Thyssenkrupp idea en España una pasarela de embarque de aviones que se controla a 2.000 kilómetros

Mover la pesada pasarela de embarque del avión (los conocidos fingers) de forma remota, en concreto, hasta a 2.000 kilómetros de distancia. Ese era el esfuerzo del equipo español de Thyssenkrupp. ¿Con qué fin? Mejorar la seguridad en el aeropuerto y facilitar la experiencia del viajero. Lo han conseguido.

La feria Inter Airport Europe Expo de Múnich ha sido el escenario escogido para la presentación del producto. “En el sector del transporte aéreo, con una previsión que doblará el número de pasajeros a 8,4 billones en el año 2037, es fundamental mejorar la experiencia del usuario, especialmente en las soluciones de movilidad en su llegada al destino”, señala Mauro Carneiro, CEO de Thyssenkrupp Access Solutions, en comunicado de prensa.  

Una solución ideada por Thyssenkrupp Airport Solutions, la división de soluciones aeroportuarias con sede en Asturias, y el centro de innovación de la compañía en Gijón se llama Sistema de Atraque por Control Remoto (RCS- Remote Control System). Se trata de una combinación tecnológica de hardware y software que permite que las pasarelas de embarque sean controladas de forma segura por un operador en un puesto remoto a 2.000 km de distancia.

Durante la feria de Múnich, los visitantes pueden operar de forma segura y en tiempo real desde Alemania una pasarela de embarque a una maqueta del Airbus 320 situadas en el laboratorio de prototipos a escala real del centro de I+D+i de Gijón.

“La sensación es la de operar un vehículo de 30 toneladas remotamente a 2.000 km de distancia de forma totalmente segura”, afirma Javier Sesma, director general del Thyssenkrupp Elevator Innovation Center de Gijón. De esta forma, la compañía muestra al público de forma  interactiva y en un entorno a escala real su objetivo de mejorar la eficiencia de cada aeropuerto y la experiencia de cada viajero en los aeropuertos de todo el mundo.

España, innovación para Thyssenkrupp

Thyssenkrupp ha apostado por España, y por Asturias en concreto, como epicentro para la innovación y el desarrollo tecnológico. Para Sesma, "la proximidad de las fábricas al centro de innovación facilita la incorporación de la innovación a los nuevos productos y servicios, y agiliza su llegada al mercado. La fuerte apuesta de Thyssenkrupp en el mercado español ha favorecido el impulso de tecnologías totalmente pioneras en nuestra industria”.

“En España, que cuenta con las infraestructuras de transporte más modernas de Europa, existe una gran oportunidad para potenciar un ecosistema innovador en estrecha colaboración entre empresas e instituciones. Un modelo de negocio socioeconómico sostenible basado en innovación e internacionalización, que atrae talento y que genera inversión, nos permite abrir nuevos mercados y contribuye a la imagen de la marca España”, concluye Sesma.