El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha detectado operaciones irregulares realizadas por los antiguos responsables de las entidades que han recibido ayudas públicas por valor de 3.500 millones de euros. Jaime Ponce, presidente de la entidad, ha acudido a la Comisión de Economía del Congreso para explicar la actuación de la entidad. En este contexto ha explicado que para el FROB, la “labor más importante” es detectar las posibles actuaciones irregulares de las que pueda verse perjudicada la entidad pública y, por tanto, el contribuyente.

En total, el fondo ha detectado 90 operaciones sospechosas de las cuales ha trasladado 47 a la fiscalía, de las cuales, 24 han ido por la vía penal. “El FROB decidió personarse en todos los procesos”, ha explicado Ponce, “de las 24 causas penales, 20 las ha puesto en marcha el Frob”. Una vez que se trasladan a la fiscalía, el FROB “coopera constantemente” y, en el caso de las causas penales “suele pedir la misma condena que el ministerio fiscal”. “Hemos dedicado mucha atención a esto”, ha advertido Ponce, ya que el objetivo es velar por los intereses de los contribuyentes.

El presidente del fondo de rescate ha apuntado que existen dos causas “que pueden generar cierta falta de credibilidad, los casos de Nova Caixa Galicia (NGC) y la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). En el caso de NCG, tras la sentencia de la Audiencia Nacional en la que buscaba un recurso de casación, “ninguna parte acusadora recurre”, ha señalado Ponce, por lo que “la actuación es verdaderamente diligente”. En cuanto al caso de la CAM, la parte afectada era el Fondo de Garantía de Depósitos, que fue quien inyectó los 11.000 millones de ayudas en la entidad.

El total de las ayudas públicas canalizadas a través del Frob asciende hasta 59.000 millones de euros, de los cuales, se han recuperado menos de 5.000 millones. Pero toda la diferencia no es dinero perdido, ya que el Frob todavía tiene activos en su balance, como son las participaciones en BFA-Bankia, BMN y Sareb. Además tiene dos instrumentos híbridos, los CoCos de Ceiss e Ibercaja, cuyo valor asciende a 604 y 387 millones de euros respectivamente además de 140 millones de euros en intereses. “Estimamos que la recuperación de estos híbridos será completa”, ha apuntado Ponce.

El resto del dinero que pueda recuperarse dependerá del valor al que se puedan vender las participaciones existentes en BFA-Bankia y BMN. “La cifra última dependerá de la puesta en valor de la participación más relevante que es Bankia y BMN”, ha explicado Ponce, “lo más responsable es que hagamos el mayor esfuerzo posible para determinar el valor de las participadas”. El FROB tiene hasta finales de 2017 para desinvertir de las dos entidades.

El objetivo actual de la entidad es estudiar cuál es el modelo más rentable para los contribuyentes. En este caso es fundamental analizar los efectos económicos que tendría una posible fusión entre Bankia y BMN con el objetivo de vender la participación al mayor precio posible. El fondo de rescate ha puesto en marcha un proceso de asesoramiento externo que culminará en la elaboración de un informe que determinará si es conveniente ejecutar esa fusión.

“Si se considera que la integración es óptima para el FROB, necesariamente tendrían que integrarse”, ha advertido Ponce. Esto significa que la Comisión Europea aceptará que España fusione a las dos entidades si así se consigue maximizar la devolución de las ayudas públicas.