El gigante químico Grace compra Rive Technology, fundada por el español Javier García
La empresa quiere aprovechar la tecnología patentada por el recién nombrado presidente de la Academia Joven de España
17 junio, 2019 19:00No hay operación en el sector químico comparable en España. La multinacional química Grace ha adquirido Rive Technology, empresa fundada por el español Javier García en EEUU, para aumentar la capacidad de refino de petróleo. Este movimiento supone la incorporación a Grace de ciertos empleados de investigación y desarrollo, servicios técnicos y comerciales, aunque los detalles financieros de la compra no han sido revelados.
En un comunicado, Tom Petti, presidente de Grace, subraya que en la última década han visto "un progreso y unos beneficios increíbles" en sus clientes al incorporar la tecnología de Rive en ciertas aplicaciones. “A medida que crece la demanda de productos petroquímicos, la incorporación de la tecnología patentada por Rive Technology permite ofrecer a nuestros clientes una mayor flexibilidad en la conversión de petróleo crudo a materias primas para productos petroquímicos. Esto proporciona un valor real añadido a nuestros clientes de refinerías globales”.
Desde hace casi nueve años, las dos compañías llevaban colaborando en un programa conjunto para comercializar a las refinerías de todo el mundo la combinación de la tecnología del español Javier García, recientemente nombrado presidente de la Academia Joven de España, con las capacidades de la multinacional química con la que ahora se ha cerrado una operación de compra.
"Gracias a nuestra larga relación con Rive, nuestros clientes ya se benefician de la tecnología, pero al llevar esta innovación a la empresa, podemos implementarla de inmediato para ampliar aún más nuestras capacidades", puntualiza Nathan Ergonul, vicepresidente de Marketing de Grace.
Rive Technology se fundó en 2006 para comercializar la patente de la tecnología Molecular Highway para procesos catalíticos, como los utilizados en refinerías de petróleo. Esta tecnología química genera "mayores rendimientos, un proceso más eficiente y una mayor rentabilidad de la refinería".