El ecosistema emprendedor español está certificando en los últimos años avances notables en la necesaria transferencia de conocimiento desde el ámbito académico, los parques tecnológicos y centros de investigación hacia el mercado.

Para una economía más competitiva a escala global -cada día más digital y tecnológica-, España necesita un sector emprendedor que atine con la fórmula para sacar del laboratorio todo ese valioso conocimiento y transformarlo en modelos de negocio rentables que, en última instancia, impacten y mejoren la vida de la ciudadanía.

No es un proceso fácil y, aunque es cierto que queda todavía un largo recorrido por delante, España cuenta con proyectos nacidos en el seno de ámbitos de investigación que están cambiando la percepción que se tenía hace tan sólo unos años.

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Gradiant, centro tecnológico con sede en Vigo (Pontevedra), es uno de los nombres propios que están capitaneando este profundo proceso de cambio y Sense Aeronautics, su tercera spin-off que llega al mercado como caso de éxito.

La startup gallega lleva al siguiente nivel la visión artificial a través de imágenes captadas por drones con una tecnología basada en inteligencia artificial que se desmarca de las soluciones que existen hasta la fecha en el mercado por el valor añadido que aporta al humano.

De hecho, ha sido la gestión a fuego lento de su tecnología en el seno de Gradiant lo que le permite ahora dar ese salto cualitativo que facilita operaciones no tripuladas más seguras y rentables.

Y es que su propuesta de automatización para el análisis de esas imágenes captadas por drones permiten a una misma persona hacerse cargo de varios dispositivos a la vez.

Equipo de Sense Aeronautics, spin-off de Gradiant.

Pero ¿dónde está el factor diferencial de su tecnología? Todos los drones que se utilizan en la actualidad lo hacen con al menos una cámara instalada a bordo. El objetivo es que un humano acceda a esas imágenes, a poder ser en tiempo real, para analizarlas y adoptar decisiones derivadas de esos datos de acuerdo con la estrategia y sector del que se trate.

"Eso supone una cantidad masiva de información a analizar. Por tanto, los servicios con drones no serán realmente escalables hasta que una gran parte de ese análisis esté automatizado. Nosotros nos dedicamos precisamente a eso: al análisis en tiempo real, a través de IA, de flujos de video provenientes específicamente de drones", explica a DISRUPTORES – EL ESPAÑOL Fernando Gago, CEO de Sense Aeronautics.  

Automatizar el análisis de las imágenes

El empresario entró a formar parte del proyecto hace un par de años, tras una etapa de seis años como director de innovación de un potente grupo logístico.

"Cuando llegó a Sense Aeronautics, aún estaba en fase de incubación en Gradiant. Primero se construye la tecnología, luego ésta se transforma en un producto y, finalmente, ese producto en una empresa, que es la fase en la que estamos en la actualidad".

"Tendemos a que el humano intervenga lo mínimo gracias a nuestra IA, lo que permite aumentar la operativa y que una persona gestione varios dispositivos al mismo tiempo"

Fernando Gago, CEO de Sense Aeronautics

"Nuestra visión artificial permite automatizar parte del análisis de los datos, de forma que una misma persona puede gestionar varios dispositivos, dado que sólo se va a requerir su atención en momentos puntuales. Tendemos a que el humano intervenga lo mínimo, de forma que se gana en operativa", añade Fernando Gago.

La compañía arrancó su actividad en el primer trimestre de este año y ya está cerrando sus primeros contratos y realizando pruebas de concepto con clientes y distribuidores de distintos ámbitos.

Tecnología de Sense Aeronautics.

En concreto, su vídeo-analítica está siendo usada en alguna de sus aplicaciones -navegación visual, inspecciones y vigilancia- por empresas en cuatro continentes. Y es que la tecnología de Gradiant responde a necesidades de sectores que van desde las Fuerzas Armadas a la ingeniería civil -aeropuertos, infraestructuras, etc- y la seguridad.

"Este 2024 nuestra aspiración es tener validación con clientes reales de todas nuestras líneas de producto y tener impacto a escala internacional, incluyendo más allá de Europa", incide el CEO.  

El CEO explica que su principal valor diferencial no reside sólo en los modelos de IA específicos para imágenes de dron -vibración, objetos muy lejanos/pequeños, cámara en movimiento, fondo y condiciones de luz cambiantes, etc-, sino también en toda la tecnología de infraestructura -latencias, protocolos de comunicación, integración con sistemas aeronáuticos, etc- que "es quizás menos visible, pero igualmente importante, si no más". 

"Todo aquello que hace que lo que funciona en un video en la oficina, funcione igual de bien en una operativa real de un dron volando".

El valor del equipo humano

El equipo humano es uno de los principales activos de la compañía. Está compuesto por siete personas, todos ingenieros. "Cinco conforman estrictamente el equipo técnico y los otros dos nos dedicamos a la parte estratégica, comercial y de producto. También nos apoyamos en la estructura de Gradiant para las funciones más transversales", concluye el CEO.

Sin lugar a duras, un ejemplo de cómo la transferencia de conocimiento, bien gestionada y con un trayecto claro en ese camino desde el ámbito científico-técnico hasta el mercado, puede hacer ganar competitividad y posicionamiento a una economía como la española.