"Extraer valor económico de la IA generativa requiere varios tipos diferentes de capacidades. Desafortunadamente, la mayoría de las empresas carecen de ellas". Este es uno de los desafíos que plantean los autores Tom Davenport y John J. Sviokla en un reciente artículo publicado en HBR.

Los autores subrayan que existen dudas sobre si la IA generativa puede generar suficiente valor para justificar sus costos. La clave para aprovechar su valor económico radica en que las empresas inviertan en cambio de comportamiento, experimentación controlada, medición del valor empresarial, gestión de datos, desarrollo de capital humano y pensamiento sistémico.

El cambio de comportamiento es crucial, ya que los empleados deben saber cuándo y cómo usar la IA generativa efectivamente, además de aportar sus propias contribuciones. La experimentación controlada permite determinar el valor de la IA generativa en contextos específicos mediante experimentos diseñados que comparan la productividad con y sin esta tecnología.

Medir el valor empresarial implica rastrear la productividad individual y los impactos en nuevas iniciativas, asegurando una comprensión clara del retorno de inversión. La gestión de datos es más compleja con la IA generativa, que maneja datos no estructurados como texto e imágenes. Los procesos efectivos de curación y gestión de datos son esenciales.

El desarrollo del capital humano enfatiza el uso de la IA generativa para aumentar, no reemplazar, a los empleados, lo que requiere aprendizaje y adaptación. El pensamiento sistémico, inspirado por emprendedores exitosos, implica crear un sistema superior que integre la IA generativa para mejorar los procesos empresariales y obtener ventajas competitivas.

Las empresas deben rediseñar el trabajo incorporando la IA generativa para optimizar la productividad. Para implementar proyectos de IA generativa con éxito, las organizaciones deben financiar a individuos innovadores y seleccionar proyectos alineados con los objetivos de la empresa. Este enfoque asegura que las iniciativas de IA generativa estén estratégicamente integradas y proporcionen beneficios medibles.

Además de este artículo, desde Inndux hemos revisado para nuestro último informe mensual otras publicaciones recientes sobre los beneficios que ofrece la IA generativa. Por ejemplo, McKinsey indica que la adopción de IA generativa ha aumentado significativamente beneficiando a las empresas, aunque estas enfrentan desafíos como altos costos y falta de infraestructura adecuada.

Las organizaciones líderes utilizan modelos de código abierto y se categorizan como observadores, pioneros e innovadores, estos últimos maximizando el potencial de esta tecnología. Por otro lado, Boston Consulting Group detalla en un reciente informe cómo la IA mejora la eficiencia en servicios financieros y manufactura, con un pronóstico de crecimiento anual del mercado de IA y un impacto potencial en la automatización laboral.

Ambos informes coinciden y resaltan las oportunidades y desafíos de la IA generativa, subrayando la importancia de una implementación estratégica para maximizar beneficios y mitigar riesgos.

Deloitte, por su parte, explora en otro interesante trabajo cómo la tecnología está transformando el mundo del trabajo. En este caso, la consultora destaca que integrar experiencias digitales aumenta la productividad en un 20%, la cocreación entre equipos de tecnología y negocio es crucial, y la colaboración humano-máquina es indispensable. Las organizaciones deben adoptar modelos de trabajo ágiles, promover el aprendizaje continuo y reforzar la seguridad digital.

Gartner subraya en otra publicación que el 34% de los CEOs consideran la IA como el próximo gran tema de transformación, y un 49% tiene planes de productividad que incluyen IA generativa. El 87% ve más beneficios que riesgos en la IA, pero solo el 13% lidera personalmente su implementación.

Finalmente, PwC destaca en un estudio que el 57% de los trabajadores es optimista sobre su futuro laboral, pero el 39% teme quedarse obsoletos. Recordemos a este respecto, que la empresa de análisis Gallup ya ponía de manifiesto hace un par de años que el 22% de los trabajadores estadounidenses están preocupados por quedarse obsoletos y ser sustituidos por la tecnología.

Esto se conoce como FOBO (Fear of Becoming Obsolete) y es un concepto relacionado con la automatización en el mundo del trabajo. Para combatir este nuevo desafío, las empresas deben potenciar la flexibilidad laboral, el bienestar laboral y la capacitación continua, así como la adopción de tecnologías digitales y la promoción de diversidad e inclusión.