El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, no se ha cansado de repetir, en las últimas semanas, que la Comisión Europea no multará a España por incumplir el objetivo de déficit en 2015, sin embargo, el Comisario de Energía y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, no lo tiene tan claro: “Yo no hago apuestas sobre el resultado de esa decisión”. Cañete ha explicado que “el Colegio de Comisarios volverá a discutir el caso de la multa a España a partir de julio”, pero todas las opciones están sobre la mesa, incluso la de que España tenga que asumir la sanción más elevada posible, una multa de 2.800 millones de euros.
En cualquier caso, el comisario ha insistido que lo más importante para España (y el resto de países de la eurozona) es que “tenemos que cumplir las reglas del Pacto Estabilidad y Crecimiento”. Ahora que se van a celebrar elecciones y que el gobierno puede cambiar de la derecha a la izquierda, Cañete se acuerda de la importancia de cumplir con los compromisos adquiridos y que “no deben depender del color del gobierno”. “La preocupación de la Comisión es que cumplamos los objetivos, preocupación que el hoy comisario no tenía durante su etapa en el Gobierno del PP, que ha incumplido sus compromisos de déficit durante toda la legislatura.
El comisario ha recordado que Bruselas está ahora muy sensibilizada con que los programas económicos sean todo lo sociales que sea posible. Por este motivo, la Comisión reconoce que los ajustes necesarios para cumplir con el déficit deben ser flexibles para no lastrar el crecimiento económico y la creación de empleo.
Hacia un Presupuesto comunitario
Cañete ha alertado que los países de la eurozona no tienen las capacidades suficientes como para afrontar los retos de la economía global, por lo que es necesario avanzar hacia la integración política y económica. El comisario ha explicado que, si hay una lección que deja esta crisis, es que los socios europeos deben compartir riesgos, lo que significa avanzar hacia un presupuesto cada vez más integrado.
“A medida que las estructuras económicas vayan convergiendo, deberá crearse un mecanismo de estabilización presupuestaria”, ha indicado Cañete, para lo cual ha pedido determinación y altura de miras a los políticos: “Con el tiempo habrá que compartir más soberanía, la segunda economía del mundo no se puede gestionar con directivas”. Esto no sólo significa una política común, sino que los distintos países “tendrán que aceptar cesiones en sus presupuestos nacionales”.
La sombra de la corrupción
Cañete también ha tenido que dar explicaciones ante la prensa por su relación con el caso Acuamed y la relación de su mujer con los Papeles de Panamá. “Nunca tuve conocimiento de ninguna irregularidad administrativa”, ha asegurado. El comisario ha defendido las decisiones que adoptó en Aquamed: “Siempre tuve la base jurídica más sólida para tomar decisiones”. Según él, cuando tuvo que tomar decisiones “lo que hice fue pedir al servicio jurídico del estado que elaborase un informe”.