¿Cómo motivar a los alumnos de la Escuela Técnica de Ingeniería de Gijón para enseñarles no solo a elaborar proyectos, sino que estos tengan una aplicación útil para la sociedad? Pensando en cómo lograrlo, Marián García Prieto, una de las profesoras de este centro y cofundadora de la startup i4Life, empieza a contactar con organizaciones sociales como la Asociación de Párkinson de Gijón. Sus miembros descubren a la profesora y sus alumnos las necesidades que necesitan cubrir. Este es el germen de la creación de i4Life hace algo más de un año: el desarrollo tecnológico y la futura comercialización del bastón inteligente Pauto, que se lanzará este mes de septiembre al mercado.
Pauto surge de una necesidad concreta que tienen los pacientes de Párkinson al sufrir los llamados ‘bloqueos de la marcha’ (FOG por las siglas de freezing of gait). Aunque es cierto que ya existen bastones láser para desbloquear al paciente, el problema que identificaron desde esta asociación a los ingenieros de i4Life es la poca visibilidad del láser en el exterior por lo que solo pueden usarse en interiores. Así se inició el desarrollo de esta solución para suplir estas carencias.
Se trata de un bastón inteligente y conectado que, a través de una serie de estímulos, tanto visuales como hápticos, ayudan al paciente a desbloquearse cuando sufren estos bloqueos. Así, cuenta con dos diodos láser, de color verde y rojo, que proyectan una línea y un punto respectivamente. "El hecho de tener distintas formas y colores asegura su visibilidad incluso en entonos con alta luminosidad (exteriores)", explica la también responsable de I+D+i de esta startup. Asimismo, subraya, si este estímulo fuese insuficiente, dispone de un motor en su interior que proporciona una ligera vibración en la empuñadura del bastón, perceptible para personas con algún tipo de problema visual.
Este bastón, que cuenta con una patente nacional, tiene un módulo de comunicaciones propio, capaz de funcionar tanto con redes 2G como 4G, así como está preparado para el futuro 5G. Además, de cara a ampliar su uso en pacientes con algún tipo de demencia, como puede ser alzhéimer, Pauto lleva implementado un módulo avanzado de posicionamiento GPS y GLONASS, que permite localizar al usuario ante cualquier episodio de desorientación.
Así, contando con la previa autorización del usuario, de un familiar o de un cuidador, el bastón puede lanzar señales de socorro desde su botón e, incluso, establecer y marcar zonas seguras, como, por ejemplo, dos kilómetros alrededor de su domicilio.
En estos casos, la persona designada recibirá un SMS alertando de la salida de esa zona segura y, a través de la app o desde la web, se podrá localizar al paciente con total precisión. En esta misma aplicación, el usuario puede consultar su actividad diaria y llevar un control del número de bloqueos sufridos o recibir avisos como la toma de medicamentos, entre otros datos.
Y esta última funcionalidad es posible con el software i4park de desarrollo propio. Con esta herramienta implementada en el bastón se facilita la comunicación entre médico-paciente para proporcionar información más precisa sobre los síntomas y el estado del usuario. "El bastón es capaz de rellenar automáticamente parte de los datos que le interesan al médico y los sube a la nube a su disposición para poder dar el tratamiento adecuado", destaca García Prieto.
Dispositivos para enfermos con EPOC
Otro de los proyectos de esta startup está pensado para pacientes con EPOC (enfermedad crónica respiratoria). i4case es un pulsioxímetro compacto y adherible a la parte posterior de un smartphone, que tiene el objetivo de prevenir hospitalizaciones debidas a crisis agudas, que se pueden evitar llevando a cabo un control rutinario, explica la responsable de i4Life.
Este dispositivo cuenta con un sensor de alta precisión de tipo reflexivo, por lo que la medición se realiza sobre una superficie, en lugar de tener que insertar el dedo en una pinza. De este modo, destaca, "se reduce el tamaño, aumentando comodidad y portabilidad". Además, para afinar más la precisión de las medidas, el sensor también mide la temperatura ambiente, introduciendo este dato en el algoritmo de medición.
Los resultados del pulsioxímetro se reflejan en el móvil (al que se vincula mediante Bluetooth) mediante una app que permite entre otras cosas, llevar un registro y elaborar un histograma con los niveles tanto de ritmo cardíaco como de saturación de oxígeno en sangre.