización de nuestros vehículos para mejorar su rendimiento y funcionalidad. 

En paralelo, "nos estamos preparando para expandirnos internacionalmente, explorando nuevos mercados y oportunidades de crecimiento". Actualmente, PandaGo colabora con el colectivo repartidor en Madrid, Barcelona y Valencia, y sus planes pasan por ampliar su cobertura a, al menos, dos o tres ciudades adicionales en España, explican.

En cuanto a la internacionalización, nuestro objetivo es iniciar este proceso en Portugal y en otro país adicional. "Estamos buscando asociarnos con una gran plataforma de delivery para electrificar su flota de repartidores autónomos y llevar nuestra solución sostenible a nuevos mercados", anuncia.

Por último, la startup contempla realizar una ronda de inversión a finales de año para impulsar todavía más su crecimiento y desarrollo.

Caso de éxito en el 'delivery'

Desde la compañía se destaca el resultado de un caso de éxito con una plataforma de delivery, a la que han ayudado con su tecnología a optimizar su flota y mejorar su rendimiento.

"Gracias a nuestro servicio de Fleet-as-a-Service, redujimos los tiempos de respuesta en un 27%, aumentamos el volumen de flota operativa en un 96% y mejoramos las ventas en un 7,7%", recalca Galán.

Pero más allá de los números, PandaGo también pone el foco en ayudar a aquellos que lo tienen un poquito más difícil. Así, destaca su compromiso social al facilitar el acceso a vehículos de reparto eléctricos a la comunidad inmigrante, promover la igualdad de género y fomentar la diversidad en nuestro equipo.

"Este es solo el comienzo de nuestra misión de crear un futuro más sostenible y equitativo para todos, y estamos emocionados por seguir creciendo y haciendo un impacto positivo en el mundo", concluye el cofundador.