Con la distribución de las primeras vacunas contra el SARS-COV2 en Gran Bretaña y muy pronto en EE.UU., comienza la ‘batalla’ definitiva contra una pandemia que ha puesto ‘patas arriba’ los sistemas sanitarios de todo el planeta y ha dejado tocados a muchos sectores económicos. La vacuna, la gran esperanza para conseguir la inmunidad de grupo, comenzará probablemente a distribuirse en nuestro país en enero.
Pfizer y Moderna recibirán con toda seguridad la autorización de la EMA (Agencia Europea del Medicamento) y el sistema sanitario español ya se está preparando para adecuar su logística a las necesidades de esta nueva vacuna que requiere de unas condiciones muy concretas de conservación a temperaturas muy bajas. La cadena de frío es imprescindible para mantener la eficacia del tratamiento.
Pues bien, IBM Security asegura que un grupo de ciberdelincuentes trabaja para recopilar información sobre diferentes aspectos de la cadena de frío y utiliza para ello correos electrónicos enviados en nombre de un responsable de una empresa biomédica china para llevar a cabo ataques de spear-phishing contra organizaciones mundiales. El objetivo de este ataque, afortunadamente descubierto, era recopilar nombres de usuarios y contraseñas para poder acceder a comunicaciones internas, así como al proceso, los métodos y los planes de los gobiernos para distribuir la vacuna.
Entre los objetivos del ciberataque estaban la Dirección General de Fiscalidad y Unión Aduanera de la Comisión Europea y empresas del sector de la energía solar de países como Alemania, Italia, Corea del Sur, República Checa y Taiwán. Por fortuna, ninguna de las organizaciones respondió a los mensajes de los ciberdelincuentes, por lo que los hackers no han accedido a la información.
IBM ha creado un grupo de trabajo dedicado a rastrear estos ataques, y cualquier tipo de programa malicioso que pudiera afectar el desarrollo, producción, investigación y distribución de las vacunas contra la covid-19. Según el informe de IBM, “una brecha dentro de cualquier parte de esta alianza global podría resultar en la exposición de numerosos entornos informático de socios en todo el mundo con resultados negativos para la vacuna contra la covid-19”.
Alerta por tanto a farmacéuticas y gobiernos a reforzar sus sistemas de ciberseguridad para impedir que los piratas puedan interrumpir la cadena de frio y alterar así la dispensación de las vacunas.