Sensores 'made in Spain' para salvar a las belugas de Alaska
Aridea Solutions utiliza la tecnología de la española Libelium en su proyecto para monitorizar la calidad del agua en la que habita esta amenazada especie
13 julio, 2018 12:00La beluga habita en el Océano Ártico y las áreas costeras de Canadá, Alaska, Rusia y Groenlandia con una población estimada en los 150.000 ejemplares a nivel mundial. Entre 300 y 400 de estos cetáceos habitan las aguas de la Ensenada de Cook (Alaska), donde en 2008, esta especie fue considerada en peligro crítico.
La contaminación y la actividad humana están empeorando y poniendo en peligro la situación de esta especie. Y lo peor llegó en febrero de 2017, cuando un escape de gas natural fue detectado a aproximadamente 6 kilómetros de la costa de Nikiski, en la Ensenada de Cook. La fuga fue inmediatamente reportada a las autoridades de Alaska, quienes pusieron en marcha un proyecto para la monitorización del área, dadas las especiales circunstancias de la beluga en este ecosistema. La empresa estadounidense Aridea Solutions, partner de la española Libelium, ha sido la responsable de monitorizar el aire y las aguas cercanas al escape gracias a los sensores de la compañía española.
Para hacer este control, Aridea Solutions llegó a la conclusión que una boya sería la mejor plataforma para este proyecto. Y así, se pusieron maños a la obra con el diseño de una boya equipada con la plataforma de sensores inalámbricos de Libelium para la monitorización del aire y el agua cercanas a la fuga que afectan a la beluga y otros mamíferos acuáticos. Este proyecto consiste en la monitorización de metano, oxígeno y niveles de CO2 en la superficie del agua. Al mismo tiempo, se controlan también los niveles de metano disuelto en agua, oxígeno disuelto y otros parámetros que se pueden encontrar también en este entorno.
Tras la instalación, la boya ofrece información fundamental y de manera rápida a los científicos para el análisis y cuantificación del impacto medioambiental general. La plataforma recolecta y transmite información medioambiental clave a un gateway instalado en un barco cercano. Este gateway recopila la información recibida desde los sensores y envía la información a la plataforma Terralytix de Aridea, que permite a los científicos visualizar y analizar los datos recolectados en tiempo real.
Retos
El desempeño del sistema de monitorización se ha visto desafiado por los movimientos de las placas de hielo y la exposición a temperaturas extremas en la zona. Pero la boya y los sensores elegidos para este proyecto han sido diseñados para resistir estas condiciones extremas. Debido a las restricciones de la guardia costera alrededor de la zona del escape, la boya, descolgada gracias a una grúa en el propio barco, debe ser capaz de navegar a la deriva hasta la zona afectada gracias a la fuerza de las mareas. Una vez el dispositivo se encuentra en el área y con el barco a una o dos millas, los sensores toman las mediciones y envían los datos al gateway gracias a la capacidad del protocolo de comunicación de largo alcance 900MHz.