Una edificación sostenible para un mundo con 37 megaurbes
Elisa Ronka, responsable de innovación en Siemens, analiza las claves de la futura unión entre construcción y digitalización
7 noviembre, 2019 07:00El sector industrial no puede plantearse la digitalización como una opción. Es una obligación", afirma Elisa Ronka, gerente de innovación de desarrollo empresarial de Siemens, presente en el IoT Solutions World Congress, celebrado esta semana en Barcelona. Ronka lidera el lanzamiento al mercado europeo de soluciones para el sector de la construcción que contemplan todo el ciclo de vida de los edificios, pero que básicamente están enfocadas hacia las personas que los ocupan.
Este sector es uno de los más tradicionales y en el que más lentamente se va incorporando la digitalización. "Solo la agricultura se sitúa por detrás de la construcción, en términos de digitalización", recuerda Ronka. "Tiene un gran potencial, y no me refiero solo a las estructuras físicas. Cuando hablamos de digitalizar el sector, contemplamos la infraestructura, pero también los espacios, los servicios y las personas que la ocupan".
La digitalización dará un vuelco al sector y no será en un futuro muy lejano. "Ciertamente se está moviendo muy despacio, está demasiado instalado en el pasado, pero en el momento en el que perciba que la digitalización ofrece un valor añadido tanto a las estructuras como a sus usuarios o a sus propietarios, e incluso a la industria en sí, se agilizará".
La tecnología ya está disponible, cada vez evoluciona más rápidamente y ahora solo queda aplicarla. El sector tampoco dispone de mucho tiempo para desojar la margarita. Según los expertos, se prevé que antes de seis años en el mundo habrá 37 megaciudades que albergarán el 14% de la población mundial. Esto supondrá una mayor demanda de energía, de agua, un cambio en la movilidad y también en la gestión de ellos. La sostenibilidad del planeta también lo reclama. La digitalización, combinada con internet de las cosas, es la tecnología base que permitirá hacer frente a estos desafíos.
"Siemens es muy fuerte en digitalización. Trabajamos en diferentes áreas, pero si hablamos del sector de la construcción, el ámbito de la energía es fundamental. Caminamos hacía unos edificios dotados de una fuente sostenible, verde y flexible, que contribuirán al ahorro. Ofrecemos soluciones para que los usuarios puedan interactuar mejor en los espacios para así optimizar su uso en espacios comunes y privados. Cuando se relacionan todas las áreas de una infraestructura, cuando todos los datos interactúan, es cuando tenemos un edificio plenamente inteligente".
El primer paso, según Ronka, es crear una plataforma tecnológica que se encargue de recopilar todos los datos que se generen en el edificio. "Los recogerá, los integrará y los agregará para ofrecer el valor añadido que convertirá al edificio en sostenible y, en definitiva, en inteligente. Me he referido a la gestión energética, pero ésta se deber realizar en paralelo a otros ámbitos para tener una conectividad completa".
No hay una receta única. Dependiendo del estado de la infraestructura, del entorno y de los objetivos que se pretenden con su digitalización se aplicarán unas y otras soluciones. En los hospitales, "intentamos dar el máximo valor añadido a las personas para que se sientan confortables, tanto si nos referimos a empleados como a paciente".
Las personas siempre están en el centro de la tecnología, destaca Ronka. Para ello, MindSphere, la plataforma digital para IoT, creada inicialmente para el entorno industrial y que ahora se aplica en cualquier sector, "utiliza elementos de aprendizaje, adaptación y predicción, para añadir valor a todos los espacios".
"Pero independientemente del tamaño del edificio, disponemos de soluciones aplicables a cualquier dimensión. El concepto que aplica Siemens es exactamente el mismo, solo que escalamos según el entorno y los objetivos", explica Ronka. Todas ellas están basadas en big data y la finalidad es añadir valor y mejorar los entornos en infraestructuras críticas, como hospitales y centros comerciales, pero también en el entorno residencial.
La sostenibilidad energética, por citar un ámbito de digitalización, se consigue a través de la solución Enlighted. Basada en la sensorización y la escalabilidad, recoge datos en tiempo real para dar respuestas rápidas y precisas. Solo aplicando esta solución a la iluminación de un edificio, la misma es capaz de reducir el coste energético global en un 85%. Si pensamos en megaciudades, el dato no es nada despreciable.