La Quinta Torre del madrileño Paseo de la Castellana empieza a vislumbrar su futuro después de meses de incertidumbre. El futuro rascacielos estará listo, previsiblemente, para 2019. Y el inquilino, si las negociaciones no se tuercen será el Instituto de Empresa (IE Business School).

“Las negociaciones están muy avanzadas con el IE, pero también tenemos otros candidatos”, ha asegurado este jueves Juan Miguel Villar Mir, presidente de OHL, tras la presentación de resultados del grupo constructor. “El acuerdo podría anunciarse en unas semanas”, adelantó.

Una vez esté el acuerdo, la construcción del nuevo rascacielos llevará aproximadamente cuatro años. “Un año para desarrollar el proyecto y otros tres para la construcción”, adelantó. La torre tendrá una superficie de 56.000 metros cuadrados, los mismos que los cuatro rascacielos actuales que coronan la Castellana. “No hemos desarrollado aún el proyecto, porque hay que hacerlo a medida de lo que necesite el cliente, pero será más sencillo que la actual [la Torre Espacio, en la que está la sede de OHL] porque es sólo un inquilino”, matizó Villar Mir.

El Instituto de Empresa ocupará la torre tanto para cursos de postgrado como para uso dotacional universitario. Pero la torre no será el único edificio que contará el actual solar del Ayuntamiento de Madrid, que ha cedido su utilización al grupo Villar Mir por un plazo de 75 años. En el, inicialmente, estaba previsto construir un Palacio de Congresos, de hecho ya está ejecutadas las plantas de aparcamiento, pero el proyecto cayó en saco roto por la crisis.

Clínica y centro comercial

Junta a la torre, como módulos horizontales adyacentes se construirá una clínica y un centro comercial. Estos dos edificios tendrán una superficie aproximada de 12.000 metros cuadrados y, como inquilinos, se negocia, en ambos casos, con empresas españolas.

Inicialmente, el rascacielos que proyectaba el Grupo Villar Mir, el holding del que forma parte OHL, iba a ser más alto que las actuales cuatro torres y tener una superficie comercial de unos 70.000 metros cuadrados. El inquilino proyectado era el grupo médico estadounidense Monte Sinaí, pero se retiró del proyecto hace meses lo que llegó a poner en cuestión el desarrollo de la megaconstrucción.

Finalmente, la torre, con los 56.000 metros cuadrados proyectados, será similar en altura a las cuatro actuales y en su desarrollo, como ya sucede con el otro proyecto madrileño del grupo, el complejo Canalejas, se canalizará a través de la división OHL Desarrollos.