Es la historia de un millonario desesperado que vio como perdía cientos de millones de euros en cuestión de meses. Trinitario Casanova, promotor inmobiliario, compró el 3,5% del Banco Popular en marzo de 2008, días antes de la quiebra de Bear Stearns, por un importe próximo a los 530 millones de euros, en su mayoría a crédito y con las acciones pignoradas. Su financiador Fortis Bank -también quebrado tiempo después- comenzó a exigirle nuevas garantías conforme se desplomaba la cotización del Popu, que llegó a perder cerca del 50% de su valor durante los meses posteriores.
Ante aquel desastre, Casanova recurrió a la picaresca y al engaño para intentar salir del atolladero. Se inventó una OPA fantasma: un grupo de inversores mexicanos, agrupados en torno a la sociedad Blueprime, iba a lanzar una oferta de compra a un precio desorbitado -la prima superaba en un 50% a la cotización-. La sociedad Blueprime pronto acabó derivando en operación Blufprime... con Bluf de humo. No había nada. Casanova engaño para ello al primer ministro de Gibraltar y mintió a la CNMV, que también le sancionó. Ahora, ocho años después, es la justicia quien actúa.
Un año de cárcel
Finalmente, el Juzgado de lo Penal número 29 de Madrid ha condenado a un año de prisión al empresario Trinitario Casanova por manipular el mercado para hacer subir el precio de las acciones de Banco Popular en 2008. La magistrada también le impone un año de inhabilitación para intervenir en el mercado financiero como actor, mediador o informador, según consta en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press.
En este escenario de crash de las acciones, Casanova hizo circular durante junio de 2008 una información que acabó publicándose el extinto diario Negocio sobre el interés de un grupo inversor mexicano en Banco Popular. Según la sentencia, el promotor continuó enviando información falsa a los medios de comunicación durante un tiempo con el fin de mantener las acciones de Popular al alza. Trinitario llegó a viajar a Londres para constituir una sociedad llamada Blueprime.
Sin embargo, nada de aquello fue suficiente y en junio de 2008, Fortis ejecutó las acciones de Trinitario Casanova en Popular, que acabó perdiendo 170 millones de euros. La manipulación del mercado que llevó a cabo el empresario pudiese vender parte de sus acciones a un precio más elevado porque "afectó a la libre formación del precio de cotización de la acción de Banco Popular".